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Psicopatologías Cognitivas y Sensoperceptivas
Paulo Garza Peña Monraz
Created on March 23, 2025
Mapa conceptual con las principales alteracioens de los trastornos Cognitivos y sensoperceptivos.
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El cerebro recibe constantemente información que no es posible procesar completamente, por lo que resulta imprescindible un mecanismo que seleccione y organice las prioridades, determinando las respuestas más apropiadas para cada situación (Portellano, 2005; citado por García, s.f.a). Según Portellano (2005, p. 144, citado por García, s.f.a), la atención desempeña un papel clave en este proceso de selección dentro del sistema nervioso y actúa como el eje central de todos los procesos cognitivos. Cuando existen alteraciones patológicas en la atención, se generan inevitablemente trastornos cognitivos que varían en intensidad. La atención, en esencia, implica concentrarse selectivamente en un estímulo específico, al tiempo que se filtran y descartan las informaciones irrelevantes. Antes de realizar cualquier proceso cognitivo, es necesario un grado previo de selección de estímulos, lo cual depende del funcionamiento de los mecanismos de atención (Portellano, 2015, p. 144; citado por García, s.f.a).
El paciente permanece completamente inconsciente, incapaz de reaccionar ante ningún estímulo, incluyendo el dolor. En casos de coma profundo, no hay respuesta alguna. Esta condición surge cuando la irrigación sanguínea al cerebro es insuficiente, lo que lleva al cerebro a minimizar su consumo energético para proteger las neuronas (García, s.f.a).
De acuerod con García (s.f.a), esta condición se caracteriza por una alteración severa del estado de vigilia, acompañada de apatía extrema, ausencia de iniciativa tanto mental como física y verbal, y una actitud indiferente ante cualquier tipo de estímulo. Los pacientes no realizan movimientos espontáneos ni responden a órdenes, preguntas o estímulos, permaneciendo en silencio de manera continua. Este trastorno puede manifestarse en diferentes grados, desde un estado de abulia, con inhibición psicomotora, apatía, escasez en el lenguaje y falta de espontaneidad, hasta un estado vegetativo crónico en casos más graves. Apatía: Falta de interés, motivación o entusiasmo que lleva a la indiferencia ante estímulos externos. Abulia: Ausencia de energía o voluntad para realizar acciones o moverse.
Alteraciones que afectan la Orientación Alopsíquica, la cual facilita el reconocimiento y la orientación espacial del entorno y la lectura de planos y mapas (García, s.f.a).
García (s.f.a) señala que este síndrome se manifiesta cuando hombres y mujeres ignoran de manera persistente una mitad de su espacio atencional. Se caracteriza por la incapacidad para responder a estímulos visuales, táctiles o auditivos ubicados en el lado contrario al de la lesión, sin que este déficit pueda atribuirse a daños en las áreas cerebrales primarias ni a problemas en la ejecución motora. Es más común y severo en casos de lesiones en el hemisferio derecho del cerebro.
De acuerdo con García (s.f.a), en 1924, el neurólogo Josef Gertzman identificó un trastorno relacionado con el esquema corporal que más tarde fue conocido como el Síndrome de Gertzmann. Este trastorno se origina debido a lesiones en el área 39 o giro angular del hemisferio izquierdo del cerebro. Según Portellano (2005, p. 92; citado por García, s.f.a), los síntomas principales de este síndrome incluyen dificultad para reconocer o nombrar los dedos de la mano (agnosia digital), confusión al diferenciar entre derecha e izquierda, problemas adquiridos para realizar cálculos (acalculia) y la incapacidad para escribir pensamientos o ideas (agrafia). Acalculia: Trastorno adquirido que afecta la habilidad para realizar cálculos, causado por una lesión cerebral (García, s.f.a). Agrafia: Incapacidad para escribir pensamientos e ideas debido a una lesión cerebral (García, s.f.a).
Este trastorno orgánico cerebral, de acuerdo con García (s.f.a), se presenta de manera repentina, con un curso fluctuante y una duración generalmente breve, siendo consecuencia de un colapso mental en la persona afectada. También es conocido como síndrome confusional agudo, psicosis orgánica, reacción cerebral aguda o síndrome general agudo. Una de sus variantes es el delirium, que corresponde a un estado de confusión agitada acompañado de síntomas como hipertensión, dilatación de las pupilas (midriasis), taquicardia y temblores. A diferencia de la demencia, este síndrome puede ser reversible, salvo en las fases terminales de una enfermedad, donde ocurre en más del 40% de los casos y alcanza hasta el 80% en los días previos al fallecimiento. En ancianos hospitalizados es particularmente común, afectando al menos a la mitad de los pacientes (Portellano, 2005, p.157; citado por García, s.f.a). Delirium: Estado de confusión, desorientación y dificultad para pensar o recordar con claridad. Midriasis: Dilatación anormal de la pupila del ojo.
Alteraciones que afectan la Orientación Autopsíquica, la cual nos permiten conocer la orientación del cuerpo en el espacio (García, s.f.a).
La persona experimenta dificultades para pensar con claridad o rapidez, lo que lleva a un pensamiento fragmentado y a la incapacidad de mantener una línea continua de ideas (García, s.f.a.).
La conciencia se define como la capacidad de reconocerse a uno mismo y de percibir el entorno que lo rodea. De acuerdo con Portellano (2015, p.67; citado por García, s.f.a), el nivel de conciencia depende de la función de un sistema neuronal llamado formación reticular, que se encuentra en el tronco encefálico, el diencéfalo y los hemisferios cerebrales. Algunas lesiones cerebrales pueden impactar este nivel, llegando a causar coma en casos graves, lo que conlleva riesgos de alteraciones tanto neurológicas como neuropsicológicas (Portellano, 2005; citado por García, s.f.a). Además, el autor presenta una clasificación de diversos grados de pérdida de conciencia que culminan en el estado de muerte cerebral.La escala de Glasgow es una herramienta médica desarrollada para evaluar la severidad de una pérdida de conciencia, específicamente en casos de coma. Esta escala mide el nivel de conciencia en un rango que va de 3 a 15 puntos, evaluando tres aspectos principales: A) La apertura ocular. B) La respuesta verbal. C) La respuesta motora. Según Portellano (2005; citado por García, s.f.a), los riesgos de mortalidad aumentan significativamente cuando la puntuación en la escala es menor a 8, especialmente si la duración del estado es mayor a 6 horas o en pacientes de mayor edad.
La persona únicamente responde ante estímulos intensos y reiterados. Sus reacciones son lentas y confusas, especialmente ante el dolor, mostrando movimientos de retirada. Permanece inactiva físicamente y no tiene control de esfínteres (García, s.f.a).
El individuo se encuentra en un estado similar al sueño o se duerme en momentos inapropiados. Si está despierto, no logra mantenerse alerta, realiza movimientos limitados, pero puede reaccionar frente a estímulos dolorosos o verbales (García, s.f.a.).
Es la etapa final de pérdida de conciencia donde no hay actividad en la corteza ni en el tronco cerebral. Esto ocurre debido a la interrupción total del flujo sanguíneo al cerebro, causando un infarto cerebral global. La respiración solo es posible mediante asistencia artificial, y los reflejos básicos como los pupilares o faríngeos están ausentes (García, s.f.a).
En la etapa de la vejez, es común observar ciertas alteraciones en la orientación, como consecuencia del deterioro cognitivo. El lóbulo parietal, encargado de la orientación espacial, interviene tanto en la percepción del propio cuerpo como en el reconocimiento del entorno. Además, Portellano (2005) indica que este lóbulo participa en dos procesos fundamentales relacionados con la orientación (García, s.f.a).
El lenguaje es un medio de comunicación simbólico que se materializa a través de las lenguas, las cuales son sistemas organizados de signos que permiten expresar ideas, siendo la palabra su representación principal (Portellano, 2005, p.202; citado por García, s.f.a). Su expresión se realiza por medio de la palabra hablada y la escritura, utilizando los músculos de las extremidades superiores y el sistema bucofonatorio como órganos efectores (García, s.f.a).
Afección que provoca cambios en la voz debido a problemas orgánicos o funcionales en los órganos responsables de la fonación (García, s.f.a). Estos cambios pueden afectar el tono, la intensidad, el timbre y la duración de la voz, aunque la capacidad de usar el lenguaje de manera simbólica permanece intacta (García, s.f.a).
Problema en la articulación del habla que surge debido a alteraciones neuromusculares (García, s.f.a). Aunque el lenguaje en sí mismo permanece intacto, la dificultad para articular palabras puede tener dos causas principales: una lesión en el sistema nervioso central (conocida como disartria central) o una lesión en los órganos efectores que participan en el habla (disartria periférica) (García, s.f.a).
Trastorno del lenguaje que afecta la comprensión o la expresión, tanto en su forma hablada como escrita (García, s.f.a). Esta alteración se origina a raíz de una lesión en las áreas del cerebro responsables de regular el lenguaje (García, s.f.a).
Problema en la articulación de los fonemas que no tiene su origen en enfermedades del sistema nervioso central ni en alteraciones de los órganos responsables de la fonación y la articulación del habla (García, s.f.a).
También conocido como tartamudez. Un trastorno del habla que se caracteriza por interrupciones en la emisión de palabras debido a bloqueos espasmódicos (García, s.f.a). Estas interrupciones pueden manifestarse como repeticiones involuntarias de sílabas o palabras (disfemia tónica), o como detenciones espasmódicas que afectan la fluidez verbal (disfemia clónica) (García, s.f.a).
Problema de pronunciación originado por lesiones o malformaciones estructurales en los órganos del habla, pero que no tiene causas neurológicas (García, s.f.a). Este trastorno también es conocido como dislalia orgánica (García, s.f.a).
La percepción, establece las reglas que guían nuestras interpretaciones y nos permite anticiparnos a la información que ofrece (García, s.f.b). Según Lindsay y Norman, citados por García, s.f.b) , el procesamiento perceptivo no solo depende de los datos externos, sino también de nuestras ideas, juicios y conceptos. Además, Belloch (2008) define la percepción como un proceso psicológico esencial que involucra la interpretación activa de los estímulos captados por los sentidos, basado en experiencias pasadas, expectativas y predisposiciones individuales. La percepción se describe como un proceso sensocognitivo mediante el cual las personas aprehenden la realidad a través de los sentidos, manifestando las cosas como tales en un acto de experiencia (García, s.f.b). Según Belloch (2008; citado por García, s.f.b), muchas distorsiones tienen su origen en trastornos orgánicos, generalmente temporales, que pueden impactar tanto la recepción sensorial como la interpretación que ocurre en el sistema nervioso central. Sin embargo, se considera más apropiado describirlas como alteraciones perceptivas, ya que el problema principal radica en cómo el individuo construye y experimenta el estímulo, es decir, en la percepción en sí misma (García, s.f.b).
Según Hamilton (1985) y Sims (1988), citados por García (s.f.b), los trastornos de percepción e imaginación se dividen en dos categorías principales: Distorsiones perceptivas y Engaños perceptivos. Las distorsiones perceptivas ocurren cuando un estímulo real, externo al individuo, es percibido de una manera diferente a la esperada, según sus características formales (García, s.f.b). Estas anomalías implican una percepción distorsionada de las propiedades físicas del entorno, alterando objetivamente las características de los estímulos presentes en el espacio externo (García, s.f.b).
Según Hamilton (1985) y Sims (1988), citados por Belloch (2008), los trastornos de percepción e imaginación se dividen en dos categorías principales: distorsiones perceptivas y engaños perceptivos. Las distorsiones perceptivas ocurren cuando un estímulo real, externo al individuo, es percibido de una manera diferente a la esperada, según sus características formales. Estas anomalías implican una percepción distorsionada de las propiedades físicas del entorno, alterando objetivamente las características de los estímulos presentes en el espacio externo.
La pereidolia como un tipo particular de ilusión en la que una persona da forma y significado a un estímulo que es ambiguo o carece de estructura definida (García, s.f.b). Se aclara que la pereidolia no es considerada patológica; de hecho, podría ser más preocupante la incapacidad de experimentarla (García, s.f.b). En este contexto, la pereidolia se presenta como una experiencia mental inusual, donde el término "anomalía" no implica enfermedad, patología ni ningún tipo de condición mórbida (García, s.f.b).
Según Belloch (2008), los engaños perceptivos se relacionan con la experiencia alucinatoria como referencia comparativa. Estas experiencias perceptivas se clasifican en dos tipos: aquellas que no están basadas en estímulos reales externos al individuo, como sucede con las alucinaciones y algunas pseudopercepciones, y aquellas que persisten o se activan incluso cuando el estímulo ya no está físicamente presente, como ocurre con las imágenes eidéticas, parásitas y consecutivas. Se considera que los engaños perceptivos son sinónimo de errores perceptivos o percepciones falsas.
Las alucinaciones como uno de los trastornos más destacados dentro de las psicopatologías de la percepción e imaginación, y un síntoma clave de los trastornos mentales. Sin embargo, aclara que su presencia no siempre indica un trastorno mental, ya que las alucinaciones también pueden experimentarse en personas mentalmente sanas bajo condiciones especiales, e incluso ser valoradas culturalmente por algunas personas. Desde una perspectiva perceptualista, se exponen tres enfoques sobre las alucinaciones: Trastorno de la imaginación: Son imágenes tan intensas que el individuo las percibe como reales, considerándolas una representación externa. Fenómeno sensorial: Algunas alucinaciones surgen como un recuerdo de estímulos externos extremadamente intensos, lo que lleva al individuo a experimentarlas como si estuvieran presentes. Características objetivas: Las alucinaciones se perciben como corpóreas y situadas en el espacio externo, no en un espacio subjetivo. Jaspers (1975) las definió como percepciones engañosas, completamente nuevas, que no provienen de transformaciones de percepciones reales, pero que coexisten con estas en el espacio objetivo.
La memoria es la capacidad de adquirir, retener y recordar experiencias, fundamental para la acumulación de conocimientos y la resolución de problemas. Asociada al pensamiento y las emociones, también define nuestra identidad, orientación y sentido de pertenencia (Fernández, 2021; citado por García, s.f.c). García (s.f.b) señala que existen diversos tipos de memoria, como la visual, numérica y fotográfica. Así miamo, de acuerdo con este autor, se distinguen tres tipos principales de memoria: Memoria inmediata: Relacionada con los sentidos, retiene información en menos de un segundo y filtra estímulos según su intensidad, novedad o motivación. Memoria a corto plazo (MCP): También llamada memoria de trabajo, almacena información durante 15-30 segundos y está ligada a la atención y velocidad de procesamiento. Memoria a largo plazo (MLP): Tiene una capacidad ilimitada, guarda recuerdos autobiográficos y conocimientos por minutos hasta décadas, y requiere un proceso llamado consolidación para transferir información desde la MCP. Según Sarráis (2016, citado por García, s.f.c), las cinco funciones de la memoria son: Fijación: Registro inicial de datos en la MCP y transferencia a la MLP. Conservación: Retención de información a largo plazo. Evocación: Recuperación de información almacenada. Reconocimiento: Identificación de datos como nuevos o conocidos. Olvido: Eliminación de información almacenada.
Las hipermnesias se definen como un aumento anormal de la memoria, que puede tener un origen psíquico, relacionado con procesos de evocación y conservación, o un origen orgánico, asociado a condiciones como el delirio febril y tóxico, el aura epiléptica y las crisis parciales complejas.
Las hipomnesias se caracterizan por una reducción en la capacidad de memoria. Estas se clasifican en diferentes tipos de amnesias, como la anterógrada, retrógrada y de evocación, así como en amnesias psicóticas y psicógenas
Trastornos Cualitativos: Paramnesias (Modificación de recuerdos evocados): Falsificación retrospectiva. Pseudología fantástica. Confabulaciones (Genuinas, fantásticas). Significaciones delirantes del recuerdo. Alucinaciones de la memoria. Pseudoamnesias (Errores del reconocimiento): Déjà-vu. Jamais-vu. Fenómeno del Verkennung. Síndrome de Capgras.
Trastornos Cuantitativos Hipermnesias (Aumento de la memoria): De origen psíquico: Evocación: Shock emocional. Conservación: Criptomnesia, ecmnesia. De origen orgánico: Delirio febril y tóxico. Aura epiléptica, crisis parciales complejas. Hipomnesias (Disminución de la memoria): Amnesias: Anterógrada. Retrógrada. De evocación (Lacunar, dismnesia). Alomnesias: Psicóticas. Psicógenas (Angustia, ansiedad situacional, disociativa).
Definición: Percepciones sensoriales sin objeto real, con características similares a las percepciones verdaderas. Frecuentes en trastornos mentales, pero no exclusivas de estos. Características principales: Aparecen en el espacio exterior objetivo (no solo interno o imaginado). Poseen cualidades objetivas, como corporeidad. Clasificaciones según Belloch (2008): Por complejidad: Elementales: Ruidos, luces, zumbidos, etc. Complejas: Voces, personas, escenas completas. Por contenido: Miedos, deseos, emociones, recuerdos. Influencias culturales o experiencias religiosas. Por modalidad sensorial: Auditivas, visuales, táctiles, olfativas, gustativas, somáticas, cinestésicas, multimodales. Por variaciones fenomenológicas: Pseudoalucinaciones, alucinaciones funcionales, reflejas, extracampinas, autoscopias.
Modalidades sensoriales de las alucinaciones:
- Auditivas
- Visuales
- Olfativas
- Gustativas
- Táctiles o hápticas
- Cenestésicas o somáticas
- Cinestésicas (de movimiento)
La paramnesia se caracteriza por una exagerada actividad de la memoria, facilitando la evocación de recuerdos, incluso los más antiguos. Su origen puede ser psíquico, sin evidencia de alteraciones cerebrales, o orgánico, debido a enfermedades que afectan las áreas del cerebro relacionadas con la memoria. Clasificación de la paramnesia: Psíquica: De evocación: Se da en situaciones de alta carga emocional, como en moribundos lúcidos, y puede incluir flashbacks en estrés postraumático. De conservación: Destaca por recordar datos con detalle, común en personas con deficiencia mental o autismo. Orgánica: Epilepsia: Surge en el aura de crisis epilépticas tónico-clónicas o crisis complejas. Delirios febriles: En niños con fiebre alta, evocan recuerdos detallados mezclados. Tóxicas: Por el efecto de drogas estimulantes del cerebro como alucinógenos, cocaína, barbitúricos y anfetaminas.
Pseudoamnesias.Errores del reconocimiento: Fenómeno de Déja-vu: Este fenómeno consiste en la sensación de haber vivido anteriormente una situación que, en realidad, está ocurriendo por primera vez. Aunque es común en personas sanas, se asocia también a ciertas afecciones neurológicas, como la epilepsia del lóbulo temporal. Es una percepción errónea en la que la familiaridad de la situación no se corresponde con una experiencia real previa.Fenómeno de Jamais-vu: Es el opuesto al déjà-vu. Aquí, la persona experimenta una situación conocida como si fuera totalmente nueva o extraña, a pesar de haberla vivido antes. Es un error del reconocimiento donde la familiaridad queda desconectada de la experiencia previa. También puede estar relacionado con estados de fatiga mental o ciertos trastornos neurológicos. Fenómeno del Verkennung: Se caracteriza por el reconocimiento erróneo de una persona, objeto o lugar. El sujeto puede identificar incorrectamente algo familiar como algo distinto o totalmente ajeno. Es un tipo de distorsión de la percepción que afecta directamente al reconocimiento y suele aparecer en trastornos cognitivos o estados de confusión mental. Síndrome de Capgras: Es un trastorno raro en el que la persona cree que alguien cercano, como un familiar o amigo, ha sido reemplazado por un doble idéntico. Este error del reconocimiento está relacionado con alteraciones neurológicas y psiquiátricas, como la esquizofrenia o lesiones cerebrales, y se asocia con una desconexión entre la percepción visual y la respuesta emocional.
Las pseudoalucinaciones son una clase de imágenes mentales que, en donde las personas que las experimentan no describen sus perceptos como escenas reales, sino como “visiones” (Belloch, 2008). Alucinaciones funcionales: Según Belloch (2008), estas se generan cuando un estímulo real provoca una alucinación, siendo ambos percibidos al mismo tiempo y en la misma modalidad sensorial. La percepción del estímulo real se superpone a la alucinación. Son comunes en pacientes con esquizofrenia crónica. Alucinaciones reflejas: Hamilton (1985) las define como una forma mórbida de sinestesia en la que un estímulo en una modalidad sensorial desencadena una alucinación en una modalidad sensorial diferente. Por ejemplo, un estímulo visual podría causar una alucinación auditiva. Alucinaciones extracampinas: Estas alucinaciones ocurren fuera del campo visual del sujeto. Se diferencian de la sensación de presencia, en la que la persona siente que hay alguien cerca, sin que pueda verlo o escucharlo.
El pensamiento se define como una actividad mental que genera ideas utilizando capacidades como imaginación, evaluación, planeación y creación. Es esencial para resolver problemas, avanzar en el conocimiento de la realidad, adquirir habilidades y adaptarse al entorno social, lo que lo conecta directamente con la inteligencia (Uriarte, 2013; Sarráis, 2016; citados por García, s.f.d). El conocimiento de la realidad, ligado a lo cognitivo, se obtiene mediante la percepción sensorial y permite entender el entorno. Las personas más inteligentes tienen una capacidad más profunda y rápida para captar la esencia de la realidad (Fernández, 2021; citaod por García, s.f.d). García (s.f.d) menciona que el pensamiento se clasifica en tres formas principales: Fantástico: Se enfoca en recrearse artísticamente o vivir experiencias fuera de la realidad. Imaginativo: Ayuda a prever situaciones pasadas o futuras y hacer planes, sin apartarse demasiado de la realidad. Racional o conceptual: Analiza fenómenos concretos y diseña acciones para resolver problemas.
De acuerod con García (s.f.d), los Trastornos del pensamiento por su Curso son:
- Bloqueo
- Vacío mental
- Inhibición
- Bradipsiquia
- Taquipsiquia
- Presión del Pensamiento
- Desvinculación de Ideas
- Hipervinculación de Ideas
- Hipovinculación de Ideas
De acuerdo con García (s.f.d) los Trastornos del Pensamiento por su lógica son:
- Asociación alógica de ideas
- Onomatopeya:
- Paralogia
- Incoherencia o disgregación
- Sobrevaloración de ideas
- Lavado de cerebro
- Obsesiones
- Ideas obsesivas
- Inutilidad
- Consecuencias
- Pensamientos intrusos
- Contaminación
García señala que el término "delirio" proviene del latín delirare, que significa desviarse del curso normal, aplicado al pensamiento humano como salir del pensamiento lógico. En español, señala el autor, se relaciona con pérdida de la razón, locura o desvarío; y para Jaspers, los delirios son juicios falsos mantenidos con gran convicción, inmodificables ante la experiencia o la lógica, y con contenido imposible. Por su parte, Mullen (1979; citado por García, s.f.d) ) destaca las siguientes características de los delirios:
- Se sostienen con absoluta convicción.
- Son percibidos como verdades evidentes y personalmente trascendentes.
- No son modificables por la razón o la experiencia.
- Su contenido suele ser fantástico o improbable.
- No son compartidos por el entorno social o cultural del individuo.
- Primarios o verdaderos: Delirios originales, autóctonos e inderivables.
- Secundarios: Surgen de otros procesos psíquicos, como la personalidad o conflictos subyacentes.
- Intuición delirante: Ideas que adquieren gran relevancia para el paciente.
- Percepción delirante: Interpretación delirante de percepciones normales.
- Atmósfera delirante: Experiencia subjetiva de un cambio siniestro y inquietante en el mundo.
- Recuerdos delirantes: Reconstrucción delirante de recuerdos reales, como creerse hijo de un demonio o salvador del mundo.
- Delirio de ser controlado: Sentimientos o acciones percibidos como impuestos por fuerzas externas.
- Delirio corporal: Ideas erróneas sobre el funcionamiento del cuerpo (e.g., embarazo en menopausia).
- Delirio de celos: Convicción delirante de infidelidad de la pareja.
- Delirio de grandeza: Exageración en la importancia o poder personal.
- Delirio de pobreza: Creencia de haber perdido todas las posesiones materiales.
- Delirio de referencia: Interpretación negativa de objetos o personas del entorno.
- Delirio extravagante: Creencias absurdas sin base real (e.g., implantación de un dispositivo en la cabeza).
- Delirio nihilista: Negación de la existencia del yo, otros, o el mundo.
- Delirio persecutorio: Convicción de ser víctima de acoso o conspiraciones.
De acuerdo con García (s.f.d) son pensamientos intrusivos, repetitivos y coercitivos que carecen de lógica, generan angustia y son percibidos como extraños por quien los padece.Tipos de obsesiones más frecuentes:
- Suciedad, enfermedad y contaminación: Temor a ensuciarse, contagiarse o exponerse a sustancias dañinas.
- Agresión: Miedo a dañar a otros o a sí mismo, incluso sin intención.
- Estar en peligro: Preocupación por situaciones que podrían poner en riesgo a uno mismo o a otros.
- Sexualidad: Pensamientos angustiantes relacionados con impulsos o dudas sexuales.
- Asuntos abstractos: Obsesiones sobre temas filosóficos, religiosos o de autoevaluación.
- Lavado y limpieza: Conductas excesivas para evitar contaminación.
- Comprobación: Asegurarse repetidamente de que no ocurrió algo negativo.
- Orden y simetría: Necesidad de organizar objetos de manera específica.
- Repetición o contar: Realizar acciones siguiendo patrones fijos.
- Acumulación: Guardar objetos innecesarios.
Psicopatologías CognitivasSe refieren a alteraciones en los procesos mentales implicados en el pensamiento, la memoria, la atención, el razonamiento y el aprendizaje. Estas patologías impactan la forma en que el individuo procesa, almacena o utiliza la información. Algunos ejemplos incluyen: Trastornos de memoria: Amnesias, hipermnesias e hipomnesias. Alteraciones del pensamiento: Como delirios, ideas obsesivas, pensamientos incoherentes o déficit de razonamiento. Dificultades en la atención: Déficit de atención o atención dispersa. Trastornos del juicio: Incapacidad para evaluar y tomar decisiones basadas en la realidad. Psicopatologías Sensoperceptivas Se centran en alteraciones en la percepción, es decir, en cómo los estímulos sensoriales son interpretados por el cerebro. Estas patologías afectan la manera en que los individuos perciben el mundo que los rodea. Algunos ejemplos incluyen: Alucinaciones: Percepciones sin estímulos externos reales, como escuchar voces o ver cosas que no existen. Ilusiones: Distorsiones de un estímulo sensorial real. Alteraciones del reconocimiento: Como el fenómeno de déjà-vu, jamais-vu o el síndrome de Capgras. Alteraciones sensoriales: Cambios en la intensidad, calidad o naturaleza de las percepciones sensoriales.
Universidad Virtual del Estado de Guanajuato Licenciatura: Ciencias del Comportamiento Humano Módulo: Psicopatología del adulto y el adulto mayor Reto: Psicopatologías Cognitivas y Sensoperceptivas Asesor: Dr. Ángel de Jesús González Martínez Alumno: Paulo Juan Garza Peña Monraz (23006927) Fecha: 23/03/2025
Referencias:
García, O. (s.f.a). Lección 3. Trastornos de la conciencia, orientación y atención. Universidad Virtual del Estado de Guanajuato [UVEG]. García, O. (s.f.b). Lección 4. Distorsiones sensoperceptivas. Universidad Virtual del Estado de Guanajuato [UVEG]. García, O. (s.f.c). Lección 5. Trastornos de la memoria. Universidad Virtual del Estado de Guanajuato [UVEG]. García, O. (s.f.d). Lección 6. Patologías del Pensamiento. Universidad Virtual del Estado de Guanajuato [UVEG].