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Bienvenidos al caso de la desaparición del árbol
Si quieres que el ladrón de la historia sea un duende pulsa este botón.
Si quieres que el ladrón de la historia sea un profesor pulsa este botón.
Y así comienza la historia:
En Murcia, en un colegio en el que los profesores estaban muy contentos con sus alumnos, ya acercándose las fechas de la NAVIDAD todo el profesorado ayudaba a decorar el colegio. En cada clase colocaban un árbol de Navidad y cada niño de la clase colocaba un calcetín con su nombre. Cuando volvían de las vacaciones, los calcetines estaban llenos de chuches y chocolatinas. Lo que nadie sabía es que esas Navidades lo iban a cambiar todo. Un día antes de la fiesta de Navidad del cole, el árbol de la clase de quinto, de repente, desapareció.
Pulsa este botón si quieres que el profesor lo haya robado por una buena causa
Pulsa este botón si quieres que el profesor lo haya robado para arreglarlo
Un profesor muy bueno:
Pues sí, alguien lo había robado. Un niño, al volver del baño, en el patio, vio a su tutor del curso pasado robando el árbol de Navidad de quinto de primaria, podría haberlo robado por cualquier cosa. El niño que lo vio, se lo calló, ese era su profesor favorito.
Si quieres que lo haya robado porque no le gustaba la Navidad, pulsa aquí
Si quieres que la historia continúe con que el duende lo ha robado porque el no tiene uno
Ya acercándose las fechas de la Navidad se empezaba a contar leyendas sobre un duendecillo un tanto travieso que habitaba en el colegio. A veces, robaba algunas cosas, pero quién era bueno, el duende se portaba bien. Cuando el árbol desapareció empezaron a culpar al duendecillo, no se equivocaban. Apesar de todos habían sido buenos el robo el árbol
Un duendecillo travieso:
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El estudiante que había visto que el profesor robaba el árbol se lo calló, pero no por mucho tiempo pues no se lo podía aguantar. Repartió el secreto por toda la clase y colegio, cuando el profesor se enteró, lo negó todo, porque se lo había llevado a su casa para arreglarlo, el árbol de Navidad se había caído, y él lo iba a arreglar.Cuando se enteraron de la verdad, el alumno que había pasado el secreto le pidió perdón al profesor por pensar esas cosas sin saber porqué.
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Ya que el profesor lo había robado, tenía que ser por alguna causa, y eso es lo que los alumnos intentaban averiguar. Cuando el profesor se enteró de que lo estaban acusando, dijo para qué se lo había llevado. -Me lo he llevado porque por las tardes, voy a dar clases a un orfanato y tienen pocos recursos -dijo el profesor- Entonces, los alumnos le pidieron disculpas ya que lo hizo por un bien y entre todos hicieron otro árbol de Navidad.
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Ya que el duendecillo era tan travieso, tuvieron que saber por qué lo había robado, podía ser porque no le gustaba la Navidad o porque quería fastidiar. Pero justo debajo de la nota que dejó el duende cuando robó el árbol se encontraba otra nota que decía: no lo he robado para fastidiar, simplemente es que no tengo árbol de Navidad. Justo en ese momento decidieron buscarlo. Por las leyendas que se contaban sobre esas fechas del duendecillo, creían saber dónde encontrarlo. Cuando entraron por el pasadizo lo encontraron dispuesto a todo con tal de quedárselo. El duende les puso un reto. Una adivinanza para sabios que decía: si tengo un caramelo y me dan otro pero mi hermano me quita uno, ¿cuántos caramelos tengo? Los alumnos se quedaron pensativos y tras cinco minutos de espera y poca fe , les vino una idea a la cabeza y dijeron a la vez: ¡te queda un caramelo! Al duende no le quedó otra opción que devolverles el árbol de la Navidad.
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Pues sí, el duendecillo era más travieso de lo que pensábamos. Había robado el árbol, dejando una nota en la que ponía: soy el duendecillo mágico del cole.Todos los alumnos de la clase, se pusieron tristes pero... a uno se le ocurrió una idea,¡vamos a buscarlo! (exclamó) Y otro alumno dijo: vamos a buscarlo en el pasillo de las escaleras. ¡Allí estaba! Tuvieron que quitar un cartel, y detrás, había un pasadizo secreto en el que estaba la casa del duende. Él estaba durmiendo, así que se llevaron el árbol pacíficamente.