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MATERIAL ELABORADO POR: M.E. MARÍA DE LOS ÁNGELES PACHECO UREÑA

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Productos Perecederos y No Perecederos en la Industria Alimentaria

Los alimentos se clasifican en dos grandes categorías según su tiempo de vida útil y las condiciones de almacenamiento requeridas: perecederos y no perecederos. Comprender esta distinción es fundamental para cualquier negocio relacionado con la alimentación, ya sea un restaurante, un supermercado o una empresa de catering.

Definición: Estos son alimentos que se descomponen con relativa rapidez debido a la acción de microorganismos y factores ambientales como la temperatura y la humedad. Requieren refrigeración o congelación para conservar su calidad y seguridad alimentaria.

Alimentos Perecederos

Alimentos en descomposición

Vida útil corta: Deben consumirse o refrigerarse pronto después de su compra. Requieren condiciones especiales de almacenamiento: Refrigeración o congelación para preservar su calidad. Alta susceptibilidad al deterioro: Pueden desarrollar bacterias dañinas si no se manipulan correctamente.

Refrigerados

Características:

Alimentos en descomposición

Vida útil corta: Deben consumirse o refrigerarse pronto después de su compra. Requieren condiciones especiales de almacenamiento: Refrigeración o congelación para preservar su calidad. Alta susceptibilidad al deterioro: Pueden desarrollar bacterias dañinas si no se manipulan correctamente.

Refrigerados

Características:

Huevos

Lácteos (leche, yogur, queso)

Frutas y verduras frescas

Carnes (vacuna, pollo, pescado

Ejemplos

Definición: Son aquellos alimentos que pueden almacenarse a temperatura ambiente durante largos períodos sin descomponerse significativamente.

Alimentos No Perecederos

Características: Baja humedad: Tienen un bajo contenido de agua, lo que dificulta el crecimiento de microorganismos. Envasado hermético: Protegen el alimento de la contaminación externa. Procesamiento: A menudo se someten a procesos como la pasteurización, esterilización o deshidratación.Vida útil larga: Pueden almacenarse durante meses o incluso años.Resistentes a la descomposición: Gracias a su bajo contenido de humedad y a los procesos de conservación.No requieren refrigeración: Se pueden almacenar en la despensa.

Conservas enlatadas (frutas, vegetales, carnes)

Lácteos (leche, yogur, queso)

Frutas y verduras frescas

Granos (arroz, pasta, avena)

Ejemplos