Presentación Granja

ZOE XIADANY SANDATE RAGEL ROSELYN TREVIÑO SANCHEZ

EL HOMBRE Y SU GRANJA

Una vez había un hombre que vivía en una granja y cultivaba trigo. Era un hombre honesto y trabajador, y todos los días salía al campo a cuidar de sus cosechas.Un día llegó una gran tormenta en la región y su campo quedó inundado por la lluvia. El hombre perdió todo su trigo, y no le quedó nada con lo que poder seguir alimentando a su familia ni poder vender para hacer dinero. El hombre estaba devastado y no sabía cómo salir adelante. Su vida cambió por completo y tuvo que encontrar una manera de salir del mal momento.

EL HOMBRE Y SU GRANJA

El hombre pasó días y noches sin poder dormir, pensando en cómo podía solucionar su situación. Su familia dependía de él y no podía rendirse. Finalmente, un día se le ocurrió una idea. Pensó en pedirle ayuda a sus vecinos para recuperar el trigo que se había perdido y así poder replantarlo. Se levantó temprano y fue a visitar a sus vecinos y explicarles su situación. Los vecinos, al escuchar su historia, se preocuparon y decidieron ayudarle.

Después de pedir ayuda a sus vecinos, el hombre se sentía aliviado y motivado. Los vecinos se reunieron y entre todos pudieron recuperar el trigo perdido. Juntos, alistaron el campo y replantaron el trigo, con esperanza de que las cosechas crecerían mejor que antes. El hombre trabajó duro junto con sus vecinos, compartiendo su esfuerzo y su conocimiento para asegurarse de que las nuevas cosechas fueran un éxito.Con esfuerzo y dedicación, el hombre y sus vecinos lograron recuperar lo que perdieron y hasta más.

Gracias a la ayuda de los vecinos, el hombre pudo levantar su granja y alimentar a su familia nuevamente. Pasó todo el día trabajando en la granja, cuidando las nuevas semillas y asegurándose de que crecieran sanas y fuertes. Con el paso de los meses, su trigo comenzó a crecer y finalmente la cosecha llegó.Cuando llegó la hora de la cosecha, el hombre y sus vecinos se alegraron al ver la abundante cosecha de trigo. Su duro trabajo había valido la pena y tenían suficiente alimento para su familia y hasta para vender

Después de la exitosa cosecha, el hombre pudo vender el trigo y hacer dinero para recuperar lo que había perdido y hasta más. Su granja y sus cosechas eran mejor nuevamente, y su familia estaba contenta y sana. El hombre aprovechó esa oportunidad para cuidar de su familia y su granja, y nunca olvidó el apoyo que recibió de sus vecinos en un momento tan difícil. Gracias a su esfuerzo y dedicación, el hombre pudo salir adelante y vivir una vida tranquila en su granja.

¡FIN!