LA RECONQUISTA

LA RECONQUISTA

LA RECONQUISTA

La Reconquista fue un proceso histórico de varios siglos en la Península Ibérica, durante el cual los reinos cristianos del norte de España buscaron recuperar los territorios que habían sido invadidos y ocupados por los musulmanes durante el período conocido como la conquista islámica de la península. Este proceso comenzó con la llegada de las fuerzas musulmanas en el año 711, cuando derrotaron al rey visigodo Rodrigo en la batalla de Guadalete. Los musulmanes avanzaron rápidamente por la península, estableciendo un dominio que se conoció como Al-Ándalus. Durante siglos, los reinos cristianos del norte, como Asturias, León, Navarra, Aragón, Castilla y Portugal, lucharon contra los musulmanes para recuperar el control de sus tierras.

EL AVANCE DE LOS REINOS CRISTIANOS

El avance de la Reconquista fue gradual y marcado por numerosas batallas y conflictos a lo largo de los siglos. Uno de los hitos más importantes fue la Batalla de Covadonga en el año 722, donde el rey Pelayo de Asturias lideró a las fuerzas cristianas en una victoria sobre los musulmanes, estableciendo así el Reino de Asturias como el primer reino cristiano en la península. A lo largo de los siglos siguientes, los reinos cristianos continuaron avanzando hacia el sur, conquistando lentamente territorios y estableciendo nuevos reinos y condados. Durante este tiempo, hubo momentos de cooperación y conflicto entre los diferentes reinos cristianos, así como períodos de tolerancia y convivencia con la población musulmana y judía.

UNO DE LOS PUNTOS MAS SIGNIFICATIVOS EN LA RECONQUISTA

Uno de los puntos de inflexión más significativos en la Reconquista fue la Batalla de Las Navas de Tolosa en 1212, donde una coalición de reinos cristianos derrotó al poderoso ejército almohade, lo que debilitó significativamente el dominio musulmán en la península.

EL FINAL DE LA RECONQUISTA

El proceso de Reconquista culminó en 1492 con la rendición del último reino musulmán de Granada ante los Reyes Católicos, Isabel I de Castilla y Fernando II de Aragón. Con la toma de Granada, se completó la expulsión de los musulmanes de la península y se estableció la unidad política bajo la Corona de Castilla y Aragón. La Reconquista tuvo profundas implicaciones para la historia y la cultura de España y Portugal. Contribuyó a definir la identidad nacional y religiosa de estos países y dejó una huella duradera en su arquitectura, literatura y tradiciones.

LA REORGANIZACIÓN DE ESPAÑA Y PORTUGAL

En 1248 se produjo la conquista de Sevilla y en 1492 la conquista del Reino de Granada, el último que permaneció bajo dominio árabe. En el mismo año, entre otras cosas, España aumentará notablemente su prestigio a nivel europeo gracias al descubrimiento de América de Cristóbal Colón. Gracias a la unificación de los feudos menores, ahora todos formados por íberos, surgieron Portugal y España, cuyas fronteras geográficas son casi las mismas que en la actualidad.

LA REORGANIZACIÓN DE ESPAÑA Y PORTUGAL

En 1137 se produjo la unión de Cataluña con Aragón; en 1230 Castilla se fusionó con León y finalmente, en 1469, gracias al matrimonio entre los soberanos Fernando e Isabel, Aragón y Castilla se unieron. El único reino que no participó en la unión de todos los demás feudos fue el de Navarra, demasiado influenciado por los franceses para llegar a un acuerdo con los españoles. En cualquier caso, la unión entre reinos no siempre trajo beneficios. Por ejemplo, Aragón era un territorio muy atrasado y se basaba esencialmente en la agricultura; por el contrario, Castilla ya había evolucionado desde hacía algún tiempo y había desarrollado una red comercial y cultural autónoma bastante floreciente.