Teoría de la autocriticabilidad organizada
Cristina Castellanos y Katherine Moreno
Empezar
¿Qué es?
La Teoría de la autocriticabilidad organizada plantea que las organizaciones pueden comprenderse como sistemas vivos autopoiéticos, es decir, sistemas que se producen y mantienen a sí mismos mediante redes de procesos interconectados (Quintero et al., 2020).
Origen y bases teorías
El origen intelectual de la teoría remite a los trabajos biofísicos y epistemológicos de Maturana y Varela en las décadas de 1970–1980, donde autopoiesis se propuso como una condición distintiva de lo vivo y como fundamento para repensar cognición y acción en sistemas autónomos
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Principios operativos e implicaciones prácticas
Uno de los principios centrales de esta teoría es la coexistencia entre autonomía y dependencia. Por un lado, las organizaciones mantienen su identidad gracias a los procesos internos que les dan continuidad; por otro, no pueden desligarse de su entorno, ya que interactúan de manera estructural con él y reciben perturbaciones constantes. Esta tensión obliga a establecer mecanismos de vigilancia, retroalimentación y ajuste continuo que permitan adaptarse sin perder la esencia organizacional. Otro principio fundamental es la autocriticidad interna, entendida como la necesidad de crear espacios de reflexión permanente, tales como auditorías internas, foros de discusión o procesos participativos. Estas prácticas permiten detectar desviaciones o inconsistencias y, a la vez, rediseñar procesos de manera que se mantenga la coherencia entre la identidad de la organización y las demandas del contexto.
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Aplicaciones y ejemplos
Configuración de estructuras orgánicas
Las implicaciones prácticas de esta teoría son diversas. Una de las principales aplicaciones se da en el diseño de procesos de aprendizaje organizacional.
...Gestión del cambio
Los hallazgos de la Teoría de la autocriticabilidad organizada se conectan de manera directa con los desafíos y tendencias actuales de las organizaciones en entornos complejos, volátiles e inciertos.
Relación con la actualidad y tendencias futuras
En la actualidad, las organizaciones enfrentan cambios acelerados (transformación digital, crisis sanitarias, sostenibilidad ambiental, disrupciones tecnológicas, tensiones sociales y geopolíticas) que demandan no solo capacidad de adaptación, sino también mecanismos institucionalizados de aprendizaje y autocrítica
Su énfasis en la autocrítica institucionalizada anticipa tendencias futuras hacia sistemas organizativos más ágiles, autoorganizados y capaces de aprender en tiempo real.
En este sentido, la teoría resulta pertinente porque plantea que las organizaciones deben mantener su identidad operativa (quiénes son y cuál es su propósito) al mismo tiempo que ajustan sus estructuras, procesos y prácticas frente a perturbaciones externas.
Referencias
Bianchini, F. (2023). Autopoiesis of the artificial: From systems to cognition. BioSystems, 230, Article 104936. https://doi.org/10.1016/j.biosystems.2023.104936
Heylighen, F., y Busseniers, E. (2023). Modeling autopoiesis and cognition with reaction networks. BioSystems, 230, Article 104937. https://doi.org/10.1016/j.biosystems.2023.104937
Mancheno-Saá, M. J., Bermúdez-Santana, D. J., y Pérez-Barrionuevo, A. d. R. (2019). De la teoría científica a la de criticabilidad auto organizada: Un entorno que exige cambios sustanciales en la administración. FIPCAEC, Vol. 4 (Edición especial), 595–612. https://doi.org/10.23857/fipcaec.v4i4.156
Quintero, W., Peñaranda, M., y Rodriguez, M. (2019). Natualeza de las organizaciones y sus costos de transacción: Análisis de la teoría de la agencia, teoría de la organización y teoría de la firma. Revista Espacios, 41(31).
Santillán-Vega, R. (2021). De la teoría de la organización a la organización universitaria. Devenir histórico desde una visión documental. Revista Científica FIPCAEC, 6(1). https://doi.org/10.23857/fipcaec.v6i1.382
¡Muchas Gracias!
Los autores señalaron que la cognición es un fenómeno biológico, inseparable del hecho de vivir. Esta noción sirvió como cimiento conceptual para trasladar la idea de sistemas vivos al estudio de las organizaciones. Cuando se habla de autocriticabilidad organizada, se hace referencia a la capacidad de las organizaciones de estructurarse como redes dinámicas capaces de crear o eliminar elementos internos (como procedimientos, roles o estructuras) en respuesta a perturbaciones del entorno. En ese sentido, la organización no es una entidad rígida, sino un sistema en constante proceso de ajuste y autorrevisión, lo que la hace más resiliente y adaptativa. Este planteamiento se conecta también con otros enfoques de sistemas sociales, como la teoría de Niklas Luhmann, y con marcos teóricos sobre complejidad y autoorganización que explican el funcionamiento de empresas y colectivos en contextos cambiantes (Quintero et al., 2020).
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Los autores señalaron que la cognición es un fenómeno biológico, inseparable del hecho de vivir. Esta noción sirvió como cimiento conceptual para trasladar la idea de sistemas vivos al estudio de las organizaciones. Cuando se habla de autocriticabilidad organizada, se hace referencia a la capacidad de las organizaciones de estructurarse como redes dinámicas capaces de crear o eliminar elementos internos (como procedimientos, roles o estructuras) en respuesta a perturbaciones del entorno. En ese sentido, la organización no es una entidad rígida, sino un sistema en constante proceso de ajuste y autorrevisión, lo que la hace más resiliente y adaptativa. Este planteamiento se conecta también con otros enfoques de sistemas sociales, como la teoría de Niklas Luhmann, y con marcos teóricos sobre complejidad y autoorganización que explican el funcionamiento de empresas y colectivos en contextos cambiantes (Quintero et al., 2020).
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En esta misma línea, la teoría propone concebir a las organizaciones como redes de procesos dinámicos. Esto significa que los distintos roles, procedimientos y unidades no son estructuras fijas, sino elementos que pueden surgir, transformarse o desaparecer según lo requiera la interacción con el entorno. De este modo, las organizaciones se alejan de los modelos burocráticos rígidos y se acercan a formas más orgánicas y flexibles.
Finalmente, se destaca el papel central de la comunicación y la toma de decisiones. La comunicación no solo transmite información, sino que constituye el proceso mismo por el cual la organización se construye, se mantiene y se transforma. Por ello, el diseño de canales claros, transparentes y participativos es clave para sostener la autocriticabilidad organizada y garantizar que las decisiones reflejen tanto la identidad interna como las exigencias externas (Santillán-Vega, 2021).
Teoría de la autocriticabilidad organizada
Anyie Moreno
Created on September 13, 2025
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Teoría de la autocriticabilidad organizada
Cristina Castellanos y Katherine Moreno
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¿Qué es?
La Teoría de la autocriticabilidad organizada plantea que las organizaciones pueden comprenderse como sistemas vivos autopoiéticos, es decir, sistemas que se producen y mantienen a sí mismos mediante redes de procesos interconectados (Quintero et al., 2020).
Origen y bases teorías
El origen intelectual de la teoría remite a los trabajos biofísicos y epistemológicos de Maturana y Varela en las décadas de 1970–1980, donde autopoiesis se propuso como una condición distintiva de lo vivo y como fundamento para repensar cognición y acción en sistemas autónomos
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Principios operativos e implicaciones prácticas
Uno de los principios centrales de esta teoría es la coexistencia entre autonomía y dependencia. Por un lado, las organizaciones mantienen su identidad gracias a los procesos internos que les dan continuidad; por otro, no pueden desligarse de su entorno, ya que interactúan de manera estructural con él y reciben perturbaciones constantes. Esta tensión obliga a establecer mecanismos de vigilancia, retroalimentación y ajuste continuo que permitan adaptarse sin perder la esencia organizacional. Otro principio fundamental es la autocriticidad interna, entendida como la necesidad de crear espacios de reflexión permanente, tales como auditorías internas, foros de discusión o procesos participativos. Estas prácticas permiten detectar desviaciones o inconsistencias y, a la vez, rediseñar procesos de manera que se mantenga la coherencia entre la identidad de la organización y las demandas del contexto.
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Configuración de estructuras orgánicas
Las implicaciones prácticas de esta teoría son diversas. Una de las principales aplicaciones se da en el diseño de procesos de aprendizaje organizacional.
...Gestión del cambio
Los hallazgos de la Teoría de la autocriticabilidad organizada se conectan de manera directa con los desafíos y tendencias actuales de las organizaciones en entornos complejos, volátiles e inciertos.
Relación con la actualidad y tendencias futuras
En la actualidad, las organizaciones enfrentan cambios acelerados (transformación digital, crisis sanitarias, sostenibilidad ambiental, disrupciones tecnológicas, tensiones sociales y geopolíticas) que demandan no solo capacidad de adaptación, sino también mecanismos institucionalizados de aprendizaje y autocrítica
Su énfasis en la autocrítica institucionalizada anticipa tendencias futuras hacia sistemas organizativos más ágiles, autoorganizados y capaces de aprender en tiempo real.
En este sentido, la teoría resulta pertinente porque plantea que las organizaciones deben mantener su identidad operativa (quiénes son y cuál es su propósito) al mismo tiempo que ajustan sus estructuras, procesos y prácticas frente a perturbaciones externas.
Referencias
Bianchini, F. (2023). Autopoiesis of the artificial: From systems to cognition. BioSystems, 230, Article 104936. https://doi.org/10.1016/j.biosystems.2023.104936 Heylighen, F., y Busseniers, E. (2023). Modeling autopoiesis and cognition with reaction networks. BioSystems, 230, Article 104937. https://doi.org/10.1016/j.biosystems.2023.104937 Mancheno-Saá, M. J., Bermúdez-Santana, D. J., y Pérez-Barrionuevo, A. d. R. (2019). De la teoría científica a la de criticabilidad auto organizada: Un entorno que exige cambios sustanciales en la administración. FIPCAEC, Vol. 4 (Edición especial), 595–612. https://doi.org/10.23857/fipcaec.v4i4.156 Quintero, W., Peñaranda, M., y Rodriguez, M. (2019). Natualeza de las organizaciones y sus costos de transacción: Análisis de la teoría de la agencia, teoría de la organización y teoría de la firma. Revista Espacios, 41(31). Santillán-Vega, R. (2021). De la teoría de la organización a la organización universitaria. Devenir histórico desde una visión documental. Revista Científica FIPCAEC, 6(1). https://doi.org/10.23857/fipcaec.v6i1.382
¡Muchas Gracias!
Los autores señalaron que la cognición es un fenómeno biológico, inseparable del hecho de vivir. Esta noción sirvió como cimiento conceptual para trasladar la idea de sistemas vivos al estudio de las organizaciones. Cuando se habla de autocriticabilidad organizada, se hace referencia a la capacidad de las organizaciones de estructurarse como redes dinámicas capaces de crear o eliminar elementos internos (como procedimientos, roles o estructuras) en respuesta a perturbaciones del entorno. En ese sentido, la organización no es una entidad rígida, sino un sistema en constante proceso de ajuste y autorrevisión, lo que la hace más resiliente y adaptativa. Este planteamiento se conecta también con otros enfoques de sistemas sociales, como la teoría de Niklas Luhmann, y con marcos teóricos sobre complejidad y autoorganización que explican el funcionamiento de empresas y colectivos en contextos cambiantes (Quintero et al., 2020).
Con esta función puedes añadir contenido adicional
Los autores señalaron que la cognición es un fenómeno biológico, inseparable del hecho de vivir. Esta noción sirvió como cimiento conceptual para trasladar la idea de sistemas vivos al estudio de las organizaciones. Cuando se habla de autocriticabilidad organizada, se hace referencia a la capacidad de las organizaciones de estructurarse como redes dinámicas capaces de crear o eliminar elementos internos (como procedimientos, roles o estructuras) en respuesta a perturbaciones del entorno. En ese sentido, la organización no es una entidad rígida, sino un sistema en constante proceso de ajuste y autorrevisión, lo que la hace más resiliente y adaptativa. Este planteamiento se conecta también con otros enfoques de sistemas sociales, como la teoría de Niklas Luhmann, y con marcos teóricos sobre complejidad y autoorganización que explican el funcionamiento de empresas y colectivos en contextos cambiantes (Quintero et al., 2020).
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En esta misma línea, la teoría propone concebir a las organizaciones como redes de procesos dinámicos. Esto significa que los distintos roles, procedimientos y unidades no son estructuras fijas, sino elementos que pueden surgir, transformarse o desaparecer según lo requiera la interacción con el entorno. De este modo, las organizaciones se alejan de los modelos burocráticos rígidos y se acercan a formas más orgánicas y flexibles. Finalmente, se destaca el papel central de la comunicación y la toma de decisiones. La comunicación no solo transmite información, sino que constituye el proceso mismo por el cual la organización se construye, se mantiene y se transforma. Por ello, el diseño de canales claros, transparentes y participativos es clave para sostener la autocriticabilidad organizada y garantizar que las decisiones reflejen tanto la identidad interna como las exigencias externas (Santillán-Vega, 2021).