Friedrich Wilhelm Nietzsche

Friedrich WilhelmNietzsche

BIOGRAFÍA

Nietzsche nació en 1844 en Röcken, una pequeña ciudad de la Sajonia prusiana. La temprana muerte de su padre, pastor luterano, obliga a la familia a abandonar la casa familiar, trasladándose en 1849 a Naumburgo. Allí vivirá con su madre, su hermana Elisabeth, su abuela y dos tías. En 1858 ingresa en el internado de Pforta, que había adquirido un gran renombre en la época, y donde permanecerá hasta 1864.

En esta época se desarrolla su admiración por el genio griego, leyendo sobre todo a Platón y Esquilo, así como por la música y la poesía, realizando entonces sus primeros ensayos como poeta y músico. Comienzan los problemas de salud de Nietzsche, sufriendo en numerosas ocasiones intensos dolores de cabeza que podían llegar a durar varios días. En 1864 ingresa en la universidad de Bonn. En 1865se traslada a la universidad de Leipzig. De esta época data su admiración por la música de Wagner y su primer encuentro con el músico. La lectura de Schopenhauer y el abandono definitivo del cristianismo, coinciden con su actividad como filólogo, publicando varios trabajos. En 1869 la Universidad de Basilea le ofrece la cátedra de Filología, ante los informes favorables recibidos por su profesor Ritschl, y antes incluso de haber obtenido el grado de Doctor, cátedra que Nietzsche ocupa ese mismo año. De 1869 a 1879 Nietzsche permanecerá en Basilea, desarrollando su actividad como profesor. En 1872 pública "El origen de la tragedia", obra muy mal recibida en los medios académicos y criticada virulentamente por algunos especialistas en filología clásica; algunos de sus amigos, no obstante, salen en su defensa. Pese a ello, su prestigio entre los filólogos mermará considerablemente. En 1876 comenzará su distanciamiento de Wagner, que culminará en ruptura.

En 1879, probablemente por problemas de salud, renuncia a su cátedra en la universidad de Basilea, y comienza un período que durará diez años caracterizado por el constante viajar de Nietzsche por Suiza, Italia y Alemania, así como por la efervescencia creativa que le conduce a la elaboración de la mayor parte de su obra.

En 1881 residirá fundamentalmente en Génova y Sils-Maria, pequeña localidad de los Alpes suizos donde Nietzche intuirá las principales ideas de su filosofía futura, como la del eterno retorno y la de la voluntad de poder.

En 1889 su salud, empeora bruscamente, comenzando a manifestar síntomas de desequilibrio mental. Trasladado de Turín a Basilea donde es tratado en la clínicamente. Muy enfermo se traslada a Naumburgo con su madre y, tras de la muerte de ésta, lo cuida su hermana Elisabeth en Weimar. Pero ya no se recupera jamás. Morirá en agosto de 1900, habiendo alcanzado una considerable fama y ejerciendo un notable influjo que se dejará sentir en el desarrollo del pensamiento contemporáneo.

maestros de la sospecha

Los maestros de la sospecha constituyen un grupo heterogéneo y diverso de pensadores caracterizados por desmontar en diferentes ámbitos del conocimiento la imagen que la razón había ofrecido del hombre, de la ciencia, de la sociedad, de la conciencia; entre ellos encontraremos al propio Nietzsche y su filosofía, particularmente lo que tiene que decir del engaño que suponen los valores morales para la civilización.

DARWIN, con su teoría de la evolución, al sostener que el hombre no es más que otra especie, fruto de un proceso evolutivo, hace deslizar la sospecha de que no somos ninguna especie elegida hecha a imagen y semejanza divina.

MARX, con su materialismo dialéctico, va a lanzar la sospecha de que la nueva clase emergente surgida de la Revolución Francesa (la burguesía), aferrada a los principios de la libertad de mercado, esto es, del Capitalismo, está detrás del antagonismo de clases (burgueses y proletarios); la razón que ha aupado esos ideales burgueses, no es más que mera ideología, justificación de los intereses de clase.

FREUD, el psicoanálisis, los estudios sobre la estructura de la mente humana traerán la sospecha de que esa racionalidad heredada de Descartes, esa idea del hombre como pura consciencia, no es más que una imagen superficial, pues la mente contiene una “profundidad” (el subconsciente) donde cobran importancia los sueños, la líbido, las frustraciones, los principios de Eros (vida) y Tánatos (muerte) son lo que explica la actividad instintiva y dan sentido a nuestras acciones, no la razón.

La desconfianza en la razón humana

La razón humana, nacida en Grecia con el paso del mito al logos, que pretende un acceso a la verdad, al conocimiento auténtico de la realidad, y que atraviesa toda la historia de la cultura a lo largo de más de veinticinco siglos, se resquebraja en esta segunda mitad del siglo XIX. En ese pesimismo y desconfianza de la razón se ve que cuando ésta ha pretendido transformar la realidad, ha degenerado en desgracia para la humanidad; la razón se autodestruye, produce monstruos. El hecho histórico más cercano que ilustra esto es la Revolución Francesa: a los ideales fruto de la razón que son la libertad, la igualdad y la fraternidad, le seguirán el embrutecimiento del terror o el empobrecimiento de la masa obrera.

Las acciones humanas no responden exactamente a motivos racionales: están también, y sobre todo, deseos primarios, intereses particulares, presiones e intereses sociales, estructuras mentales inconscientes, etc. La razón no puede evitar ni obviar las circunstancias biológicas, históricas, geográficas, económicas, sociales o lingüísticas diversas, e incluso contrapuestas. Así las cosas, ¿cuál es la verdad? ¿qué es lo válido? ¿qué o quién lo decide?

LA FILOSOFÍA DE NIETZSCHE: VITALISMO

El pensamiento nietzscheano puede estructurarse en dos partes diferenciadas: una donde realiza una crítica destructora a los valores que han sustentado a la cultura occidental desde el mundo griego. otra, donde nos propone unos nuevos valores para el futuro y por tanto, la parte constructiva de su pensamiento.

Crítica a los valores de la cultura Occidental.

Nietzsche parte de un supuesto básico en toda su obra, a saber, la cultura occidental está viciada desde su origen. Es una cultura racional y dogmática y por eso es decadente, porque se opone a la vida, a lo instintivo, empeñada en instaurar la racionalidad a toda costa. Se trata de una filosofía dogmática, de una religión dogmática, de una moral dogmática. Es preciso, criticar la base de este dogmatismo que Nietzsche encuentra en el pensamiento de Platón, en la religión cristiana y en el mundo moral. Tres ficciones, tres mundos inventados por el hombre occidental que le alejan de su auténtica esencia y son interpretados por nuestro autor como síntomas de decadencia.

a) Crítica a la moral

Nietzsche acusa a la moral platónico-cristiana de antinatural por ir en contra de los instintos vitales.- Lo importante, no está en este mundo, sino en el más allá, en la realidad en sí, o en el mundo sobrenatural del cristianismo. Es trascendente no gira en torno al hombre, sino a Dios. Impone al hombre un rechazo de su naturaleza, una lucha constante contra sus impulsos vitales, Rechazo general de la vida, de la verdadera realidad del hombre, en favor de una ilusión generada por el resentimiento contra la vida. Distingue dos tipos de moral:  moral de los señores: Es la moral noble, elevada. Nietzsche examina la noción de “bueno”. “Bueno” es todo lo que eleva al individuo, todo lo que se basa en la aceptación y afirmación de la vida. Significa noble, poderoso, bello, feliz. Ésta fue la primera moral que hubo. Alababa la fuerza y la independencia. Esta moral se halla en el origen de toda cultura. Una rebelión de los esclavos produjo la inversión de los valores morales.  moral de los esclavos: Es la moral de la mediocridad, una moral forjada en el instinto de venganza contra la vida superior. Es también una moral de la democracia (aquella que pretende igualar a todas las personas). Aquí “bueno” significa pobre, enfermo, débil, sumiso…

Nietzsche constata el creciente ascenso de los valores de los débiles frente a los de los fuertes que culmina en los movimientos de liberación en la Revolución francesa y que se extienden a lo largo del S.XIX. También , el socialismo cuyo único objetivo es nivelar las diferencias y suprimir el genio individual.

La Transvaloración

Expresión acuñada por Nietzsche para referirse a la NECESIDAD DE CAMBIAR TODOS LOS FALSOS VALORES (de transvalorar). Cambiar los falsos valores que han dominado toda la cultura occidental. Desde el momento en que la filosofía socrática puso la vida, lo terrenal, el devenir en función de lo suprasensible y lo transcendente, se rompió el equilibrio entre los aspectos APOLÍNEOS y los DIONISÍACOS que habían forjado las primeras bases de la cultura griega y se invirtieron los valores. Los VALORES no poseen objetividad ni inmutabilidad. Son convenciones de los hombres. Cuando se olvida que son un invento del hombre decadente, la moral se convierte en dogmatismo. La moral occidental niega la vida. Nietzsche está en contra de todo moralismo, pero la base de su propuesta también es moral. Habla de la necesidad de una MORAL DE LA VIDA TERRENAL (que defiende lo propiamente humano: los instintos y las tendencias biológicas fundamentales).

b) Crítica a la religión cristiana

Toda religión para Nietzsche nace del miedo, de la angustia, de la impotencia que siente el hombre en sí mismo. Se trata de la incapacidad de asumir uno su propio destino, cuando el hombre queda invadido por un sentimiento de poder , (el poder de dirigir su vida, de controlar su destino ) se siente perdido y otorga ese poder a otro ser más poderoso, a Dios. INVERSIÓN DE LOS VALORESNinguna religión ha contenido jamás ninguna verdad. El cristianismo ha invertido los valores de las antiguas Grecia y Roma (apolíneo/dionisíaco) que eran valores de vida, y se ha inventado un mundo ideal, celestial, que lleva a la desvalorización del mundo terrenal. Esto supone el extravío más fuerte de los instintos, sólo fomenta los valores mezquinos propios del rebaño y con conceptos como el pecado aniquila las formas y valores más nobles de la vida y pervierte la vida en su raíz. MATAR A DIOS Es una moral vulgar que viene de Dios que es el gran obstáculo contra la vida por eso hay que acabar con él. Sólo así el hombre se liberará del peso de la idea de un más allá. Dios es la gran barrera para que llegue el verdadero hombre, el superhombre. Por eso para que viva el hombre ha de morir Dios; si Dios vive no puede vivir el hombre. Así Zaratustra predicará la muerte de Dios.

RELIGIÓN DEL ODIO Y LA VENGANZAEl cristianismo es la religión del odio, del resentimiento y la venganza : Odio a este mundo: la vida terrena, a la que le es propio el pecado, se convierte sólo en un tránsito hacia la vida eterna. Odio a la vida: convierte en virtud el odio y rechazo a los instintos, deseos y pasiones en forma de ayuno, sacrificio, resignación, castidad, mansedumbre; todo lo que se escapa a este criterio lo convierte en pecado. Odio al cuerpo: si Platón devaluó al cuerpo tratándolo como la cárcel del alma, el cristianismo lo degrada hasta el extremo de convertir en pecado todo lo carnal, todo los instintos vitales que emanan del cuerpo.

c) Crítica a la filosofía

La filosofía de Nietzsche supondrá un enfrentamiento radical con buena parte de la tradición filosófica occidental, oponiéndose a su dogmatismo, cuya raíz sitúa en Sócrates, Platón y la filosofía cristiana. La distinción y oposición, realizada en sus primeras obras, entre lo apolíneo y lo dionisíaco, le llevará a desarrollar una original interpretación de la historia de la filosofía, según la cual el pensamiento se verá sometido a un alejamiento de la vida. Sócrates se opone a la vida inventando una realidad trascendente, estática e inmutable justo lo contrario de la realidad contradictoria y cambiante que conocemos.

Apolo y Dioniso; ambos polos se necesitan y se estimulan mutuamente. LA MEDIDA y LA DESMESURA son la esencia no solo del arte griego sino de todo el arte. Su expresión más acabada es LA TRAGEDIA GRIEGA, que simboliza la sabiduría dionisíaca expresada con los medios apolíneos. Esta unidad se verá truncada por la TRAICIÓN DE SÓCRATES, al poner LA VIDA en función de una hipotética RAZÓN (en lugar de poner la razón en función de la vida). La disociación de esos valores está en la base de la cultura occidental que nace a partir del sometimiento de la vida a la razón, de lo dionisíaco a lo apolíneo.

Crítica de la metafísica. Nietzsche se opone al dualismo ontológico, fiel reflejo del dualismo platónico: y de la infravaloración del mundo sensible como no real, y el mundo inteligible como real.

CRÍTICA AL CONOCIMIENTO CONCEPTUAL

la metafísica de tradición platónico-cristiana hace corresponder a una realidad inmutable un conocimiento y una verdad igualmente inmutables: el conocimiento conceptual. Para Nietzsche: El concepto, no sirve para conocer la realidad tal y como es. El concepto tiene un valor representativo, metafórico.Siendo lo real devenir, cambio, no puede dejarse representar por algo como el concepto, cuya naturaleza es la esencia de las cosas, es decir, aquello que es inmutable, que no deviene, que no cambia, lo que permanece idéntico a sí mismo, ajeno al tiempo. El concepto es un modo impropio de referirse a la realidad, un modo general y abstracto de captar la realidad y por ello, de alejarnos de lo singular y concreto, de alejarnos de la realidad. Lejos de ofrecernos el conocimiento de la realidad, el concepto nos la oculta. La filosofía tradicional ha olvidado este carácter metafórico del concepto y ha pretendido encontrar en él no una simple generalización de las cosas, sino la "esencia", una supuesta realidad suprasensible de las cosas.

La infravaloración de la realidad sensible se debe a su mutabilidad, mientras que la razón humana opera con categorías inmutables (conceptos); pero el hecho de que la razón funcione con tales categorías no demuestra la "imperfección" ni la "dependencia" del mundo sensible, sino sólo la inadecuación de la razón para conocerlo... ¿Y si la razón no fuera la facultad adecuada para conocer el mundo?¿Es posible acceder de forma no racional al conocimiento del mundo? ¿Es la razón nuestra única posibilidad cognoscitiva?

CRÍTICA AL LENGUAJE

Nietzsche dirigirá también su atención al papel que ha jugado el lenguaje en la reflexión filosófica. Dada la íntima relación existente entre el pensamiento y el lenguaje que lo expresa, a medida que la realidad es falsificada por el valor que se le concede a los conceptos, las palabras que se usan para expresar esos conceptos y el sentido en que se usan también queda falsificado. De este modo el lenguaje contribuye decisiva y sutilmente a afianzar ese engaño metafísico acerca de la realidad. Recuperar el sentido de lo real exige, por lo tanto, recuperar simultáneamente el sentido, el valor de la palabra. De ahí el estilo aforístico de su obra.

El lenguaje y la verdad son síntomas de un TRATADO DE PAZ (PACTO GREGARIO) que el ser humano necesita para poder vivir en sociedad. El ser humano busca las consecuencias beneficiosas del lenguaje. Su orden y el mundo de los conceptos son recursos que utiliza el ser humano para liberarse de la inseguridad. El pacto es fruto de una reacción inmediata de un espíritu gregario que intenta evitar la amenaza y la incomodidad que producen la diversidad. Mediante la razón lógica y el lenguaje gramatical, el mundo reduce su complejidad, se vuelve más calmado, más sosegado

El LENGUAJE es incapaz de alcanzar el conocimiento de la realidad. Sus reglas de uso las hemos producido nosotros, no es una herramienta objetiva.

No nace de la necesidad del ser humano por conocer, sino de la necesidad de expresar una experiencia vital propia de la realidad. El lenguaje tiene originariamente carácter metafórico.

La VERDAD se convierte de este modo en un concepto vacío, en un convenio práctico.

La VERDAD es la convención de utilizar determinados términos en determinadas situaciones y contextos. Se llamará VERDADERO a aquel individuo que acepte emplear los términos según los criterios establecidos por la convención.

El concepto de MENTIRA surge como la forma de castigar a los violadores de los acuerdos. El MENTIROSO será expulsado del seno de la sociedad, pero no por engañar ni por estar equivocado, sino para mantener la estabilidad del pacto. Aquel que no hable respetando la norma fundamental ya no será considerado como parte del “nosotros”. Al seguir hablando de otra forma, pervierte el lenguaje amenazando la solidez del pacto, la solidez de una cultura; se convierte en un peligro.

CRÍTICA A LA CIENCIA

Tampoco la ciencia es la verdadera interpretación de lo real: ella nace de un sentimiento, es decir, de la repugnancia del intelecto por un supuesto caos del mundo exterior, y también del interior.

Que el intelecto tenga necesidad de estructuras fijas, de leyes lógicas, etc., no prueba que esas formas o esas leyes sean ciertas. En el mundo real no hay regularidad ni constancia.

PENSAMIENTO CONSTRUCTIVO DE NIETSZCHE

LA MUERTE DE DIOS

Para Nietzsche la cultura europea ha llegado ya a su propia ruina, a la decadencia; de ahí la necesidad de preparar el gran “mediodía” de la humanidad. Esta es la tarea del vitalismo nietzscheano: liberar al hombre de todos los valores ficticios devolviéndole el derecho a la vida, a la existencia. La muerte de Dios significa que se han derrumbado los pilares que sostenían la tradición, la historia y la cultura de Occidente. Es fruto del hombre que sin darse cuenta lo ha ido aniquilando; sus raíces se encuentran en:- El Renacimiento: el antropocentrismo. - Racionalismo: la razón como fundamento de todo (Descartes). - La ilustración: el poder del pueblo, no de Dios. - Positivismo: la ciencia como fundamento de lo real. Dios había sido la brújula del hombre occidental. Pero el hombre ha ido matando a Dios sin darse cuenta, expulsándolo poco a poco de su pensamiento y de su cultura. Al descubrir la muerte de Dios el hombre queda desorientado, su vida pierde el sentido. La muerte de Dios es, en realidad, la muerte del monoteísmo cristiano y de la metafísica dogmática, para quienes sólo hay un Dios y una verdad. Y el responsable de ello es el hombre. Al cobrar conciencia de ello el hombre sustituye a ese Dios y a esa verdad única por múltiples dioses y múltiples verdades, en un intento desesperado por salvar los valores asociados a esa imagen de Dios. Pese a ello, con la caída del Dios y de la metafísica tradicional los valores asociados a ellos no pueden subsistir, no encuentran justificación trascendental alguna . El ateísmo conduce, pues, al nihilismo.

NIHILISMO

El nihilismo es el proceso que sigue la conciencia del hombre occidental. Es la consecuencia propia de la ausencia de valores provocada por la muerte de Dios. Con ésta se ha perdido el sentido de la orientación de nuestra existencia, momento que deberá ser superado. Quedaría expresado en estos tres momentos:    Esta es la base sobre la que ha de construirse, según Nietzsche, la nueva filosofía: El hombre provoca, en primer lugar, la muerte de Dios, sin apenas darse cuenta de ello. En segundo lugar, el hombre toma conciencia plena de la muerte de Dios y se reafirma en ella. En tercer lugar, y como consecuencia de todo lo anterior, el hombre se descubre a sí mismo como responsable de la muerte de Dios descubriendo, al mismo tiempo, el poder de la voluntad, e intuyendo la voluntad como máximo valor.

El nihilismo como punto de partida de una nueva valoración: es el momento de la intuición, que queda expresada en la voluntad de poder, en quien se expresa a su vez el valor de la voluntad.

El nihilismo como resultado de la negación de todos los valores vigentes: es el resultado de la duda y la desorientación.

El nihilismo como autoafirmación de esa negación inicial: es el momento de la reflexión de la razón.

VOLUNTAD DE PODER

El motor principal del hombre: la ambición de lograr sus deseos, la demostración de fuerza que lo hace presentarse al mundo y estar en el lugar que siente que le corresponde.

El hombre que guía su vida según la voluntad de poder, es un hombre que intenta siempre superarse a sí mismo, mejorarse en todas sus facetas, etc. No tiene en cuenta lo que los demás piensen o digan de él, se enfrenta a la vida y asume la realidad,

La voluntad es la verdadera "esencia" de la realidad. La realidad no es más que la expresión de la voluntad: ser es querer. La realidad no es algo estático, permanente, inmutable sino que es el fruto de la voluntad y por tanto ha de ser multiforme y cambiante, como aquella. El querer de la voluntad, al igual que el de todo lo real, es un querer libre, que rechaza toda determinación . Voluntad de poder significa voluntad de dominio, fuerza, impulso vital, emoción... La voluntad de poder lleva a la concepción de una nueva verdad y un nuevo lenguaje: A la nueva concepción de la realidad corresponde una nueva concepción de la verdad. La verdad no reside en el juicio, ni en la adecuación del intelecto con el objeto. Todos los juicios son falsos, en la medida que consisten en una "congelación" de un determinado aspecto de la realidad mediante el uso de conceptos. La verdad ha de ser un resultado de la intuición de lo real, de la captación directa de la realidad. Por ello, no podrá ser una verdad inmutable, y ni siquiera única, pues el mismo cambio de lo real no está exento de contradicciones. Para la construcción de esta nueva realidad es necesario un nuevo lenguaje. Frente al lenguaje de la razón, del concepto, propondrá el lenguaje de la imaginación, basado en la metáfora. Mientras que el lenguaje conceptual pretende ser un fiel reflejo de la realidad (quedando petrificada en él) el lenguaje metafórico respeta la pluriformidad y el movimiento de la realidad. El metafórico es el lenguaje del arte, de la vida, de la equivocidad, de la ambivalencia, de la belleza y, en definitiva, expresión de la libertad de la voluntad.

SUPERHOMBRE

Para Nietzsche el hombre es algo que debe ser superado. Para esto, tiene que superar la moral tradicional, alienante y decadente, tiene que superar la idea de Dios. El tema del superhombre guarda una relación estricta con el de la muerte de Dios: el superhombre aparece cuando Dios es definitivamente expulsado del espacio que hasta entonces había usurpado, cubriendo el superhombre el vacío dejado por Dios. El hombre crea al superhombre al matar a Dios. El hombre, a diferencia del animal, está vuelto al futuro, concibe ideales, metas, destinos. Tres han sido las versiones del ideal humano:  El ideal estético: el ideal humano interpretado como tragedia. En la tragedia se armonizan lo dionisíaco (fuerza,plenitud, irracionalidad) con lo apolíneo (armonía,belleza,racionalidad).  El ideal científico: concibe el ideal humano como sabiduría. El hombre sabio conoce la realidad al desnudo, con todas sus miserias, libre de prejuicios, y por ello afirma enérgicamente la vida.

El superhombre: personifica el valor supremo de la vida, siendo su más alta manifestación la voluntad de poder y dominio.

La transformación del hombre en superhombre pasa por tres estados espirituales distintos:

Niño: A medida que se va quitando las cargas se va haciendo el creador de sus propios valores; se convierte en el hombre-niño que busca la afirmación de sí mismo. A partir del último estado espiritual (niño) empieza a aparecer el superhombre que da lugar a una nueva humanidad libre y creadora

Camello: el espíritu del hombre es en primer lugar un camelo, un animal de carga, que obedece a su amo sin quejarse. Éste le manda y él obedece

León: El hombre-camello, cansado por el peso de la carga, se rebela contra su amo y lo derriba. Entonces se convierte en el hombre-león, crítico y dueño de sí mismo, que dice “yo quiero” e impone su voluntad.

El superhombre defiende la desigualdad, la jerarquía, el cambio, el experimento y el riesgo frente a la igualdad, la seguridad, que serían valores propios de la moral del "rebaño", una moral de esclavos, representada fundamentalmente por el cristianismo. No está sometido a ningún precepto moral, porque se sitúa por encima del bien y del mal. Su conciencia es la conciencia de la naturaleza: lo que favorece a la naturaleza es bueno y lo que la perjudica es malo. El superhombre sería así la máxima posibilidad del ser humano.

ETERNO RETORNO

El superhombre realiza esta afirmación, es el ser que vive el eterno retorno; querer vivir el futuro es querer que vuelva el pasado: todo ha existido ya. El eterno retorno es la repetición de los mismos acontecimientos en los mismos individuos (pensamiento desesperante para el que no ama realmente la vida). Esta figura metafórica sería la culminación del vitalismo nietzscheano. El superhombre cambia la comprensión del tiempo. Ya no existen esperanzas supraterrenas. Las diferencias entre el pasado, como lo ya terminado, y el futuro, como lo que todavía queda por hacer, ya no tienen sentido. La aceptación de la vida significa aceptar el devenir como eterna repetición.

Nietzsche nos desafía a considerar: si supieras que tu vida se repetirá exactamente igual, infinitamente, ¿cómo cambiaría tu perspectiva? ¿Vivirías de manera diferente? ¿Apreciarías más cada momento? El eterno retorno es un llamado a vivir nuestra vida al máximo, a abrazar cada experiencia, porque cada momento es único y, al mismo tiempo, eterno. Así que la próxima vez que te enfrentes a una decisión, piensa en Nietzsche y en el eterno retorno. ¿Elegirías lo mismo si supieras que tendrías que repetirlo eternamente?

el perspectivismo

Teoría contraria al objetivismo. Afirma que toda tesis relativa al mundo, todo conocimiento, está influida por las peculiaridades del sujeto cognoscente.

La verdad es relativa a cada persona. Nietzsche consideraba que no hay hechos objetivos, sino que todo conocimiento está influenciado por la perspectiva de quien lo observa.

Debe de existir una multiplicidad de perspectivas o varios puntos de vista sobre una misma cuestión, teniendo como objeto una mejor comprensión o alcance sobre algo y una obtención de más posibilidades interpretativas. La realidad está constituida por perspectivas y que la interpretación del mundo es desarrollada por la percepción de cada uno (desde un lugar y momento concreto), que el conocimiento y el mundo se pueden afrontar desde distintos puntos de vista, todos ellos válidos y justificados. Siendo la perspectiva de cada sujeto, única y los puntos de vista múltiples/subjetivos, lo cual, nos lleva a una mejor comprensión. El nacimiento de la perspectiva implica el fin de la decadencia del mundo/cultura occidental que, desde Sócrates, ha impuesto un modelo de conocimiento que se sustentaba en verdades necesarias, inmutables y eternas.