Want to make creations as awesome as this one?

Transcript

Ficha de curso:La Educación y sus transformaciones en la HistoriaProf. Carlos Francia CFE2024

SIGLOS V-XVEDUCACIÓN

EDUCACIÓN EN LA EDAD MEDIA

EDUCACIÓN EN LA EDAD MEDIA: INTRODUCCIÓN

(...) La “buena nueva” se proponía pues realizar un específico ideal pedagógico: formar al hombre nuevo y espiritual, al miembro del reino de Dios. (...) Esta acción educativa fundada directamente sobre los evangelios se dirigía sobre todo a los adultos, y la ejercían —cuando aún no se establecía una diferencia entre clero y seglares— ciertos fieles delegados para ello que se denominaban simplemente maestros (didaskaloi). La educación precedía al acto del bautismo, que era la forma de iniciación cristiana con la cual se pasaba a formar parte de la comunidad de los fieles y se ganaba la admisión a la más importante ceremonia, el ágape eucarístico."

"En el mundo helenístico-romano, donde la inquietud religiosa era cada vez más viva y general, la “buena nueva” anunciada por Jesucristo y predicada por sus discípulos incluso en Grecia y Roma se había propagado velozmente en la segunda mitad del siglo II. Otros nuevos cultos, otras religiones, otros “misterios” habían conocido una fortuna más o menos grande y duradera en aquel inmenso ámbito cultural que había sustituido a la pequeña comunidad de la polis: los hombres, carecientes de un centro firme para los valores morales, se habían quedado, por así decirlo, solos con su destino individual y se debatían en el ansia de darle un valor y un significado. Pero la fuerza particular del cristianismo consistía en que a ese anhelo respondía no invitando a participar en nuevos y arcanos ritos para ganar casi por obra de magia la supervivencia o la salvación del alma individual, sino más bien apelando a sentimientos superindividuales como la fraternidad, la caridad y el amor ilimitado por el prójimo. Sólo en la abnegación y el sacrificio de sí, en el ejemplo del Cristo crucificado, hay verdadera salvación, garantía de beatitud eterna, identificación mística con el mismo Cristo. Ahí donde otras corrientes religiosas abrazaban el individualismo helénico, el cristianismo lo superaba. El hombre, que ya no era ciudadano de una ciudad real, se convertía en ciudadano de una ciudad ideal (la “ciudad de Dios” como dirá más tarde San Agustín), por la cual actuaba, combatía y padecía como por una patria más auténtica y verdadera.

EDUCACIÓN EN LA EDAD MEDIA: ANTECEDENTES

EDUCACIÓN EN LA EDAD MEDIA: ANTECEDENTES

En estas manifestaciones educativas (...) no se modifica en modo alguno el carácter esencialmente aristocrático de la educación antigua. En estos siglos la Iglesia no desarrolla el concepto de una educación universal, y cuando sus instituciones educativas no son simples escuelas de catecúmenos están casi siempre destinadas a preparar en exclusiva a los futuros dirigentes de la Iglesia misma (es decir, los clérigos) así como también a los miembros de las clases superiores. Por esta razón, andando el tiempo, la palabra clericus asume el significado de docto y laicus (= perteneciente al pueblo) el de ignorante."

(...) Más tarde, la preparación de los candidatos al bautismo o catecúmenos se confió no ya a simples cristianos iniciados, sino a sacerdotes especialmente preparados. La instrucción duraba dos o tres años, pasaba por distintos grados y consistía esencialmente en la enseñanza de la historia sagrada del Antiguo Testamento (...), de la vida y la predicación de Cristo según los evangelios, de las oraciones y sobre todo de los preceptos morales indispensables para el espíritu cristiano; la especulación doctrinal tenía en ello poca parte. Las “escuelas de catecúmenos” de este tipo duraron varios siglos, hasta el VII, pero perdieron importancia a medida que fue disminuyendo el número de adultos o jóvenes por convertir. La educación del catecúmeno era pues estrictamente religiosa; por muchos siglos el cristianismo no se preocupó de la instrucción común y corriente, aceptando sin más la organización escolar y la enseñanza existentes, aun cuándo estaban a cargo de paganos. El cristianismo reprobaba el que los cristianos adultos fuesen aficionados a la literatura y sobre todo a la mitología pagana, pero en cambio consideraba como un inconveniente inevitable y no grave la presencia de la cultura pagana en las escuelas.

Todo el período de la patrística (...) "se puede dividir en tres partes: la primera hasta el año 200 más o menos, se dedica a la defensa del cristianismo contra sus adversarios paganos y gnósticos. La segunda, desde 200 hasta cerca de 450, se dedica a la formulación doctrinal de las creencias cristianas. La última, desde 450 hasta el final del periodo (750 aprox.) se dedica a la reelaboración de las doctrinas ya formuladas."

EDUCACIÓN EN LA EDAD MEDIA: LA PATRÍSTICA

De esa forma, el cristianismo se ve empeñado en un importante laborío filosófico de donde resultará su primera sistematización intelectual. (...) El cristianismo se propuso entonces afirmar su continuidad con la filosofía griega definiéndose como la última y más completa manifestación de ésta. Justificó esa continuidad con la unidad de la razón que Dios ha creado única en todos los hombres y todos los tiempos y a la cual, con la revelación, ha dado una base más segura. De ese modo, el cristianismo identificó sustancialmente, en un primer periodo, filosofía y religión."

"Pero el cristianismo no hubiera podido afirmarse frente a las más altas manifestaciones filosóficas de la cultura pagana si, además de la pura labor de proselitismo, no hubiese realizado también una obra de consolidación doctrinal a un elevado nivel, capaz de definir la cosmovisión cristiana y los consiguientes problemas teológicos de modo tal que emergiesen afinidades y diferencias respecto de los grandes sistemas clásicos. En un principio, esta elaboración doctrinal-filosófica se efectúa en auténticas escuelas de catequesis superior, como las que florecieron en Alejandría por obra de Clemente y, en Roma, de Hipólito. Famosas son también las fundadas por Orígenes en Cesarea y por Crisóstomo en Antioquía. No es de maravillar que esta labor se verifique sobre todo en Oriente, porque es ahí donde la tradición filosófica clásica está más viva y donde mejor sobrevive el gusto de la disputa sutil (que en un segundo tiempo hará degenerar en “bizantinismos” incluso la discusión teológica).

(...) hacia 430, Marciano Capella, en su obra Las bodas de Mercurio y la filología reducía las artes liberales a siete, eliminando la medicina y la arquitectura. La obra de Marciano Capella, que fue texto fundamental durante todo el medievo, parte del supuesto de que artes liberales son aquellas que podrían ser propias de una inteligencia pura, es decir, de un ángel o de una alma incorpórea; como una inteligencia carece de cuerpo y por consiguiente no padece enfermedad ni necesita casa, eliminó de las artes medicina y arquitectura. Esta eliminación manifiesta netamente la orientación de la cultura medieval, que quiso concentrarse en los aspectos espirituales del hombre ignorando o pasando por alto los considerados como terrenales, materiales o prácticos. Por lo tanto, así como se descuidaba la investigación científica que aparecía como dirigida hacia aquel mundo exterior al que estaba ligada la sensibilidad, o sea, la parte peor y pecaminosa del hombre, de la misma forma se descuidaba o negaba en la educación todo aquello que pudiese sustraer la atención a la meditación interior para llevarlo a considerar, a estudiar y a preocuparse por lo externo, corpóreo y mundano."

EDUCACIÓN EN LA EDAD MEDIA: LA PATRÍSTICA

"La actitud de los Padres de la Iglesia frente a la educación y al contenido dado a ésta por la cultura clásica, es coherente con las ideas que hemos expuesto hasta aquí. Los Padres orientales, que han aprovechado abundantemente la filosofía clásica para sus construcciones de filosofía cristiana, son en general favorables al mantenimiento del tipo de educación clásica integrada con la educación cristiana. Algunos Padres latinos, como por ejemplo, Tertuliano, que condenan la filosofía pagana entera, se oponen, por el contrario, a toda forma de educación fundada en las disciplinas propias de la doctrina pagana. Pero buena parte de esta aversión de los Padres latinos por las disciplinas clásicas es superada en la obra de San Agustín (...) quien por el contrario defiende las principales disciplinas tradicionales. Ya hemos visto cómo las instituciones educativas clásicas en los primeros siglos de la era cristiana siguieron una trayectoria que refleja poco o nada el influjo cristiano, no obstante lo cual en los autores paganos que se ocupan del problema se advierten mudanzas de dirección que parecen anunciar las concepciones medievales."

EDUCACIÓN EN LA EDAD MEDIA: LOS PRIMEROS SIGLOS

"En los siglos VI y VII se produce una grave discontinuación en la actividad cultural de Occidente. Las condiciones de la vida en la Europa bárbara son a tal punto difíciles que la cultura queda reducida casi a cero y todo lo que se puede hacer es salvar del naufragio algunos elementos que más adelante alimentarán su resurgimiento. Este renacer se delinea ya en la época carolingia (fines del siglo VIII y principios del IX). Es de advertir que ni siquiera en el más oscuro de los periodos precedentes dejó de haber centros de cultura, sobre todo en las regiones periféricas de Europa (...). La existencia de escuelas, sobre todo de gramática, retórica, leyes y medicina en algunas de las principales ciudades italianas, a partir del siglo VIII, está fuera de toda duda. En el resto de Europa la cultura empezó a reflorecer sólo bajo la influencia de Carlomagno, cuyo móvil principal era procurarse un número de funcionarios laicos y eclesiásticos suficiente para administrar el imperio. Su primera preocupación fue restablecer un cierto nivel cultural entre los clérigos (no todos los cuales sabían leer y escribir), de forma que a su vez pudieran fundar escuelas y difundir la cultura. El mayor monumento de este interés de Carlomagno por la cultura fue la creación, en su corte, de la Schola palatina o Academia Palatina (...781). La Academia Palatina se convirtió en el centro de la reconstrucción intelectual de Europa (...) Mientras tanto, en Alemania, Rabano Mauro, antiguo discípulo de Alcuino (776-856), trabajaba fructuosamente en pro de la difusión del estudio, al punto de ser llamado “el preceptor de Alemania”. En Inglaterra, en la segunda mitad del siglo IX, el rey Alfredo el Grande realizaba una obra similar (...) mediante la fundación de escuelas en los Monasterios y catedrales. Por último, es de recordar que uno de los más grandes centros de la cultura medieval fue la corte del rey Federico II de Sicilia, en la que se encontraron las corrientes de la filosofía árabe y la filosofía cristiana y floreció la primera escuela italiana de poesía."

EDUCACIÓN EN LA EDAD MEDIA: LOS PRIMEROS SIGLOS

"(...) Los siglos VI y VII poco o nada habían dejado subsistir de las instituciones escolásticas laicas de origen pagano, excepto quizá, como se ha dicho, en algunas ciudades italianas donde lo nuevo se injertó sin dificultades en lo antiguo. De ese modo se constituyeron escuelas en las instituciones religiosas, es decir, al amparo de los monasterios, las parroquias y las catedrales (o sea, se formaron escuelas monásticas, parroquiales y catedralicias u obispales). Las parroquias de las ciudades importantes daban la instrucción elemental. Los monasterios y las catedrales daban también instrucción media y superior. No se debe entender que toda parroquia o monasterio tuviese su escuela ni que donde había escuela se diesen cursos completos de instrucción. El gran número de decretos, órdenes y mandatos que se conocen, relacionados todos ellos con la institución de escuelas en estos siglos, demuestra que las órdenes se obedecían sólo en parte mínima, lo que explica la necesidad de reiterarlas. Por otra parte, la escasez de maestros y lo difícil que era recibir una preparación adecuada, hacían que a menudo en esas escuelas el profesor supiera muy poco más que sus alumnos. Como se ha dicho, la instrucción superior se ofrecía en las escuelas de los monasterios y las catedrales. Las escuelas monásticas predominaron hasta el siglo XI; sucesivamente fueron superadas en importancia por las escuelas catedralicias. Por lo común, éstas dependían directamente del obispo, quien nombraba al “canciller” de la escuela. Las escuelas catedralicias más importantes empezaron a extender diplomas de estudios que se denominaban licentia docendi que facultaban para enseñar en el área de la diócesis. Posteriormente el Papa concedió a las más importantes escuelas catedralicias el derecho de conceder una licentia docendi ubique que habilitaba para enseñar dondequiera. Algunas de esas escuelas se llamaron Studium generale porque atraían estudiantes de un área mucho más extensa que la diócesis y concedían diplomas válidos fuera de la circunscripción de la diócesis misma. Hacia el año 1100 las más famosas de tales escuelas eran la de Chartres para la gramática y la literatura, la de París para la lógica y la teología, la de Bolonia para el derecho y la de Salerno para la medicina."

EDUCACIÓN EN LA EDAD MEDIA: FEUDALISMO Y EDUCACIÓN CABALLERESCA

"Sólo una minoría de clérigos frecuentaba las escuelas medievales, pero no por eso puede decirse que el resto de la población quedase sin educar, si bien es verdad que era casi analfabeta. Cada sociedad desarrolla las formas educativas que necesita: la sociedad medieval, de economía pobre, basada en gran parte en el trueque y de estructura política feudal, si por una parte mantenía sencillas formas de aprendizaje para los trabajadores manuales y artesanos, por la otra, en lo tocante a la sociedad de los señores y caballeros, desarrolló formas de tirocinio para la profesión de las armas y reglas de vida “cortés” que se organizaron para constituir la típica educación “caballeresca”. La sociedad feudal, cuyos orígenes deben buscarse simultáneamente en el bajo Imperio Romano y en costumbres germánicas, se funda en las relaciones personales de fidelidad entre señor y vasallo, vasallo y valvasor, valvasor y valvasino. La base de la pirámide nobiliaria es el pueblo, reducido en gran parte a la condición de “siervo de la gleba”, es decir, de cultivadores afectos a la heredad en que han nacido y de la cual extraen productos de los que sólo pueden disponer en parte mínima, porque la propiedad de todo lo que brota de la tierra pertenece a los señores investidos de ella, es decir, que la han recibido en “beneficio” del rey u otros señores más potentes. (...) en un periodo en que el dinero es extremadamente raro y prácticamente no existe una organización estatal, los soberanos que no pueden reclutar en forma directa ejércitos ni pagar funcionarios capacitados, deben recompensar por fuerza los servicios que reciben de los guerreros más valientes asignándoles tierras en “beneficio”; a su vez, los guerreros deben hacer lo mismo con los caballeros de su séquito, y así sucesivamente. Los feudatarios representan la fuerza militar de la sociedad y muy pronto constituyen sin más la única forma de organización política. El feudatario ejerce también la justicia y en general no tolera autoridades extrañas sobre sus tierras (es decir, obtiene “inmunidades” crecientes). El sistema llega a su culminación en el periodo que va de la decadencia carolingia al renacimiento de la vida urbana en las nuevas formas “comunales”".

EDUCACIÓN EN LA EDAD MEDIA: FEUDALISMO Y EDUCACIÓN CABALLERESCA

"Al principio, el mundo feudal no conoce otros derechos que los de la fuerza y la estirpe, corroborado este último por la tendencia a trasmitir los feudos de padre a hijo. Pero, como en general los segundones no pueden aspirar a la sucesión, aprender el oficio de las armas es para ellos todavía más importante que para los primogénitos, pues sólo entrando al servicio de algún poderoso pueden esperar a su vez el galardón de una investidura. Nace de ese modo la caballería (...representada) por una ética del honor, fundada sobre la fidelidad al señor a quien se ofrecen los propios servicios. Por otra parte, la Iglesia interviene y se esfuerza por transformar a la caballería en una institución dedicada a la protección de los inermes, las mujeres, los viejos y los niños, contra la arbitrariedad de los violentos. De esta forma se acaba por establecer una especie de iniciación preliminar para todos aquellos que desean ser armados caballeros. Naturalmente, además de ser de sangre noble, tienen que haber pasado por un largo tirocinio al flanco de un señor o caballero, primero en calidad de paje y después de escudero. De ese modo, habrá aprendido no sólo el uso de las armas, sino también las formas “corteses” (es decir, practicadas en las “cortes” de los señores), organizadas en una especie de “código caballeresco” aún no escrito, habrá aprendido a estimar el arte de los cantores y juglares que empiezan a alegrar la vida de los castillos, conocerá el mundo de la tradición épica medieval (ciclo carolingio, bretón, etc.), sabrá tomar de ahí temas apropiados de conversación, y en una palabra, a semejanza del héroe homérico, habrá aprendido al mismo tiempo el arte del hacer y el decir. La educación caballeresca no requiere conocimientos literarios, ni siquiera el aprendizaje del alfabeto (...), no obstante lo cual es una formación completa y compleja que con frecuencia supone (sobre todo en las “órdenes caballerescas”) una severa disciplina moral, gentileza de modales y sentimientos refinados capaces de apreciar los valores religiosos al par de los terrenos, por ejemplo, la belleza femenina transfigurada en las formas inmortalizadas por la poesía trovadoresca."

LA EDUCACIÓNEN LA EDAD MEDIA: UNIVERSIDADES Y ESCUELAS COMUNALES

"Las escuelas catedralicias dieron origen a la más importante institución cultural de la Edad Media, la Universidad. (...). A partir del siglo XII, como consecuencia del incremento en el número de profesores y estudiantes, se formaron comunidades de profesores con vistas a defender sus intereses y la disciplina de los estudios. Dichas comunidades o universidades tenían por objeto proteger a los profesores contra el canciller, el obispo, el rey o quienquiera que intentase ejercer sobre ellos un excesivo dominio. De modo análogo, los estudiantes se reunieron a menudo en corporaciones o ligas para protegerse contra los profesores, las autoridades municipales, etcétera. Así fue como gradualmente el término de Universidad se empezó a aplicar por antonomasia a las universidades de profesores y estudiantes, con lo que se pasa de la escuela catedralicia a la Universidad como institución autónoma. Claro está que el proceso de transformación fue gradual y se cumplió para cada Universidad en una época diversa. Es de anotar asimismo que no todas las universidades tuvieron todas las facultades, que en aquel entonces correspondían a las artes liberales, o sea, derecho, medicina y teología. Ni todas las universidades fueron igualmente famosas por todas sus facultades(...). Poco a poco se le reconoció a la Universidad el derecho de resistir a las autoridades de la ciudad y de tener un tribunal especial para sus miembros. En 1212 Inocencio reconoció la asociación de los profesores y ordenó al canciller que atendiera a sus recomendaciones para la selección del nuevo personal docente. Por otra parte, las luchas entre las autoridades políticas y religiosas, en las que la Universidad buscó alternativamente el apoyo del rey y del papa, contribuyeron a consolidar la autonomía y el prestigio de la institución."

LA EDUCACIÓNEN LA EDAD MEDIA: UNIVERSIDADES Y ESCUELAS COMUNALES

"Por muchos siglos fueron el solo crisol tanto de la actividad científica como de la actividad intelectual en general, que sólo en época muy reciente, y por efecto de la revolución industrial, ha empezado a desenvolverse fuera de la vida universitaria. Los privilegios, las exenciones y las inmunidades cuya conquista fuera la razón de vivir de las universidades, porque sin ellos no hubieran podido ejercer su independencia de crítica e investigación, contribuyeron a consolidar el prestigio que esas instituciones han gozado en la vida social y que a menudo se ha reflejado y se refleja en sus miembros. La historia y la tradición de la Universidad, el hecho mismo de su nacimiento como organización para defender los intereses de la libertad de pensamiento hacen que incluso en nuestros días esta institución, tan típicamente medieval, sea la mejor fortaleza de la investigación científica. El mismo espíritu asociativo o corporativo que caracteriza el surgimiento de las universidades anima también, como se ha indicado, el desarrollo de las comunes, sobre todo cuando éstas empiezan a admitir a los representantes de los gremios artesanos o se forman en torno a éstas. No es de maravillar que la nueva burguesía comercial o artesana —que no encontraba en las escuelas del clero o la Universidad la posibilidad de formar a sus hijos para capacitarlos en las tareas que les eran propia, promoviesen en muchos casos las escuelas comunales, que se distinguían por no estar vinculadas al dominio eclesiástico y en las cuales, además de los rudimentos de la lectura y escritura, se enseñaba cálculo, contabilidad y otras materias de utilidad práctica."

LA EDUCACIÓNEN LA EDAD MEDIA: LA ALTA ESCOLÁSTICA

"En los frecuentes decretos con que las autoridades medievales prescribían o autorizaban la apertura de una escuela se dice con frecuencia que tales escuelas debían servir principalmente para el mejor entendimiento de la fe cristiana. Ahora bien, ésta era precisamente la finalidad de la filosofía que en esas escuelas se profesaba y que por eso se denomina escolástica. La palabra escolástica designa la filosofía cristiana de la Edad Media. En los primeros siglos medievales el nombre de scholasticus indicaba al que enseñaba las artes liberales o sea las ciencias que formaban el trivio (gramática, lógica o dialéctica y retórica) y el cuadrivio (geometría, aritmética, astronomía y música). Posteriormente se denominó scholasticus también al profesor de filosofía o teología, cuyo título oficial era magister y quien dictaba sus lecciones primero en la escuela del claustro o la catedral y en la Universidad (studium generale). Por su carácter y método la escolástica está estrechamente ligada a la actividad didáctica de los maestros medievales. Esta actividad se desenvolvía de dos maneras: la lectio que consistía en el comentario de un texto, y la disputatio que consistía en el examen de un problema mediante el debate de todos los argumentos que se pudieran aducir en pro o en contra. De modo análogo, la actividad literaria de los escolásticos asumió la forma de comentarios (a la Biblia, a Boecio, a las obras lógicas de Aristóteles y, posteriormente, a las Sentencias de Pedro Lombardo y las otras obras de Aristóteles) o de repertorios de cuestiones (..., es decir, a propósito de un argumento cualquiera, quolibet). El problema fundamental de la escolástica es llevar al hombre a la inteligencia de las verdades reveladas. La verdad revelada contenida en los libros sacros y las definiciones dogmáticas de la Iglesia es la norma de la investigación escolástica, cuyo fin exclusivo es hacerla inteligible al hombre. Pero en ese intento el hombre no puede quedar librado a sus propias fuerzas, antes bien debe recurrir al auxilio de aquellos a quienes la Iglesia reconoce como particularmente inspirados por la gracia divina.".

LA EDUCACIÓNEN LA EDAD MEDIA: LA ALTA ESCOLÁSTICA

La filosofía en cuanto tal no es para la escolástica más que un medio: ancilla theologiae. (...) Carece totalmente del sentido de la historicidad: se apropia de doctrinas y conceptos pertenecientes a sistemas muy heterogéneos y pone en un mismo plano, como si fueran contemporáneos, los filósofos más distantes, sirviéndose de sus doctrinas más características con arreglo a las propias exigencias. (...) Dado que el problema de la escolástica es el de poner al hombre en condiciones de entender la verdad revelada, es decir, de conciliar fe y razón, se pueden distinguir varios periodos de acuerdo con la solución dada al problema. Por tanto, después de un periodo pre-escolástico (siglo IX) en que la filosofía presenta caracteres similares a los de los siglos VI-VIII, se distinguen en la escolástica tres periodos: 1) La alta escolástica (... mediados del siglo IX hasta fines del siglo XII): "fe y razón se consideran en perfecta armonía." 2) El florecimiento de la escolástica, o sea, la época de los grandes sistemas escolásticos, (...principios del siglo XIII hasta los primeros años del siglo XIV): "...el acuerdo entre fe y razón se considera parcial; se admite la posibilidad de que la razón llegue a resultados independientes aunque opuestos a las enseñanzas de la fe."3) La disolución de la escolástica, (...primeros decenios del siglo XIV hasta el Renacimiento). Se caracteriza por el hecho de admitir que existe contraste entre fe y razón, con lo cual el problema escolástico mismo acabó por vaciarse de su significado.".

"De ahí el uso constante de las auctoritates en la filosofía escolástica. Auctoritas es la decisión de un concilio, un dicho bíblico, la opinión de un Padre de la Iglesia, y vale como principio de investigación o como punto de referencia en la solución de un problema. La escolástica no se propone pues formular ex novo doctrinas y conceptos. No se trata de encontrar la verdad, dada ya en la revelación, sino sólo de entenderla. Para entenderla echa mano de los instrumentos y materiales de la tradición filosófica y vive sustancialmente a expensas de la filosofía griega.

Ecosistema Digital Educactivo de Andalucia, Banco de Recursos, https://edea.juntadeandalucia.es/bancorecursos/

//youtu.be/DjdFLJT5lhY

Video

Re: La Edad Media en 10 minutos, https:

Imagen de línea de tiempo

Abbagnano, Nicola, Visalberghi, A., Historia de la Pedagogía, Fondo de Cultura Económica, 1964, novena reimpresión 1992.

Diapositivas 3 a 15, texto tomado de:

bibliografía