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sesión 4. Katia Uribe

Sesgos de género en la sexualidad y en las formas del placer

Recordando a las mujeres xinkas, la recuperación consciente del territorio-cuerpo como acción política y emancipatoria, se da a través de derribar esa fragmentación entre nuestros sentipensares y experiencias, como parte de nuestro autoconocimiento de la capacidad de nuestro cuerpo para experiementar sensorial y emocionalmente. Reconocemos nuestro cuerpo como nuestro, como lugar para ejercer nuestros derechos (Cabnal, Lorena, 2010; Uribe, Katia, 2024)

Las mujeres y personas menstruantes con endometriosis llevan en su memoria corporal situaciones en las que han sentido dolor. El hecho de que la sociedad, la familia y profesionales de salud las perciban desde la enfermedad y el dolor y no como personas, da como resultado la distorsión en la forma en cómo se perciben, olvidando que su cuerpo que ha sentido dolor, es capaz de colocarse desde el binestar y las distintas formas de placer (Uribe, Katia, 2024)

La sexualidad

Desde la puerta violeta

La concepción de sexualidad en las mujeres ha sido construida desde el biologicismo y heteroandrocentrismo, dando como consecuencia una jerarquía en el pleno ejercicio de los derechos sexuales, como de las expresiones y el pleno goce de la sexualidad. La reproducción se ha tomado como único fin de nuestra sexualidad, además de desarrollar como legítimo y verdadero que la sociedad debe de ser heterosexual (Núñez, Guillermo, 2005; Careaga, Gloria, 2017). Realmente el concepto de sexualidad abarca todo tipo de comportamientos verbales y no verbales dirigidos a distintos fines sexuales y dentro de estos, el placer; engloba los derechos sexuales y reproductivos, pero también la difusión para el bienestar y la salud (Careaga, Gloria, 2002;2021) Incluyecdo nuestro consentimiento que se distingue del abuso.

Sexualidad

De las autoras y autores Sue Jones, Tamara Duarte, Nicolás Astorgam, Magdalena Pardo y Rodrigo Sepúlveda (2015) explican de Pierre Bourdieu (1991) que los cuerpos significan partiendo de su posición en un contexto social , dependiendo de las normas sociales se determina un cuerpo legítimo ( que se concibe como bello, sano, productivo) o ilegítumo (cuerpos diferentes) , donde incluso entran las personas con alguna enfermedad (2015) De este modo, la sociedad determina qué tipo de acciones y cuales y de qué modo hacerlas a este segundo grupo, asociado con su vida sexual. En tal aspecto, Kathleen Karry describe que como norma social patriarcal, se le atribuye la sexualidad a la mujer como parte de su identidad, donde satisface al otro (Aránguez, Tasia, 2005)María Serra (2014) por tanto explica que las mujeres con alguna enfermedad son percibidas desde esta y por tanto, consideradas como asexuales , lo que las margina como sujetas de derecho.

En el caso de las mujeres y personas menstruantes, puede deberse a distintos factores como: el dolor durante las relaciones coitales o penetración , concerbirlas desde la enfermedad y como sujetas que ejercen su placer y sexualidad y por la medicalización exhaustiva , aunado a las cirugías, la disminución de la libido, y sobre la concepción tan fuerte que hay en la sociedad sobre la sexualidad y el placer en la mujer .

El androcentrismo y heterocentrismo a abarcado por mucho tiempo el designar que "las relaciones sexuales duelen" , ya que involucra una jerarquización en las prácticas sexuales, que refieren a la penetración o al coito como un concepto general, marginando y subestimando otras experiencias sexuales y eróticas, además de excluir a la disidencias sexo-genéricas como si fueran inexistentes dentro de la problemática. Es así como otras formas del placer y sexualidad se invisibilizan, se prohiben, son burla o se condenan ( Núnez, Guillermo, 2005) He aquí la importancia del concepto de dispareunia: dolor durante o después del coito (Spengles, Lessing et al; 2020) No es desligitimizar el síntoma, sino que al mismo tiempo se han deslegítimado las otras formas de vivir plenamente nuestra sexualidad y placer.

Las formas del placer

La recuperación del cuerpo y considerarlo como nuestro, habilita en nosotras otras formas de conocernos desde nuevas formas del placer y el erotismo, que rompen con la vergüenza, la culpa y el dolor. Audre Lorde (1978): "El placer es un poder que reside al interior de nostras" y lo erótico es una "afirmación de la fuerza vital de las mujeres, de esa energía creativa y fortalecida, cuyo conocimiento y uso estamos reclamando en nuestro lenguaje, nuestra historia, nuestra danza, nuestro amor, nuestro trabajo y nuestras vidas" 1.Actos performativos que rompen el orden social, al romper y reordenar este, de acuerdo con Judith Butler (2015) 2. Nuestras formas del placer no se reducen a la sexualidad, sino que pasa a las experiencias que nos causan satisfacción, bienestar y plenitud. 3.Redirigir la sexualidad y erotismo desde nostras, vivir nuestra sexualidad sin dolor de forma individual (masturbación) o con una o más parejas sexuales. 4. Reconocer nuestra cuerpa (vagina, útero) desde el placer y la sexualidad donde se graba ahora una sensación de placer.

  • Como otro punto ligado a la recuperación de nuestro cuerpo y el pleno ejercicio de nuestros derechos, está ligado a la decisión de ejercer o no la maternidad o gestación.
  • El ejercer nuestra maternidad no debe impliacar una forma de legitimar el cuerpo de las mujeres, es decir, no debe concebirse desde el "deber ser de la mujer" y un romanticismo implantado para la realización de la mujer (Aránguez, Tasia, 2018)
  • La maternidad debe de ser deseada con pleno ejercicio de nuestra decisión y derechos
  • Las implicaciones de la infertilidad a nivel salud mental y calidad de vida, no deben de darse por hecho (Sandra Gea Fernández, 2020)
  • La búsqueda de la gestación y maternidad no debe de ser motivo de lucro, pues, las Técnicas de Reproducción Asistida encuentran un gran "nicho" en el negocio de la endometriosis y no aclaran las intervenciones o repercusiones en las mujeres en los ámbitos salud, económico y psicológico.
  • Debemos de estar presentes en todo momento del proceso de tratamiento y tomar decisiones, ya que es cuestionable actualmente la esterilización forzosa o sin consentimiento (Aránguez, Tasia, 2018).
  • Por otra parte, también tenemos derecho a elegir libremente no ejercer nuestra maternidad, sin que se nos juzgue o criminalice, como a Gabriela de 17 años en Yucatán (Guillén, Beatriz, 2021)

En esta sesión vimos, la recuperación de nuestro territorio-cuerpo-tierra mediante la capacidad de hacer consciente las experiencias eróticas, emocionales y placenteras, que funcionan para hacer frente a la fragmentación y dejar de sobrevivir desde el dolor, lo que fortalece nuestro bienestar, salud y seguridad en nostras mujeres mexicanas con endometriosis, al sentir nuevamente nuestro cuerpo como nuestro (Uribe, Katia, 2024)