Want to make creations as awesome as this one?

Transcript

Universidad Virtual del Estado de GuanajuatoNombre: Danely Aguilera Flores Modulo: Desarrollo humano I v1Asesor: María Elba Trejo RiveraFecha de elaboración: 13/09/2024

R5. Crecer jugando

Primera infancia

¿Por qué es importante el juego en la primera infancia?El juego es fundamental en la primera infancia (0 a 3 años) ya que permite a los bebés explorar el mundo que los rodea y aprender sobre sí mismos y su entorno. Durante esta etapa, el juego actúa como una herramienta natural para que los bebés desarrollen habilidades motoras, cognitivas y sociales, ya que estimula el cerebro y promueve conexiones neuronales esenciales para el aprendizaje futuro.

Físico: El juego contribuye al desarrollo motor grueso y fino, ya que las actividades como gatear, agarrar objetos y mover el cuerpo ayudan a mejorar la coordinación y fuerza muscular.

¿Cómo contribuye el juego al desarrollo físico, cognitivo y psicosocial-afectivo del bebé?

Cognitivo: Los juegos estimulan la curiosidad y la exploración, lo que fomenta el desarrollo de habilidades como la resolución de problemas, la memoria y el aprendizaje del entorno.

Psicosocial-afectivo: A través del juego, los bebés comienzan a formar vínculos afectivos con sus cuidadores, fortaleciendo su sentido de seguridad y confianza. También es una forma de comenzar a desarrollar la empatía y las habilidades sociales.

segunda infancia

¿Por qué es importante el juego en la segunda infancia?El juego en la segunda infancia (de 3 a 6 años) es esencial porque es una herramienta clave para la socialización y el desarrollo de habilidades más complejas. Durante esta etapa, los niños comienzan a participar en juegos cooperativos, lo que les ayuda a desarrollar el lenguaje, las habilidades de resolución de problemas y las competencias emocionales. A través del juego, los niños de esta edad no solo exploran su imaginación, sino que también aprenden a interactuar con otros y a desarrollar un sentido de identidad personal.

Físico: Las actividades como correr, saltar y jugar al aire libre ayudan a mejorar la coordinación, el equilibrio y la fortaleza física.

¿cómo contribuye el juego al desarrollo físico, cognitivo y psicosocial-afectivo del niño?

Cognitivo: Los juegos de roles y los juegos de reglas permiten a los niños desarrollar habilidades de pensamiento lógico, planificación y resolución de problemas.

Psicosocial-afectivo: Los juegos en grupo favorecen la cooperación, el trabajo en equipo y la empatía, ya que los niños aprenden a compartir, seguir reglas y gestionar sus emociones en contextos sociales.

tercera infancia

¿Por qué es importante el juego en la tercera infancia?En la tercera infancia (de 6 a 12 años), el juego sigue siendo fundamental, pero adquiere una mayor estructura y reglas. A través del juego, los niños aprenden habilidades más avanzadas como la resolución de conflictos, el trabajo en equipo y la resiliencia. Además, el juego contribuye a fortalecer la autoestima y el sentido de pertenencia, mientras que fomenta la independencia.

Físico: Durante esta etapa, el juego ayuda a refinar las habilidades motoras finas y gruesas, lo que es vital para actividades físicas más complejas como deportes o danza.

¿cómo contribuye el juego al desarrollo físico, cognitivo y psicosocial-afectivo del niño?

Cognitivo: Los juegos de estrategia y competencia ayudan a desarrollar el pensamiento crítico y la toma de decisiones.

Psicosocial-afectivo: El juego durante esta etapa fomenta la construcción de relaciones más sólidas con sus compañeros, y enseña a los niños a gestionar el fracaso, la competencia y las relaciones sociales.

Desarrollo

Segunda infancia (3 a 6 años)

Un juego popular en la segunda infancia que encaja dentro del juego simbólico es "La Casita" o "Jugar a la Casita". En este juego, los niños imitan la vida cotidiana al asumir roles como padres, madres, hermanos o profesiones del entorno familiar, recreando escenarios como cocinar, limpiar, cuidar muñecos (representando bebés) o ir de compras.Aspectos que desarrollan los niños con este juego:Físico: "La Casita" implica movimientos como levantar objetos (simulando que son utensilios de cocina), organizar "alimentos" o "poner la mesa". Estas acciones mejoran la coordinación motora fina y gruesa, y pueden incluir actividades como caminar o correr al simular diferentes escenarios dentro del juego.Cognitivo: El juego de "La Casita" requiere que los niños construyan una narrativa, imaginen situaciones de la vida real y resuelvan problemas cotidianos simulados (como "¿qué cocinaremos hoy?"). Estos procesos fortalecen habilidades cognitivas como la planificación, el razonamiento y la memoria.Psicosocial-afectivo: A través del juego de "La Casita", los niños desarrollan empatía al asumir roles de otras personas, como cuidadores o figuras de autoridad. Además, mejora la interacción social, ya que necesitan comunicarse con otros jugadores para coordinar acciones dentro del juego, aprendiendo a compartir y a negociar roles y tareas.

Referencias

Piaget, J. (1951). Play, dreams and imitation in childhood. London: Routledge & Kegan Paul. Recuperado el 13 de septiembre del 2024 de: https://doi.org/10.4324/9781315009652Vygotsky, L. S. (1978). Mind in society: The development of higher psychological processes. Harvard University Press. Recuperado el 13 de septiembre del 2024 de: https://doi.org/10.2307/j.ctvjf9vz4