Intervención en crisis

Objetivos de la intervención de crisis

Tipos de crisis

Reacciones de las crisis

Fases de las crisis

Choque

Agotamiento

Translaboración

Negación

Terminación

Desorden

Evento precipitante:

Intrusión

Explosión

Adaptación

Estabilización

Respuesta desorganizada

Profundización en la intervención en crisis

Son los comportamientos que vienen desde la aflicción ante el intento de establecer el estado emocional.

Pérdida de control de emociones, pensamientos y comportamientos, que llevan a conductas inapropiadas y destructivas.

Se entiende como la abundancia de pensamientos involuntarios sobre ideas de dolor ante los sentimientos generados durante la crisis, es una etapa en la que se procesa lo vivido, pero aún existe el desajuste emocional, además, se puede analizar o expresar afirmaciones sobre el impacto.

Es un proceso en el que la persona expresa su experiencia de la situación mediante imágenes o sentimientos acerca del desencadenante de la crisis a quienes lo hacen de manera natural cuando se sienten preparados para externar sus emociones mientras que otros necesitan ayuda externa como sesiones de terapia.

El choque ocurre antes de un cambio repentina del ambiente social de la persona y hace que las emociones se presenten de manera explosiva, al ser un acontecimiento imprevisto, el individuo no tiene tiempo de asimilar el impacto, por lo tanto cae un estado de shock emocional.

El agotamiento aparece ante una situación constante que la persona debe manejar, por lo general, de manera efectiva, ante este panorama se presenta un momento de cansancio, en el que el individuo ya no tiene fuerzas o energía para afrontar el hecho, lo cual provoca que su estructura física y emocional pueda desintegrarse.

Restauración de un nivel de funcionamiento cognitivo, afectivo y conductor mínimo.

Aliviar lo inmediato los síntomas.

Comprender los eventos precipitantes relevantes que condujeron al desequilibrio.

Identificar recursos que se pueden utilizar, tomados de los ya existentes en la comunidad y al alcance del sujeto.

Iniciar nuevas formas de percibir, pensar y sentir, así como comenzar la formulación de formas de enfrentamiento para la solución de la crisis.

Evento abrumador constante que provoca mucho estrés en la víctima, por lo general, crea respuestas de shock o negación.

Es la aceptación de la situación, aunque continúa las reacciones no tan externas como en fases anteriores, pero sí con el recuerdo latente del evento, la persona es vulnerable a explotar.

Es la conciliación entre el evento sucedido con la realidad actual, si tiene el control de la situación, con visión a una estabilidad en el futuro, se refiere al intento de la persona para adaptarse nuevamente a su vida después del acontecimiento.

En este momento la persona ya identificó los sentimientos y pensamientos que surgieron por el evento acontecido también los pudo expresar desde su propia experiencia mientras vivía un proceso de reorganización por lo que los recuerdos de pérdidas y las características principales de su desestabilización ya no le afectan.

Es de las primeras reacciones ante el impacto del evento, se presenta llanto, angustia, gritos, desmayos etcétera, la reacciones pueden o no ser obvias ante las situaciones.

Es una forma de crear una barrera o amortiguamiento ante el impacto sirve como mecanismo de defensa emocional para no aceptar o pensar la situación.