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Infografía Real Decreto 659/2023

Corina Barbu

Created on November 6, 2024

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Transcript

Real Decreto 659/2023 de 18 de julio

Por lo que se desarrolla la ordenación del Sistema de Formación Profesional

Ejes de la Ley para F.P. articulado 659/2023

La Ley Orgánica 3/2022, de 31 de marzo, de ordenación e integración de la Formación Profesional, junto con el Real Decreto 659/2023, establece varios ejes fundamentales para el desarrollo del Sistema de Formación Profesional en España. A continuación, se detallan algunos de los ejes principales:

Flexibilidad y adaptación

Cualificación recualificación

Accesibilidad e inlusión

Gobernanza y coordinación

Calidad y evaluación

Innovación y emprendimiento

Estos ejes son fundamentales para garantizar que el Sistema de Formación Profesional responda a las necesidades del mercado laboral y de la sociedad en general, promoviendo la empleabilidad y el desarrollo profesional de los ciudadanos.

Organización del currículo

Currículo modular

Evaluación y acreditación

Itinerarios formativos

Felexibilidad en la duración

Adaptación a las necesidades del mercado.

Colaboración y aprendizaje integrado

Etapas educativas en los Institutos

Educación Secundaria Obligatoria

Bachillerato

Formación profesional (F.P.)

F.O.L.

Desempeño de la Comunidad Educativa

Profesorado

Alumnado y familias

Administraciones Educativas

Centro Educativo

Concludiones generales

Participación activa: el alumnado debe involucrarse activamente en su proceso de aprendizaje, aprovechando las oportunidades que ofrece la FP para adquirir competencias y habilidades. Las familias, por su parte, juegan un papel importante en el apoyo y la orientación de los estudiantes en sus decisiones educativas y profesionales. Feedback y comunicación: La comunicación entre las familias y los centros educativos es esencial para el seguimiento del progreso del alumnado y para abordar cualquier necesidad específica que pueda surgir durante su formación.

El sistema está diseñado para adaptarse a un mundo laboral cambiante, proporcionando ofertas formativas que sean ordenadas, acumulables y acreditables, lo que permite a los trabajadores adquirir y mantener las habilidades necesarias para su desarrollo profesional.

Se establecen itinerarios formativos que permiten a los estudiantes seguir un camino educativo desde la educación obligatoria hasta la formación profesional, facilitando la transición entre diferentes niveles de cualificación y adaptándose a las necesidades del mercado laboral.

Se fomenta el aprendizaje colaborativo y la integración de competencias, asegurando que los estudiantes no solo adquieran conocimientos teóricos, sino que también desarrollen habilidades prácticas a través de proyectos y tutorización.

La ESO es una etapa educativa que abarca desde los 12 hasta los 16 años. Es obligatoria y se divide en cuatro cursos. Al finalizar la ESO, los estudiantes obtienen el título de Graduado en Educación Secundaria, lo que les permite acceder a diferentes opciones educativas, incluyendo el Bachillerato o la Formación Profesional de Grado Medio.

El currículo se organiza en módulos profesionales, que son unidades de formación que abordan competencias específicas. Cada módulo está diseñado para proporcionar a los estudiantes las habilidades y conocimientos necesarios para su desarrollo profesional en un área determinada.

Se busca abrir la Formación Profesional a toda la población, facilitando el acceso a la formación para el primer empleo, la formación continua y la readaptación profesional, asegurando que cada persona reciba la orientación y el acompañamiento necesario.

Los currículos se diseñan teniendo en cuenta las demandas del mercado laboral, incorporando competencias transversales y específicas que son relevantes para la empleabilidad. Esto incluye la integración de aspectos como la digitalización y la sostenibilidad en todos los sectores económicos.

En el caso de la especialidad de Formación y Orientación Laboral (FOL), este módulo se adapta a la organización del módulo profesional de Iniciativa Emprendedora (IPE). En el año 2024 se sustituye por Itinerario Personal para la Empleabilidad I y ll (IPE I y IPE II) F.O.L. se centra en proporcionar a los estudiantes las herramientas necesarias para su inserción laboral, incluyendo aspectos como la búsqueda de empleo, derechos y deberes laborales, y habilidades para el trabajo en equipo. La adaptación a IPE implica que se integren contenidos relacionados con el emprendimiento, fomentando la capacidad de los estudiantes para desarrollar proyectos empresariales y adquirir una mentalidad emprendedora.

Espacio de aprendizaje integral: el centro educativo debe ser un entorno que promueva el aprendizaje colaborativo y la inclusión, adaptándose a las necesidades de todos los estudiantes, incluyendo aquellos con necesidades educativas especiales. Vinculación con el entorno productivo: los centros educativos deben establecer vínculos con empresas y organizaciones del entorno, facilitando la formación en contextos reales y promoviendo la inserción laboral de los estudiantes a través de prácticas y proyectos conjuntos.

Se permite cierta flexibilidad en la duración de los programas formativos, adaptándose a las características de los estudiantes y a las necesidades específicas de formación. Por ejemplo, se pueden autorizar modificaciones en la duración de los ciclos formativos para ajustarse a perfiles particulares.

La ley promueve la cultura del emprendimiento y la sostenibilidad, buscando mejorar la cualificación de la población y reducir los desequilibrios estructurales en diferentes áreas del país.

Se enfatiza la importancia de la formación continua a lo largo de la vida laboral, garantizando que los trabajadores puedan adaptarse a las modificaciones en sus puestos de trabajo y desarrollen planes formativos que favorezcan su empleabilidad.

Se establecen mecanismos para asegurar la calidad del sistema de Formación Profesional, incluyendo la evaluación tanto a nivel estatal como en los centros donde se imparten las distintas ofertas formativas.

La FP se divide en dos niveles principales: Grado Medio y Grado Superior. Grado Medio: Accesible tras la ESO, permite a los estudiantes adquirir una cualificación profesional en un área específica. Los programas suelen tener una duración de dos años. Grado Superior: Accesible tras el Bachillerato, ofrece una formación más avanzada y especializada, también con una duración de dos años. Dentro de la FP, se pueden encontrar diferentes especialidades y módulos, que se organizan en función de las competencias profesionales requeridas en el mercado laboral.

El Bachillerato es una etapa que empieza después de la E.S.O. que dura dos años (de los 16 a los 18 años) y se centra en la preparación para estudios superiores, como la universidad. Al finalizar el Bachillerato, los estudiantes obtienen el título de Bachiller, que les permite acceder a la universidad o a la Formación Profesional de Grado Superior.

Facilitadores del aprendizaje: los docentes son clave en la implementación del currículo y en la adaptación de las metodologías de enseñanza a las necesidades de los estudiantes. Su formación continua y su capacidad para innovar en la enseñanza son fundamentales para el éxito del alumnado. Orientación y tutoría: además de impartir conocimientos, el profesorado debe ofrecer orientación y apoyo emocional a los estudiantes, ayudándoles a desarrollar habilidades socioemocionales y a prepararse para la vida laboral.

Los ejes son fundamentales para garantizar que el Sistema de Formación Profesional responda a las necesidades del mercado laboral y de la sociedad, promoviendo la empleabilidad y el desarrollo profesional de los ciudadanos. La organización del currículo en el Sistema de Formación Profesional busca ser dinámica y adaptable, garantizando que los estudiantes estén preparados para enfrentar los desafíos del mercado laboral actual y futuro. La colaboración y la comunicación efectiva entre administraciones, alumnado, familias, profesorado y centros educativos son clave para crear un entorno de aprendizaje que prepare a los estudiantes para los desafíos del futuro.

Se establecen criterios de evaluación y mecanismos de acreditación de competencias adquiridas, tanto a través de la formación formal como de la experiencia laboral. Esto permite a los estudiantes obtener reconocimiento por sus habilidades y conocimientos, independientemente de cómo los hayan adquirido.

Función reguladora y de supervisión: las administraciones educativas son responsables de establecer las normativas y directrices que rigen la FP, asegurando que los programas formativos se ajusten a las necesidades del mercado laboral y a los estándares de calidad. Financiación y recursos: proporcionan los recursos necesarios para el funcionamiento de los centros educativos, incluyendo la financiación de programas, la formación del profesorado y la mejora de infraestructuras. Promoción de la innovación: fomentan la innovación en la enseñanza y el aprendizaje, impulsando proyectos que integren nuevas metodologías y tecnologías en la formación profesional.

Se regula la naturaleza y funciones del Consejo General de la Formación Profesional, asegurando una adecuada gobernanza del sistema y la coordinación entre las diferentes administraciones y entidades involucradas.