Want to make creations as awesome as this one?

Sensopercepción v1

More creations to inspire you

Transcript

R3. Anatomía de los sistemas visual y auditivoAlejandro Padilla Sáenz23019569Sensopercepción v1Isis Lizbeth Ramos MartínezMiércoles 10 de junio de 2024

www.tupáginaweb.com

R3. Anatomía de los sistemas visual y auditivo

Sistema visual

Cejas

Las cejas son una formación arqueada de vello situada por encima del párpado. Su función principal es proteger el globo ocular tanto de la luz excesiva como del sudor.

Párpados

Los párpados son pliegues musculosos de piel situados por encima y por debajo del ojo. Su función incluye la secreción de lubricantes para el globo ocular, así como cubrir y proteger el ojo de la luz excesiva y de cuerpos extraños.

Hendidura palpebral

La hendidura palpebral es el espacio entre los párpados cuya función es exponer el globo ocular.

Exterior del ojo

Carúncula lagrimal

La carúncula lagrimal es una protuberancia de piel sin queratina que contiene glándulas sebáceas y sudoríparas. Su función principal es la lubricación del globo ocular y el lagrimeo. Puede presentar afecciones como tumores e inflamaciones.

Pestañas

Las pestañas son arcos de vello situados en la raíz o folículos por encima de los párpados, que contienen glándulas ciliares sebáceas que producen lubricantes. Su función es proteger el globo ocular de la luz directa, la sudoración y los cuerpos extraños. Una posible afección es la infección en las glándulas de los folículos, conocida como orzuelo.

Glóbulos oculares

Baviera et al. (2024) menciona lo siguiente: El globo ocular es lo que, por lo general, llamamos directamente ojo. El globo ocular es una estructura de forma más o menos esférica de 24 mm de diámetro y un peso medio de 7,5 g. que se encuentra alojada en la cavidad orbitaria. (párr. 3) Además de su forma y ubicación, el globo ocular está compuesto por varias capas y estructuras internas esenciales para la visión. Estas incluyen la córnea, que actúa como una ventana transparente en la parte frontal del ojo, y el cristalino, que enfoca la luz en la retina. La retina, a su vez, es una capa de células sensibles a la luz que convierte las imágenes en señales eléctricas enviadas al cerebro a través del nervio óptico. La combinación de estas estructuras permite que el ojo capture y procese imágenes, haciendo posible la visión.

Túnica fibrosa

La túnica fibrosa es la capa externa del ojo y carece de vasos sanguíneos. Está compuesta por dos regiones: la esclerótica, que constituye la mayor parte (5/6) y se encuentra en la parte posterior, y la córnea, que es la menor parte (1/6) y se ubica en la parte anterior. La córnea es una capa de epitelio escamoso y colágeno que cubre el ojo y es la parte transparente que protege al iris. Su función principal es enfocar la luz en la retina. Las afecciones que pueden afectarla incluyen errores de refracción, alergias, infecciones, lesiones y distrofias, que implican la pérdida de transparencia debido a la acumulación de material extraño. La esclerótica es una capa de tejido conectivo y colágeno que forma la parte blanca del ojo. Su función es cubrir el ojo, excepto en la región de la córnea, proporcionar forma y rigidez al globo ocular y proteger sus partes internas. La esclerótica puede sufrir inflamación como una posible afección.

Túnica vascular o Úvea

La túnica vascular o úvea es la capa intermedia del ojo, altamente vascularizada, y está compuesta por tres partes: la coroides, el cuerpo ciliar y el iris. El iris está formado por músculos lisos circulares y radiales y se encuentra suspendido entre la córnea y el cristalino. Es la porción que da color al ojo. Su función principal es regular la cantidad de luz que entra en el globo ocular a través de la pupila. Las posibles afecciones del iris incluyen condiciones genéticas como la aniridia, inflamaciones como la iridociclitis y tumores. La coroides es una capa de vasos sanguíneos y tejido conectivo situada entre la retina y la esclerótica. En su parte anterior, se convierte en el cuerpo ciliar, que incluye los procesos ciliares y el músculo ciliar. La coroides tiene la función de nutrir la retina, mientras que el cuerpo ciliar se encarga de secretar humor acuoso y de acomodar el cristalino para la visión cercana o distante. Una posible afección de la coroides es la coroideremia.

La túnica nerviosa o retina

La túnica nerviosa, conocida como retina, es la capa más interna del globo ocular y cubre tres cuartas partes de su superficie. Se le llama túnica nerviosa porque, además de tener vasos sanguíneos, se conecta con los nervios ópticos y es donde comienza la vía visual. La retina está formada por varias partes: el epitelio pigmentario, una capa de células que contienen melanina; la parte neural, que se conecta con la vía visual a través de capas de neuronas como los fotorreceptores, las células bipolares y ganglionares; el disco óptico, que es el punto de salida del nervio óptico; y la mácula lútea y fóvea central, una mancha amarilla con una pequeña depresión en el centro de la retina formada solo por conos. La función de la retina es absorber la luz y convertirla en impulsos nerviosos que se transmiten al cerebro a través del nervio óptico. La mácula y la fóvea son las regiones de mayor agudeza visual y se encargan de percibir pequeños detalles, como las letras. Las posibles afecciones de la retina incluyen ceguera, desprendimiento de retina, cáncer (retinoblastoma), degeneración y agujero macular.

En el interior se encuentra:

Cristalino

El cristalino es una estructura ovalada compuesta por capas de tejido conectivo, predominantemente células aplanadas y proteínas llamadas cristalinas. Se encuentra ubicado detrás de la pupila y el iris, en contacto con el músculo del cuerpo ciliar, lo que le permite acomodarse y cambiar de forma para enfocar la luz en la retina mediante la refracción, esencial para la visión cercana. Este proceso se denomina acomodación del cristalino. Las posibles afecciones del cristalino incluyen las cataratas, que causan opacidad y nublamiento del cristalino, afectando la visión. Otra afección común es la presbiopía, que implica la incapacidad de enfocar de cerca debido a cambios relacionados con la edad en la flexibilidad del cristalino.

Cavidad anterior

El espacio delante del cristalino está ocupado por un líquido llamado humor acuoso. Su función principal es nutrir al cristalino y a la córnea, proporcionándoles los nutrientes necesarios. Este líquido se filtra de los capilares sanguíneos de los procesos ciliares, que forman parte de la túnica vascular del ojo. En condiciones normales, el humor acuoso se renueva aproximadamente cada 90 minutos, asegurando un ambiente adecuado para la salud ocular.

Cámara vítrea

El espacio entre el cristalino y la retina está lleno de una sustancia gelatinosa llamada humor vítreo, que también contiene células fagocitarias especializadas en eliminar desechos. Su función principal es mantener la presión intraocular y sostener la retina en su lugar junto a la coroides.

Receptores de la retina del globo ocular

Garrity (2022), menciona lo siguiente acerca de los receptores de la retina: Hay dos tipos principales de receptores: conos y bastones. Los conos son los encargados de la agudeza visual, la visión central fina y la visión en color, y se agrupan principalmente en la mácula. Los bastones son los encargados de la visión nocturna y de la visión periférica (lateral); son más numerosos que los conos y tienen una sensibilidad a la luz mucho mayor, pero no perciben el color ni contribuyen a la visión central detallada, a diferencia de los conos. Los bastones se agrupan principalmente en las áreas periféricas de la retina. (párr. 11-13) La retina es crucial para la visión porque contiene fotorreceptores especializados llamados conos y bastones. Los conos son esenciales para la visión detallada y el color, concentrándose principalmente en la mácula. Por otro lado, los bastones son más sensibles a la luz y son responsables de la visión periférica y nocturna, agrupándose predominantemente en las áreas externas de la retina.

Bastones

Los bastones son receptores de la retina que tienen un umbral luminoso bajo, lo que significa que requieren poca cantidad de luz para activarse. La visión que captan estos receptores se denomina visión escotópica, caracterizada por la falta de color y detalles precisos.

Conos

Los conos son receptores de la retina que tienen un umbral luminoso más alto en comparación con los bastones y están especializados en la percepción de los colores. Este tipo de visión se conoce como visión fotópica.

Tipo y calidad de la visión

El tipo y la calidad de la visión también dependen de las conexiones que los conos establecen con las células bipolares y ganglionares. Estas conexiones son más diversificadas que las realizadas por los bastones, lo que contribuye a una mayor precisión y diversidad en la percepción visual.

Las células ganglionares y células bipolares

Las células ganglionares y las células bipolares son neuronas esenciales para la transmisión de la información de los estímulos visuales hacia la corteza cerebral. Estas células juegan un papel crucial en la vía visual, permitiendo que las señales captadas por los fotorreceptores se procesen y se interpreten en el cerebro.

www.tupáginaweb.com

R3. Anatomía de los sistemas visual y auditivo

Sistema auditivo

Funcionamiento

National Institute on Deafness and Other Communication Disorders (2022), menciona lo siguiente sobre el funcionamiento del sistema auditivo: “Las ondas sonoras entran al oído externo a través de un pasaje estrecho llamado “conducto auditivo” que llega hasta el tímpano.” (párr. 2) El tímpano vibra al recibir las ondas sonoras, transformándolas en vibraciones mecánicas. Estas vibraciones se transmiten a través de los huesecillos del oído medio hacia la cóclea en el oído interno. En la cóclea, las vibraciones se convierten en señales eléctricas que el nervio auditivo envía al cerebro para que se interpreten como sonidos. El sonido se mide en frecuencia (Hertz o Hz) y en intensidad (decibeles o dB). Los seres humanos percibimos con mayor claridad las frecuencias entre 500 y 5000 Hz.

Oído externo

Es la estructura externa conocida como oreja, junto con el conducto que conecta al oído medio. Actúa como receptor inicial de las ondas sonoras y las transmite al oído medio. Está compuesta por tres partes: el pabellón de la oreja, el conducto auditivo externo y la membrana del tímpano.

Funcionamiento y oído interno

Oído interno

Es la parte más compleja del sistema auditivo, ubicada dentro del hueso temporal y con una estructura de laberinto. En esta área se encuentran los receptores responsables del equilibrio y la audición. Este laberinto tiene dos capas: una externa llamada laberinto óseo y una interna llamada laberinto membranoso. Está compuesto por los conductos semicirculares, el vestíbulo y la cóclea.

Conductos semicirculares

Los conductos semicirculares son cavidades tubulares en el oído que se posicionan casi perpendiculares entre sí y se denominan conducto anterior, posterior y lateral. Estos conductos se conectan con el vestíbulo en una zona llamada ampolla. La parte ósea de los conductos contiene perilinfa, un líquido similar al cefalorraquídeo que reviste los conductos membranosos, los cuales contienen células pilosas, de sostén y endolinfa. Los conductos semicirculares funcionan para convertir las señales mecánicas del sonido en señales nerviosas y también participan en el equilibrio, detectando la aceleración y desaceleración del cuerpo. Afecciones comunes incluyen inflamación debido a infecciones virales, exceso de líquido que aumenta la presión, y episodios de vértigo, pitidos y problemas de audición.

Oído externo y equilibrio

Oído medio

Oído medio

El oído medio, que se encuentra entre la membrana del tímpano y las ventanas oval y redonda del oído interno, está compuesto por pequeños huesos llamados martillo, yunque y estribo, además de contar con una abertura conocida como la Trompa de Eustaquio.

Vestíbulo

El vestíbulo es una estructura ovalada ubicada en la parte media del laberinto del oído, compuesta por una parte ósea y otra membranosa. Está recubierto de células pilosas encargadas del equilibrio. Estas células detectan los movimientos de la cabeza y ayudan a mantener el equilibrio. Una afección común del vestíbulo es el vértigo posicional paroxístico benigno, que causa pérdida de equilibrio, vómitos y mareos.

Caracol o cóclea

La cóclea, o caracol, es una estructura crucial en el oído para convertir las señales mecánicas del sonido en impulsos eléctricos. Contiene: Rampa vestibular: un conducto tubular que se conecta con la ventana oval y transmite vibraciones hacia el centro de la cóclea. Rampa timpánica: un conducto tubular que se conecta con la ventana redonda y devuelve las señales auditivas al centro de la cóclea. Conducto coclear: ubicado entre las dos rampas, contiene las membranas de Reissner y Basilar y está lleno de endolinfa. Órgano de Corti: situado sobre la membrana basilar, contiene mecanoreceptores auditivos. Mecanoreceptores auditivos: células pilosas que convierten las señales mecánicas en impulsos eléctricos. Nervio coclear: transmite los impulsos nerviosos al cerebro. Las afecciones posibles incluyen hipoacusia neurosensorial total (sordera) o parcial, lo que resulta en una audición deficiente.

Pabellón de la oreja

El pabellón de la oreja tiene una estructura en forma de trompeta, con dos partes: el hélix en la parte superior y el lóbulo en la inferior. Está compuesto de cartílago cubierto por piel y está unido a la cabeza mediante músculos y ligamentos. Su función es captar las ondas sonoras del exterior.

Conducto auditivo externo

El conducto auditivo externo es una cavidad tubular curvada de aproximadamente 2.5 cm de longitud, que contiene glándulas sebáceas productoras de cerumen y vellosidades. Su función principal es conducir las ondas sonoras hasta la membrana del tímpano, además de proteger al oído al capturar cuerpos extraños con el cerumen y los vellos. Entre las posibles afecciones se encuentran principalmente infecciones como la otitis y dermatitis, y en menor frecuencia, tumoraciones.

Membrana del tímpano o tímpano

La membrana del tímpano, o tímpano, es una capa delgada con forma de bocina que separa el oído externo del medio. Del lado del oído externo está compuesta por tejido epitelial y piel, mientras que del lado del martillo está formada por mucosa. Su función principal es proteger el oído medio de cuerpos extraños y transmitir el sonido mediante vibraciones que activan el martillo. Entre las posibles afecciones se encuentra principalmente la ruptura debido a infecciones, sonidos intensos, cuerpos extraños y barotraumatismo, que puede causar sordera temporal.

Equilibrio

Se pueden distinguir dos tipos de equilibrio: el estático, que permite mantenerse en una posición constante como estar de pie o sentado, y el dinámico, que se activa durante movimientos repentinos como girar, subir o bajar, o detenerse en un vehículo. Las partes del oído responsables principalmente del equilibrio son el vestíbulo y sus componentes, el utrículo y el sáculo.

Utrículo

El utrículo es una estructura ósea que contiene endolinfa y cilios en su interior, y se comunica con el sáculo a través de un canal. Su función principal es detectar el movimiento de la cabeza: cuando la cabeza se mueve, los cilios del utrículo se activan, generando impulsos nerviosos que se transmiten a través del nervio vestibular. Esto proporciona información sobre la posición y el movimiento de la cabeza.

Sáculo

El sáculo es una estructura en forma de bolsa situada entre el caracol y el utrículo, lleno de endolinfa. Contiene una región gruesa llamada mácula, que incluye células pilosas y de sostén con una membrana otolítica que contiene cristales de carbonato de calcio llamados otolitos. Su función principal es detectar movimientos como correr, subir en un elevador o viajar en un vehículo en movimiento, donde los otolitos se mueven en respuesta al movimiento del cuerpo. Las afecciones posibles son similares a las del oído medio, incluyendo problemas como infecciones y trastornos que afectan el equilibrio.

Martillo

El martillo es un hueso del oído medio que tiene una estructura ósea y muscular, unida por cartílago al yunque y al estribo. La parte muscular se conecta también con el nervio maxilar inferior. Su función principal incluye limitar los movimientos del tímpano y aumentar su tensión para prevenir daños, además de transmitir amplificadamente las ondas sonoras al yunque desde el oído externo.

Yunque

El yunque es un hueso del oído medio, de estructura ósea y está unido por cartílago al martillo y al estribo. Su función principal es transmitir las ondas sonoras desde el martillo hasta el estribo, facilitando así la conducción del sonido hacia el oído interno. Una afección común del yunque es la otosclerosis, donde pierde movilidad y deja de transmitir correctamente el sonido, lo que puede resultar en pérdida auditiva debido a anomalías en la regeneración de su tejido.

Estribo

El estribo es un hueso del oído medio, con estructura ósea y muscular, unido por cartílago al yunque y a la ventana oval, y conectado al nervio facial. Su función principal es transmitir las ondas sonoras desde el yunque hasta la ventana oval, regulando así el sonido que entra por ella. Una posible afección del estribo es la hiperacusia, donde el estribo se paraliza y no puede regular adecuadamente el sonido que llega a la ventana oval. Esto resulta en una percepción excesivamente alta de los sonidos, lo que puede ser incómodo e incluso doloroso para la persona afectada.

Trompa de Eustaquio

La Trompa de Eustaquio es un canal que conecta el oído medio con la nasofaringe, siendo una estructura ósea y cartilaginosa. Su función principal es regular la presión al permitir la entrada y salida de aire durante actividades como la deglución y los bostezos. Una de las posibles afecciones asociadas es que las infecciones de la garganta pueden propagarse hacia los oídos a través de este canal, más que afectar directamente a la trompa en sí misma.