Want to make creations as awesome as this one?

Transcript

Clase 1

Introdución a la Neurociencia

La investigación científica en el Siglo XXI ha marcado el inicio de la nueva revolución industrial. Los avances en los descubrimientos sobre el cuerpo humano han traído para la historia algunas respuestas sobre el actuar de las personas, cuales órganos son vitales para la vida, cuales remplazables y al futuro cuales se podrían llegar a modificar.

Sin embargo, el encéfalo humano ha sido un órgano indescifrable, respecto del cual persisten algunas preguntas sin respuesta, entre ellas: ¿Cómo una persona siente? ¿Qué parte del cerebro forja la personalidad? ¿Qué define a una persona al actuar de determinada manera distinta a otra, en igualdad de condiciones?

Muchas han sido las teorías que, desde la religión hasta el derecho, le intentan dar explicación a temas como el comportamiento humano. Sin embargo, la innovación, la tecnología y la ciencia, van a encargarse de descifrar el funcionamiento del cerebro que, aunque no dé una completa respuesta a lo desconocido, se aproximará a mostrar con cierta claridad puntos claves que servirán de guía para las generaciones futuras dispuestas a seguir investigando sobre del cerebro.

La neurociencia es una rama de la medicina que tiene como objetivo poder analizar y comprender el funcionamiento del sistema nervioso frente a la producción y regulación de las funciones básicas del cuerpo humano[2]. Sin embargo, el cerebro, como órgano principal del sistema, también es un cajón en donde se guardan los pensamientos, recuerdos, conocimiento, sentimientos y la personalidad; siendo claves para distinguir a una persona entre los demás. Por ello, se ha visto a la neurociencia como una rama que eventualmente podría convertirse en mecanismo potencial para las compañías tecnológicas nacientes en la globalización, facilitando el desarrollo de su actividad al tener instrumentos como la estructura del cerebro de una persona.

Los avances de ese intervencionismo cerebral han llevado a que, desde los Estados hasta las empresas, haya una constante preocupación en la inversión y el desarrollo de técnicas para alcanzar la manipulación cerebral como nexo con sus objetivos gubernamentales y lucrativos. Los avances neurotecnologicos y científicos han hecho que desde la ética profesional nazca una preocupación por regular una nueva generación de derechos que permitan la protección del cerebro de las personas, frente a la injerencia externa tendiente a crecer.

La cuestión del cerebro y la mente (qué es y cómo funciona) ha atrapado el pensamiento desde los orígenes de la filosofía, el hombre no ha dejado de buscar respuesta. La primera pregunta es si el cerebro y la mente son una misma unidad.”

La cuestión del cerebro y la mente -qué es y cómo funciona- ha atrapado el pensamiento del hombre desde los orígenes de la filosofía, ya que nunca ha dejado de buscar una respuesta. La primera pregunta es: ¿el cerebro y la mente son una misma unidad? En la actualidad, gracias a los avances científicos, el cerebro ha pasado a un primer plano, posición que se afianza con cada nuevo descubrimiento: su estructura, funcionamiento y composición. Podríamos decir que el cerebro es la máquina y la mente es todo aquello que sucede en el cerebro.

Para afrontar las grandes cuestiones acerca de la mente, junto al gran desarrollo de la neurociencia de las últimas décadas, es imprescindible un abordaje multidisciplinar. Entre las ciencias más importantes, destacamos las ciencias sociales, pedagogía, arte o medicina. Un paleoantropólogo es, en cierta manera, un psicólogo que analiza el modo de vida de nuestros ancestros: causas, condiciones, técnicas, hábitos, costumbres, etc. ¿Qué tiene esto que ver con la educación? ¿Qué entendemos por historia de la neurociencia? El estudiante sacará sus propias conclusiones, pese a no ser un gran experto en la materia, para comprender la cadena de la evolución. Escuchando a aquellos que tienen que han llegado a descubrimientos clave, podemos ser capaces de plantearnos algunas cuestiones. Como afirma Arsuaga “el mayor misterio de la magia se encuentra en nuestro cerebro” (1998).

Historia de la neurociencia

Desde sus orígenes, la neurociencia se ha caracterizado por una visión sintética, integradora y orgánica de todas aquellas disciplinas dedicadas al estudio de la neurofisiología y el sistema nervioso. Esta multidisciplinariedad ha confluido en ciencia básica e investigación clínica. Iniciándose en la década de los sesenta y setenta en los Estados Unidos con la primera fundación (International Brain Research Organization), con la implantación del primer programa de formación curricular en el Massachussets Institute of Technology of Cambridge (Boston). La inspiración y aspiración de todos estos proyectos fue cooperar juntos desde diferentes disciplinas, como el ámbito biológico, médico, psicológico y anatómico, para explicar la complejidad del sistema nervioso. Hoy en día, la investigación neurobiológica ha demostrado que ese enfoque sistémico multidisciplinar es un planteamiento muy útil y probablemente el mejor encontrado hasta el momento.

Pero, si tenemos que hablar propiamente de unos orígenes de la neurociencia, nos remontamos a Thomas Willis cuando publicó su primer Tratado sobre la anatomía cerebral (1664), el primer gran intento de conocer a fondo el sistema nervioso y especialmente su porción encefálica. Este autor estuvo muy influenciado por los escritos del filósofo René Descartes e interesado particularmente en las implicaciones de la filosofía cartesiana para la comprensión y el tratamiento de los problemas mentales. La segunda fecha importante en la historia de la neurociencia es el día en que Phineas Gage (septiembre de 1848), que trabajaba como obrero en un proyecto de los ferrocarriles en Nueva Inglaterra padeció un accidente, una gran barra de hierro le atravesó el rostro, perdiendo parte de su cavidad craneal.

Gage no falleció. pero pese a perder una parte importante de su corteza cerebral prefrontal, sobrevivió recuperando incluso su salud física. Harlow, el doctor que llevó su caso, redactó un artículo que es parte de la historia de la neurociencia, en el que hizo unas interesantes observaciones sobre el paciente:

“Su salud física es buena y me inclino a decir que se ha recuperado. El balance o el saldo, por así decirlo, entre sus facultades intelectuales y sus predisposiciones animales, se ha destruido. Es impulsivo, irreverente, tiene escasa deferencia hacia sus compañeros, es intolerante con sus limitaciones o con los consejos que se le ofrece, cuando no coincide con lo que quiere... Se muestra caprichoso y vacilante, idea muchos planes y luego los abandona. Su mente ha cambiado tanto, que sus amigos y conocidos dicen: ‘ya no es el Gage que conocíamos’.” Otra fecha importante es la de la condecoración a Santiago Ramón y Cajal con el Nobel de Medicina en el año 1906, por su análisis detallado del sistema nervioso en el ámbito neuromorfológico. Fue esta comprensión microscópica de las estructuras nerviosas la que ofreció correlatos funcionales de inmenso valor. La mayor parte de los neurocientificos consideran a Ramón y Cajal como el iniciador de la etapa moderna de la neurociencia.

En 2002, tuvo lugar en San Francisco California, un relevante evento donde se anunció el nacimiento de una nueva disciplina, la neuroética. Esta nueva disciplina contribuyó a crear las bases de una nueva orientación que fortalece el estudio profundo de la bioética y que es fuente de interés para múltiples expertos. La neurociencia se ha convertido claramente en más que una ciencia, más bien un paradigma científico, no solo en el ámbito biomédico, sino también en la biología, psicología, educación, derecho o empresas. El reto de comprender, el funcionamiento de los organismos, no es solo materia biológica. Queremos saber que pasa en el proceso, y entendemos que la neurociencia, biología y neurofisiología serán los grandes ámbitos de investigación.

La neurociencia es el estudio biológico del cerebro desde una mirada multidisciplinar, desde lo metacognitivo a lo cognitivo, desde lo molecular a lo celular, pasando por las más pequeñas redes de neuronas a las grandes redes de percepción hasta llegar al sistema nervioso (Koncha Pinós).

VÍDEO

GRACIAS