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Falso empoderamiento femenino

¿Que es empoderarse?

El empoderamiento femenino finalmente no consiste en ideas vacías sobre vestimenta, maquillaje o estilos de vida establecidos, es más bien un proceso personal de las mujeres en el cual encuentran su propia confianza y se logran posicionar con sus propias capacidades y habilidades dentro de una sociedad machista y patriarcal. En este contexto, la importancia radica en el apoyo mutuo y en dejar de competir entre nosotras mismas para alcanzar un ideal impuesto socialmente. Fuente: ONU Mujeres México Fuente: Raíces Ultravioletas Twitter

Este concepto hace alusión al conjunto de actitudes, creencias y comportamientos que nos hacen creer que estamos empoderándonos, cuando en realidad lo que se busca es instaurar otro tipo de presión social para la mujeres. La idea consiste en un discurso de libertad y poder que termina por perpetuar más estereotipos y prejuicios a la figura de la mujer. Generando sentimientos de culpa a aquellas que no están cumpliendo con las nuevas expectativas impuestas. Fuente: Kuestiona Fuente: Andyn Ilustración

Aún la sociedad y las mujeres no terminan de asimilar la asunción del empoderamiento femenino, cuando surge su antagonista, el falso empoderamiento. Para teóricas feministas el problema radica en que a pesar de todo el trabajo hecho por diversas activistas, políticas, artistas y diversas mujeres dentro de sus respectivas áreas donde se desenvuelven, el sistema en que nos encontramos inmersas es el mismo. El Patriarcado continua estableciendo el comportamiento femenino, esta vez camuflado de la idea empoderamiento, perpetua otros tipos de violencia simbólica. Fuente: Kuestiona

¿Qué es lo problemático del falso empoderamiento? al momento de reflexionar en profundidad sobre las nuevas presiones que impone el imaginario de una "mujer empoderada", podemos rápidamente notar cómo se nos quiere dominar simbólicamente nuestra capacidad de decisión. Sin embargo, esta construcción social del ideal de mujer actual y su papel en la sociedad, ha contribuido a que luchas ganadas hace poco sean olvidadas y se retroceda en muchas materias que costaron décadas poner en discusión. Fuente: Comunidad Mujeres Empoderadas Fuente: Dani Soon

Uno de los ejemplos de los retrocesos que significa el falso empoderamiento femenino, es el hecho de que vuelve a instalar una competencia entre las mujeres. La sororidad queda relegada para abrir paso nuevamente a la idea de competir entre nosotras. En este sentido, las críticas en relación al aspecto físico y/o comportamientos femeninos vuelven a ser tema de conversación con la intención de instalar una idea de empoderamiento sobre otra. Fuente: Comunidad de Mujeres Empoderadas Autora de la imagen: Maitena Fuente: De(s)generando el género

Esta tendencia a buscar erróneamente el empoderamiento femenino, cae en establecer nuevas expectativas o ideales en la vida de las mujeres. Estableciendo nuevos cánones de éxitos que se debiesen alcanzar o disfrazando la idea de empoderamiento con resaltar aspectos físicos o de estilos de vida de las mujeres. Claramente esto genera una presión social en la mujeres por intentar alcanzar lo que la sociedad actualmente está estableciendo, esto se acompaña de un sentimiento de culpa cuando no se alcanzan estos "ideales".

Otra de las ideas que implanta el falso empoderamiento, es el hecho de decidir realmente sobre nuestros cuerpos. La noción de amor propio o de libertad a la hora de elegir si quiero mostrar o no más piel, termina cayendo en la discusión de que las mujeres seguimos siendo cosificadas y sexualizadas. Por lo tanto, no deberíamos adoptar esas actitudes en nuestra cotidianidad, sin embargo, esta controversia limita nuestra propia capacidad de decidir cómo queremos comportarnos frente al mundo, lo que representaría una verdadera idea de empoderamiento. Fuente: Indómita Pinterest La Jes Fuente: Indómita