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Mujeres Matemáticas
Ignacio Delgado Montes
Created on April 4, 2024
Breve repaso a la biografía de varias mujeres matemáticas que nos admiran por su trabajo y por sus logros
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Transcript
Mujeres Matematicas EN la historia
Digital
Presentación
Presentación sobre Mujeres Matemáticas © 2024 by Ignacio Delgado Montes is licensed under CC BY-NC-SA 4.0
HIPATIA
Hipatia de Alejandría es la primera mujer matemática de la que se tiene conocimiento razonablemente seguro y detallado. Escribió sobre Geometría, Álgebra y Astronomía. Mejoró y construyó instrumentos astronómicos como el astrolabio o el planisferio.
HIPATIA
Maestra carismática. Dejó profunda huella en sus discípulos, algunos de ellos también importantes científicos de la época. Nacimiento 350-370 dc; muerte 415 dC. Hija de Teón Filósofa, astrónoma y matemática neoplatónica helenística, vivió en Alejandría
HIPATIA
OBRAS
- Comentario sobre Arithmetica de Diofanto.
- Comentario sobre el tratado de Apolonio de Pérgamo sobre Secciones Cónicas.
- Edición del texto del Almagesto de Ptolomeo.
Sophie Germain
Matemática autodidacta. Desde muy pequeña, consideró la Ciencia y especialmente las Matemáticas, como el estímulo intelectual que daba sentido y tranquilidad a su existencia. No pudo lograr su pleno desarrollo científico pues en su formación no pudo acceder a una educación matemática formal, y en su madurez tuvo que trabajar en solitario porque una jerarquía científica, totalmente masculina, la excluía. Nació el día 1 de abril de 1776, en Paris. Murió el 27 de junio de 1831 a consecuencia de un cáncer de pecho a los 55 años, también en Paris. A los 13 años, en plena Revolución, se refugió en la lectura, comenzando con las obras de la biblioteca de su padre. Se interesó por las matemáticas tras leer la Historia de las Matemáticas de Jean-Baptiste Montucla. Le impresionó la leyenda de la muerte de Arquímedes, por los soldados romanos, mientras estaba absorto en un problema de geometría. Superó los obstáculos que sus padres habían ideado para frenar su pasión hacia las matemáticas. De noche se envolvía en mantas y estudiaba a la luz de una vela. Su tenacidad venció la resistencia de sus padres . Estudió el Tratado de Aritmética de Étienne Bezout y el Tratado de Cálculo Diferencial de A.J. Cousin. Después de aprender latín sin ninguna ayuda, leyó las obras de Isaac Newton y Leonhard Euler.
Sophie Germain
Con 18 años no fue admitida en la Escuela Politécnica de París, consiguió hacerse con apuntes de algunos de los cursos, entre ellos, el de Análisis de Joseph Louis Lagrange. Al final del período lectivo los estudiantes podían presentar sus investigaciones a los profesores, Sophie presentó un trabajo firmándolo como Antoine-Auguste Le Blanc, un antiguo alumno de la escuela. El trabajo impresionó a Joseph Louis Lagrange (1736-1813) por su originalidad y quiso conocer a su autor. Al saber su verdadera identidad, la felicitó personalmente y le predijo éxito como analista, animándola de esta forma a seguir estudiando. Se dedicó al estudio de la teoría de números tras estudiar los libros de Adrien-Marie Legendre (1752-1833), Essai sur la théorie des nombres, y de Karl Friedrich Gauss (1777-1855) Disquisitiones Arithmeticae. Escribió cartas firmadas con el seudónimo Le Blanc a Gauss. Con motivo de la Campaña de Jena (1806) de Napoleón, temió por la vida de Gauss y se puso en contacto con un militar amigo de su familia para pedirle que velara por su seguridad. El militar le comunicó que había contactado con Gauss y que éste agradecía su mediación, pero que afirmaba no conocer a Sophie Germain. En la siguiente carta que le escribió tuvo que revelarle la verdad: ella era M. Le Blanc. Gauss sorprendido al conocer su identidad, elogia su talento y su genio.
Sophie Germain
Obra
- El teorema que lleva su nombre fue el resultado más importante, desde 1753 hasta 1840, para demostrar el Último Teorema de Fermat, además permitió demostrar la conjetura para n igual a 5.
- Posteriormente sus investigaciones se orientaron a la teoría de la elasticidad y, en 1816, consiguió el Premio Extraordinario de las Ciencias Matemáticas que la Academia de Ciencias de París otorgaba al mejor estudio que explicara mediante una teoría matemática el comportamiento de las superficies elásticas.
- Tuvo que presentar tres memorias sucesivas en 1811, 1813 y 1815 hasta conseguir, el 8 de enero de 1816 dicho Premio Extraordinario de la Academia de Ciencias.
- A partir de entonces consiguió el respeto y el reconocimiento por parte de la comunidad científica, debido a su amistad con Jean-Baptiste Joseph Fourier (1768-1830) que, después de ser elegido Secretario Permanente de la Academia de Ciencias, le permitió asistir a las sesiones, siendo la primera mujer, no esposa de académico, que lo hizo.
- Continuó sus investigaciones con Legendre sobre Teoría de Números con el que trabajaba en un plano de igualdad, y reanudó la correspondencia con Gauss sobre este tema.
Sophie Germain
A pesar de su extensa correspondencia, Gauss y Sophie nunca se conocieron personalmente. Gauss intentó que la Universidad de Gotinga le otorgara el título de doctor honoris causa; pero a pesar de su gran influencia en esta universidad, su propuesta no tuvo éxito. Siempre evocaremos a Sophie Germain por su obra, que perdurará para siempre, por su talento, que fue excepcional, por su valor para afrontar las circunstancias que le tocó vivir, y por su dedicación a la ciencia.
Sonia Kovalévskaya
Matemática rusa del siglo XIX. Nació en Moscú el 15 de enero de 1850, murió en Estocolmo el 10 de febrero de 1891. Para poder estudiar en la universidad tuvo que salir fuera de Rusia, pedir permisos especiales para asistir a clase y solicitar clases particulares a ilustres matemáticos. Tras obtener el doctorado en matemáticas, a pesar de que ninguna universidad en Europa admitía a una mujer como profesora, consiguió serlo en la entonces recién creada Universidad de Estocolmo. Sus investigaciones se centran en el análisis matemático,
- Teorema de Cauchy-Kovaleskaya.
- Teoría de Funciones Abelianas.
- Trabajo sobre los anillos de Saturno.
- Investigación sobre la rotación de un sólido alrededor de un punto fijo .
- Trabajo póstumo, una simplificación de un teorema de Bruns.
Sonia Kovalévskaya
Su genio matemático, su espíritu libre y su especial personalidad para superar las barreras que se interponían a sus aspiraciones, le permitieron alcanzar las más altas cotas del pensamiento científico. Su talento literario, plasmado en su obra autobiográfica. Llegó a ser amiga y colega de los más grandes matemáticos de la época como Weierstrass, Poincaré, Chevichev, Hermite, Picard, Mittag-Leffler, etc., y de científicos y literatos como Darwin, Eliot, Ibsen, Mendeleyev, Dostoyevski, etc. Todo esto podía ser suficiente para interesarnos por su vida, pero, ante todo fue una gran matemática, creativa, original e innovadora. Su pasión por las matemáticas surgió de niña con los relatos de su tío Piotr Vassilievitch que, sin ser matemático, le transmitió un profundo interés por esta ciencia, con temas como la cuadratura del círculo, la noción de asíntota y otras consideraciones sobre el infinito. Su padre frenó los estudios de su hija. Ella consiguió hacerse con el libro Eléments d’Algèbre de Bourdon leyendola cuando toda la casa dormía. Un vecino profesor de física, N. N. Tyrtov, le dejó una copia de su libro. Ella lo estudió. Cuando Tyrtov escuchó sus explicaciones se asombró y recomendó a su padre que facilitara a su hija el estudio de las matemáticas
Sonia Kovalévskaya
En San Petersburgo estudió Geometría Analítica y Cálculo Infinitesimal con A. N. Strannoliubski. Éste quedó asombrado por la rapidez con la que comprendía complejos conceptos matemáticos como asíntota o límite pues «parecía que los hubiera sabido de antemano». Ella recordó que cuando fueron a vivir al campo no había suficiente papel pintado para todas las habitaciones y el cuarto de los niños fue empapelado con un libro litografiado de Ostrogradski sobre Cálculo diferencial e Integral. Así se familiarizó con muchas fórmulas matemáticas, y a pesar de que para ella, en aquella época, carecían de sentido, cuando comenzó a estudiar esos conceptos tuvo la sensación de que ya los conocía. En Rusia, entre la juventud, un movimiento denominado nihilismo preconizaba la liberación de los esclavos, la emancipación de la mujer, y la importancia de la educación y de la ciencia. Proponía la las mujeres para salir de Rusia y poder estudias convencer a un joven, que compartiera estas mismas ideas, y contraer un matrimonio de conveniencia. Así, a pesar de las objeciones de su padre contrajo matrimonio con Vladimir Kovalevski. Se estableció en Heidelberg. Logró un permiso para que la admitieran como oyente en la Universidad. Estudió con los profesores P. du Bois-Raymond y L. Koenigsberger. Después fue a Berlín para estudiar con Karl Weierstrass, «el padre del análisis matemático». Se dirigió directamente a él para pedirle clases particulares.
Sonia Kovalévskaya
Weierstrass, impresionado por su talento matemático se convirtió en su amigo más fiel, siempre la apoyó y animó en su trabajo. Durante cuatro años la admitió como alumna particular dándole clases gratuitas. Weierstrass consideró que sus trabajos eran suficientes para obtener un doctorado. Habló con un antiguo alumno suyo, Lazarus Fuchs de la Universidad de Gotinga, para que se le concediera el doctorado sin examen oral, sólo con los trabajos entregados. Presentó tres trabajos de investigación, el primero Sobre la teoría de ecuaciones en derivadas parciales, el segundo Suplementos y observaciones a las investigaciones de Laplace sobre la forma de los anillos de Saturno y el tercero Sobre la reducción de una determinada clase de integrales abelianas de tercer orden a integrales elípticas. Su primer trabajo fue aceptado como tesis doctoral y se le concedió el grado de doctora «cum laude». Siendo doctora, no encontraba trabajo en ninguna universidad de Europa. Volvió a Rusia con su marido donde solicitó un permiso para presentarse a una prueba que le permitiera enseñar en una universidad rusa, pero el Ministro de Educación se lo denegó.
Sonia Kovalévskaya
En enero de 1880 fue invitada por Chevichev a dar una conferencia para el Sexto Congreso de Ciencias Naturales. Eligió una disertación sobre integrales abelianas. Entusiasmó al público, entre el que estaba Gösta Mittag-Leffler, alumno de Weierstrass. En Berlín, Weierstrass le aconsejó que trabajara sobre la propagación de la luz en un medio cristalino En París conoció a Hermite, Poincaré y Picard, y fue elegida miembro de la Sociedad Matemática. El 11 de noviembre de 1883, a propuesta de Mittag-Leffler, fue aceptada como profesora en la Universidad de Estocolmo. El puesto docente que se le ofrecía durante ese primer año, en el que se pretendía probar su competencia, no era oficialmente remunerado, la pagaban sus alumnos y a través de una suscripción popular. En Estocolmo colaboró en la redacción del Acta Mathematica, una revista internacional fundada por Mittag-Leffler en 1882.
Emmy Noether
Es una de las grandes mentes matemáticas del siglo XX. Considerada la madre del Álgebra Abstracta. Sus trabajos abrieron caminos nuevos que marcaron la trayectoria seguida por las matemáticas contemporáneas, y su análisis de los grupos de simetrías que aparecen en las Teorías Especial y General de la Relatividad permitió entender y resolver el problema de la conservación de la energía en la Teoría General de la Relatividad de Einstein. Se le negó durante toda su vida un puesto de trabajo digno en la universidad por la única razón, abiertamente reconocida, de ser mujer.
- En Alemania, donde creció, se formó y comenzó su labor profesional, no pasó de ser Privatdozent, tutor privado de aquellos alumnos a los que los profesores no querían dar clase.
- En los Estados Unidos, donde emigró tras la llegada de Hitler al poder, dirigía seminarios e investigaba en el Instituto Princeton, pero debía dar sus clases en el College para señoritas Bryn Mawr.
Emmy Noether
En 1919, David Hilbert y Felix Klein intentaron, infructuosamente, conseguir un puesto de Privatdozent para Emmy Noether. La objeción formal que se dio fue el sexo de la candidata. «¿Cómo podemos permitir que una mujer sea Privatdozent?». Podría llegar a ser profesora y miembro del Consejo de la Universidad; «¿es lícito que una mujer sea miembro del Consejo?». Esta objeción motivó la famosa respuesta de Hilbert: «Caballeros, el Consejo no es una casa de baños, así es que no veo por qué una mujer no puede formar parte de él». Mucha imaginación, muchas horas solitarias estudiando matemáticas, y pocas ocasiones para los encuentros privados con el otro sexo entre los veinte y los cuarenta años… ¿No es cómo para que las mujeres les pongan un poco nerviosos? La talla matemática de Emmy Noether está muy por encima de la media que encontramos en los profesionales de la matemática de cualquier época. No sólo fundó escuela, sino que hizo cambiar el foco y la estrategia de toda una disciplina.
Emmy Noether
Nació en 1882 en la ciudad alemana de Erlangen. Fue alumna de Paul Gordan (1837-1912), bajo cuya dirección escribió una tesis sobre la teoría formal de los invariantes computacionales de Gordan, que defendió en 1907. Invitada por Hilbert, en 1916 Noether se trasladó a Göttingen, donde vivió hasta 1933, año en que, forzada a abandonar Alemania, pues era judía, aceptó un puesto de docente en la universidad para mujeres Bryn Mawr. Allí vivió el último año y medio de su vida, desplazándose constantemente al Instituto de Altos Estudios de Princeton para impartir seminarios y llevar a cabo su labor de investigación. Murió en 1935. Era hija del matemático de renombre Max Noether, amigo de Gordan, y las conversaciones sobre matemáticas entre los dos amigos eran un ingrediente fundamental de la atmósfera de la casa en la que creció, donde estudiar matemáticas no era una obligación, sino una actividad libre y considerada como un placer. Cuando se matriculó en la Universidad de Erlangen (una de las dos mujeres entre los mil estudiantes) eligió cursos de historia y lenguas modernas. En 1904, se cambió a matemáticas, su decisión fue libre, de adulta, sabiendo lo que hacía. La convivencia con su padre le habían dado información sobre lo difíciles que son las matemáticas, el placer que proporcionan, y las muchas horas que requiere el llegar a esos momentos de placer
Emmy Noether
Obra En Álgebra y Topología, trasladó las estructuras de estudio de la factorización de números enteros, a otros objetos matemáticos, conectados con el estudio de curvas, superficies y variedades en general, posibilitando con ello a la aritmetización de la Geometría y la Topología. Albert Einstein (1879-1955) dio en la Universidad de Göttingen seis conferencias sobre la Teoría General de la Relatividad, aún sin terminar. En las Teorías Clásicas de Campo, gravedad newtoniana, electromagnetismo, fluidos, ..., la energía se conserva localmente, así como en la Teoría Especial de la Relatividad. El principio de la conservación local de la energía solo parecía fallar en la Teoría General de la Relatividad, y entender el porqué de este problema, al que Hilbert describió como el fallo del Teorema de la Energía, tenía en jaque a muchos de los más reputados matemáticos de la época. Emmy Noether demostró que el llamado fallo no es un fallo, sino que, de hecho, se trata de un rasgo característico de la Teoría General, lo cuantificó y explicó porque ocurría: se debía a la naturaleza del grupo de simetrías involucrado.