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ZOMBIS

la peor pesadilla de la naturaleza

¡Descúbrelos!

"¡Zombis! La peor pesadilla de la naturaleza" no es el argumento de una película de ciencia ficción sino una invasiónreal de organismos parásitos, que modifican el comportamiento de los huéspedes a los que infestan y los convierten en auténticos siervos dedicados a garantizar la supervivencia del invasor. La selección natural y las mutaciones parecen haber dotado a estas especies de poderes escalofriantes.

Amplía

El parásito Toxoplasma gondii es uno de los ejemplos más intrigantes de manipulación de comportamiento en la naturaleza. Este protozoo, que completa su ciclo de vida en el intestino de los felinos, infecta a animales como ratones y provoca cambios en su cerebro. Uno de sus efectos más fascinantes es el aumento en la producción de dopamina, un neurotransmisor relacionado con el placer y el riesgo. Esto hace que los ratones infectados pierdan el instinto de evitar a los gatos e incluso se sientan atraídos por su olor, aumentando las probabilidades de ser cazados. Así, el parásito logra regresar al felino, donde puede reproducirse y cerrar su ciclo biológico.

ZOMBIS UNICELULARES

El hongo Cordyceps unilateralis infecta a las hormigas carpinteras y, una vez dentro de su cuerpo, secreta sustancias que alteran sus impulsos nerviosos y las "obligan" a seprarse de la colinia para subir a las hojas y ramas más altas de su entorno. Allí, la hormiga infectada se aferra con fuerza a la planta, en lo que se llama el "mordisco de la muerte". El hongo, termina de matar a la hormiga y sigue creciendo en su interior, hasta que produce un cuerpo fructífero que sobresale del cadáver del desafortunado insecto, liberando esporas al entorno que pueden infectar a nuevas hormigas, repitiendo así el ciclo.

ZOMBIS FÚNGICOS

Los parásitos del género Gordius, comúnmente llamados gusanos Nematomorfos, infectan a insectos como grillos y saltamontes, alojándose dentro de sus cuerpos y desarrollándose mientras consumen sus tejidos.Cuando el gusano está listo para salir al agua y completar su ciclo de vida, secreta sustancias que alteran el comportamiento del insecto, haciendo que este busque desesperadamente una fuente de agua, como un charco o un arroyo. El insecto infectado se lanza al agua, un comportamiento inusual que pone en riesgo su vida. Una vez en el agua, el gusano emerge del insecto, que frecuentemente no sobrevive al proceso.

ZOMBIS INVERTEBRADOS

Leucochloridium paradoxum, es un platelminto capaz de instalarse en los tentáculos de ciertas especies de caracoles. Este parásito invade el sistema digestivo del caracol y migra a los cuernos oculares, donde crea una especie de sacos pulsantes que toman un aspecto colorido y llamativo, imitando la apariencia de larvas o gusanos, lo que atrae la atención de las aves. Además, el parásito manipula el comportamiento del caracol, impulsándolo a moverse hacia áreas expuestas y a plena luz, donde es más visible para los depredadores. Una vez que el ave ingiere al caracol infectado, el parásito puede desarrollarse y reproducirse en el intestino del ave, liberando luego sus huevos en las heces, que serán consumidas por nuevos caracoles, reiniciando así el ciclo.

ZOMBIS INVERTEBRADOS

La avispa esmeralda (Ampulex compressa) es un parásito de las cucarachas de la especie Periplaneta americana. La primera picadura de la avispa paraliza temporalmente las patas delanteras de la cucaracha, y la segunda, mucho más precisa, inyecta veneno directamente en el cerebro, que bloquea los centros nerviosos que controlan la iniciativa y la capacidad de escape, dejando al insecto en un estado de “zombi sumiso”. Con la cucaracha ahora dócil, la avispa la guía sujetando una de sus antenas, llevándola hasta una madriguera. Allí, pone un huevo en el abdomen de la cucaracha. La larva de la avispa se desarrolla en su interior, alimentándose de los tejidos y órganos internos de forma estratégica, para mantenerlo vivo el mayor tiempo posible. Finalmente, la larva completa su desarrollo y emerge como una nueva avispa adulta, dejando atrás el cuerpo vacío de su “hospedador zombi”.

ZOMBIS INVERTEBRADOS

Los baculovirus son virus que infectan principalmente a insectos, y uno de sus hospedadores más conocidos es la oruga de Lymantria dispar, una especie de polilla. El virus provoca un cambio radical en su comportamiento, haciendo que se vuelva más voraz de lo normal. La oruga, descontrolada, comienza a subir por el árbol y en vez de mantenerse en zonas más ocultas, a salvo de los depredadores, se expone en lo más alto. El virus desencadena la producción de enzimas que terminan por disolver sus tejidos, liberando una lluvia de partículas virales sobre las hojas y ramas inferiores, donde puede infectar a nuevas orugas que se alimenten de estas áreas.

ZOMBIS VÍRICOS