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Emociones en Acción: La Simulación Clínica como Herramienta de Aprendizaje Experiencial EN EL GRADO DE ENFERMERÍA.

CARLOS NIEVES RODRIG

Created on July 13, 2025

La simulación clínica trasciende la práctica técnica para convertirse en un espacio de formación integral donde las emociones se transforman en competencias profesionales.

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Transcript

Emociones en Acción: La Simulación Clínica como Herramienta de Aprendizaje Experiencial EN EL GRADO DE ENFERMERÍA.

CARLOS MANUEL NIEVES RODRIGUEZ.

¡vamos!

Resumen

La simulación clínica permite a los estudiantes de enfermería experimentar emociones reales en un entorno seguro, desde la ansiedad del primer contacto con el paciente hasta la satisfacción de brindar un cuidado efectivo. Estas emociones no son casuales: son el motor que impulsa un aprendizaje profundo y significativo en la formación enfermera.

¿Cómo preparamos a los estudiantes de enfermería para enfrentar la realidad emocional de su futura profesión? La simulación clínica ofrece la respuesta al crear escenarios donde las emociones emergen naturalmente, permitiendo que los futuros enfermeros aprendan a gestionar tanto los aspectos técnicos como humanos del cuidado.

Comunicación y emociones en estudiantes de enfermería.

La mejora en la atención al paciente es crucial en las sociedades contemporáneas, vinculada estrechamente con el diagnóstico, tratamiento y evolución de la enfermedad, así como con la satisfacción del paciente y su familia (1). La formación de los graduados en enfermería debe enfocarse en cultivar competencias profesionales que garanticen una atención al paciente de calidad, segura y eficaz (2). Los estudiantes de enfermería deben demostrar conocimientos, habilidades clínicas y competencias emocionales y comunicativas,(3) para establecer relaciones terapéuticas efectivas y mantener la calidad asistencial (4). Es por ello por lo que necesitan actividades de simulación para mejorar estas habilidades y preparar a los estudiantes para los desafíos de la práctica profesional (5).

PROYECTOS DOCENTES DE INNOVACIÓN EDUCATIVA.

01

El 70% de los estudiantes participantes en proyectos de innovación educativa, han mostrado una alta satisfacción tras el uso de la simulación en el aula, reconociendo su valor tanto para el paciente como para su propio desarrollo profesional y personal. El 82,7% valoraron que la simulación ofrece a los estudiantes una oportunidad estructurada para practicar habilidades de comunicación, empatía e inteligencia emocional. Además, estas habilidades tienen un impacto significativo tanto en la satisfacción y calidad del cuidado del paciente, como en la formación de los estudiantes de enfermería en términos de toma de decisiones, pensamiento crítico y gestión del conocimiento.

INTERVENCIONES DE CUIDADO.

Cuando enfermería desarrolla las intervenciones de cuidado, activa su amígdala, permitiéndole reconocer las necesidades de ayuda, pero también, su corteza prefrontal, su razonamiento lógico, con el fin de ubicar dentro de su espacio cognoscitivo, los aspectos técnicos y procedimentales a emplear, para satisfacer la necesidad descubierta, poder aliviar el sufrimiento y mejorar la condición de salud del paciente.

ABORDAJE DE LAS EMOCIONES EN SIMULACIÓN CLÍNICA

72M

164k

CONSIDERACIÓN 2.

CONSIDERACIÓN 1.

3.5k

CONSIDERACIÓN 3.

El contenido visual es un lenguaje transversal, universal, como la música. Somos capaces de entender imágenes de hace millones de años, incluso de otras culturas.

vs

Pero, nadie espera que esto suceda, el deber ser sería, un profesional de enferme ría, desarrollando una excelente conexión emocional (identificar al que sufre y sufrir con el), la inferencia social (identificación de la necesidad concreta) y el sentido de responsabilidad (saber qué hacer para mejorar la realidad); por ello, luchan contra los síntomas, pero la situación se vuelve cíclica, difícil de controlar y de superar, por lo que terminan minando su salud física, mental y emocional..

Cuando se incrementa el nivel de estrés, se genera mayor ansiedad y el profesional se vuelve reactivo, como mecanismo de defensa ante los hechos que le superan, provocando una disminución de la expresión compasiva. .

Facilitando la Expresión Emocional en Simulación Clínica.

Concepto 3
Concepto 2
Concepto 1
USO DE PREGUNTAS ABIERTAS
NORMALIZAR EMOCIONES
AMBIENTE SEGURO

Aprender a gestionar emociones es aprender a ser enfermera

Cada emoción en simulación es una oportunidad de crecimiento.

La simulación clínica despierta emociones auténticas que se convierten en poderosas herramientas de aprendizaje para los futuros enfermeros. Cuando los estudiantes aprenden a reconocer y gestionar estas emociones en un entorno seguro, desarrollan la inteligencia emocional necesaria para brindar un cuidado más humanizado y efectivo. Así, cada escenario simulado no solo entrena habilidades técnicas, sino que forja profesionales capaces de mantener la calma, la empatía y la precisión en los momentos más críticos.

TARJETAS DE EMOCIONES PARA SIMULACIÓN CLÍNICA

ANSIEDAD

MIEDO

FRUSTRACIÓN.

CONFUSIÓN

Rúbrica evaluativa durante la actividad simulada en el aula de simulación

'Enfermería, es una profesión, que demanda la presencia de las emociones como mecanismo de interconexión e interrelación, para obtener información de la situación real del paciente, valorar su salud, identificar sus necesidades, y así poder planificar y organizar cada una de las actividades tendientes a satisfacerlas. Se puede moderar, controlar o mejorar la res puesta emocional, emplear técnicas de apoyo a enfermería para que sus emociones convivan junto con las de la persona cuidada, pero, lo que no se puede hacer, es anular la expresión de sus emociones como cuidador.

CONCLUSIONES.

La simulación clínica trasciende la práctica técnica para convertirse en un espacio de formación integral donde las emociones se transforman en competencias profesionales. Los estudiantes de enfermería que aprenden a sentir, procesar y gestionar sus emociones en escenarios simulados, se preparan no solo para ser técnicamente competentes, sino para ser cuidadores empáticos y resilientes. En definitiva, cuando integramos el componente emocional en la simulación clínica, no solo estamos formando enfermeros más preparados, sino personas más humanas capaces de cuidar con ciencia y conciencia.

¡Gracias!

c.nieves@uib.cat carlos nieves

INICIO

IMPLICACIÓN EMOCIONAL

La etiología de la implicación emocional reside en la transformación de la relación interpersonal en emoción, lo cual ocurre, a través de un contagio emocional mediante un proceso de imitación por parte del profesional de enfermería, en el que se requiere el proceso cognitivo consciente, la respuesta emocional condicionada y la retroalimentación de la comunicación de los estados emocionales del paciente, además, para que se produzca el contagio, la emoción debe ser fuerte y expresada de tal forma, que el receptor pueda percibirla, e identificarse con ella a través de las neuronas espejo.

  • La consecuencia para enfermería, de convertir una relación interpersonal en emocional, es la dificultad para diferenciar las emociones sentidas, de las percibidas desde el exterior a través del paciente, lo cual conlleva a la pérdida de objetividad. Este profesional debe ser capaz de mantener la objetividad, para ello, debe conservar la holisticidad en la organización del cuidado (administrativo), el trabajo técnico (práctica) y el trabajo emocional, todos desarrollados sin que ninguno impere de manera relevante sobre el otro, garantizando la integralidad en la expresión del cuidado humano brindado no solo hacia el paciente, sino además hacia sí mismo.

CONCEPTO EMOCIONAL

En enfermería, saber manejar las propias emociones es tan crucial como dominar las técnicas de cuidado, y la simulación clínica se convierte en el laboratorio perfecto para esta formación integral. Cuando los estudiantes sienten miedo, compasión, estrés o satisfacción en escenarios simulados, están entrenando no solo sus habilidades técnicas, sino su inteligencia emocional.

Este entrenamiento emocional es fundamental porque el futuro enfermero debe aprender a transformar la ansiedad en concentración, la empatía en acción terapéutica, y la presión en decisiones clínicas acertadas. La simulación clínica ofrece un espacio seguro donde estas emociones pueden emerger, ser reconocidas, procesadas y canalizadas hacia un cuidado más humanizado y efectivo. Así, cada escenario simulado se convierte en una oportunidad para desarrollar esa competencia emocional que distingue a los grandes profesionales de enfermería: la capacidad de mantener la calma en la tormenta y encontrar la calidez humana en medio de la técnica.

ABORDAJE EMOCIONAL

En cuanto al trabajo emocional, la presencia de habilidades como el autocontrol, el entusiasmo, la automotivación, la empatía, entre otros, facilita alinear recursos anímicos que propician mayor habilidad en la resolución de problemas y en fomentar relaciones interpersonales armoniosas, aumentando así habilidades sociales, lo que le ayuda a potenciar el rendimiento laboral y generar defensas para la reacción positiva a la tensión y al stress. Para Watson, el objetivo de la enfermería consiste en facilitar al paciente la consecución de un mayor grado de armonía entre mente, cuerpo y alma, que engendre procesos de autoconocimiento, respeto a uno mismo, autocuración y autocuidado.

Este objetivo, no solo guarda relación con el proceso de asistencia a la persona cuidada, además, incluye al cuidador, porque nadie puede dar lo que no tiene, no se puede cuidar de la salud de otro si se carece de la propia. He allí, la importancia de que enfermería aprenda a controlar y adaptar sus emociones y su conducta, a las diversas circunstancias con las que convive tanto en su entorno personal, como en el laboral, pues así, evitara en gran medida las situaciones de estrés mantenido y con ello la somatización de sus emociones.

Watson también plantea que la enfermera debe estar prepa rada ante posibles sentimientos tanto positivos como negativos, y reconocer que la comprensión intelectual y emocional de una situación no tiene por qué coincidir; es decir no es necesario que sienta o exprese empatía extrema por el paciente, para ayudarle a satisfacer su necesidad. Con esto Watson, invita a comprender la mutua relación entre pensamientos, emociones y comportamiento; dejando una especie de advertencia respecto a que compartir los sentimientos es una experiencia riesgosa, tanto para el paciente como para enfermería.

Cuando el profesional de enfermería no dispone de las herramientas de protección emocional adecuada a las exigencias de su rutina laboral, en presencia de estrés post traumático, o experiencias negativas del pasado, que generan dejavu y traen al presente emociones fuertes, que le hace revivir circunstancias que creían olvidadas o que no quieren recordar, puede presentarse como respuesta neurobiológica emocional fuertes estados de estrés e incluso negativa a atender a cierto tipo de pacientes (evitación).

Por tanto, el manejo inadecuado entre emociones y pensamientos, se suma al estrés continuo por la falta de recursos, pensar en las muertes que se pudieron evitar, la falta de mate rial, la ausencia constante de personal, el déficit salarial, las urgencias vitales de las áreas específicas, entre otros, que conlleva a sufrir o ser más propensos a afectaciones más complejas, como el desgaste y la fatiga por compasión (respuesta emocional evidenciada por la vivencia de forma repetitiva y rutinaria de presenciar el sufrimiento de los pacientes, generando sensación de desgaste). Esto, no sólo afecta al profesional de enfermería, físico y psico-emocional, además, trae consigo consecuencias negativas para el paciente, como resultado de mala praxis.

ADAPTACIÓN EMOCIONAL.

El profesional de enfermería debe desplegar una relación con efectos terapéuticos y tomar en cuenta que cuidar requiere de conocimientos, actitudes y habilidades técnicas, emocionales y espirituales. Dicha interrelación, permitirá el establecimiento de una relación de confianza y ayuda enfermera paciente, para facilitar los cuidados integrales, manteniendo una actitud de escucha activa y una asertiva comunicación a través de un mensaje comprensible y una conducta positiva. Esto, junto a una adecuada adaptación emocional, repercutirá positivamente en la satisfacción de las necesidades del paciente.

Para enfermería, la comunicación no verbal, es significativa, debido a que de ella se recibe mucha información, e incluso, permite verificar los datos verbales del paciente y los familiares. A través de la relación enfermera-paciente, el profesional de enfermería procura desarrollar una interrelación más personal, casi intima que le permita obtener la confianza necesaria, para acceder a las emociones del paciente, creando un vínculo emocional, entre este y los distintos ámbitos de su vida. Basado en la percepción de la carga sentimental, dicho vínculo caracteriza a la implicación emocional.

Es importante recordar que la relación interpersonal de cuidado da pie al proceso de pensamiento y que existen dos formas de procesar los pensamientos, una forma primitiva de carácter rápido y emocional, de donde surgen las emociones más primitivas, como el instinto de salvarse (huir o luchar), caracterizado por una actuación rápida y la segunda forma el pensamiento lento y racional, que permite tomar decisiones premeditadas que no necesitan urgencia. El problema en el ámbito de enfermería se presenta cuando todas las decisiones que se toman a lo largo de la jornada se procesan de manera emocional, es decir, de manera primitiva.