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TIMELINE Guerras Médicas
mujerdepericles
Created on December 25, 2023
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Transcript
LAS GUERRAS MÉDICAS
492 a. C.- 449 a. C.
480 a. C.
479 a. C.
480 a. C.
490 a. C.
BATALLA DE MARATÓN
BATALLA DE LAS TERMÓPILAS
BATALLA DE SALAMINA
BATALLA DE PLATEA
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Fueron una serie de conflictos entre el imperio aqueménida de Persia y las ciudades-estado del mundo helénico.
La batalla de Maratón (Μάχη τοῦ Μαραθῶνος) fue un enfrentamiento armado que definió el desenlace de la primera guerra médica. Ocurrió el 12 de septiembre del 490 a. C. y tuvo lugar en los campos y la playa de la ciudad de Maratón, situada a pocos kilómetros de Atenas, en la costa este de Ática. Enfrentó por un lado al rey persa Darío I, y, por otro lado, a los atenienses y sus aliados. Una proeza recordada fue la de Filípides, que recorrió el camino de Atenas a Esparta para pedir ayuda al ejército espartano. Después de tomar Naxos y Eretria, la expedición persa desembarcó en la playa de Maratón. Tras cinco días, las falanges ateniense y platense aplastaron a la infantería persa que huyó. Esta victoria puso fin a la primera guerra médica. Diez años después, tuvo lugar un nuevo ataque por orden de Jerjes I.
La batalla de las Termópilas tuvo lugar durante la segunda guerra médica; en ella una alianza de las polis griegas, lideradas por Esparta (por tierra) y Atenas (por mar), se unieron para detener la invasión del Imperio persa de Jerjes I. Se desarrolló en el estrecho paso de las Termópilas (cuyo nombre se traduce por "Puertas Calientes" - de θερμός,-ή,-όν 'caliente' y Πύλη,ης 'puerta'; a causa de los manantiales de aguas termales que existían allí), en agosto o septiembre de 480 a. C. Enormemente superados en número, los griegos detuvieron el avance persa situándose estratégicamente en la parte más angosta del desfiladero, por donde no pasaría la totalidad del ejército persa. Al sexto día, un residente local llamado Efialtes traicionó a los griegos mostrando a los invasores un pequeño camino que podían usar para acceder a la retaguardia de las líneas griegas. Sabiendo que sus líneas iban a ser sobrepasadas, Leónidas despidió a la mayor parte del ejército griego, permaneciendo allí junto con 300 espartanos, 700 tespios, 400 tebanos y algunos cientos de soldados más, que cayeron en los combates. Tras el enfrentamiento, la armada aliada recibió en Artemisio las noticias de la derrota en las Termópilas. Dado que su estrategia requería mantener tanto las Termópilas como Artemisio, y ante la pérdida del paso, la armada aliada decidió retirarse a Salamina. Los persas atravesaron Beocia y capturaron la ciudad de Atenas, que previamente había sido evacuada.
La batalla de Platea (Μάχη των Πλαταιών) fue la última batalla terrestre de la segunda guerra médica. Se libró en el 479 a. C. cerca de la ciudad griega de Platea, en Beocia, y en ella se enfrentaron una alianza de ciudades-estado de la antigua Grecia, la liga Helénica, compuesta por Esparta, Atenas, Corinto y Mégara, contra el Imperio persa de Jerjes I. El año anterior, la fuerza de invasión persa había logrado victorias en las batallas de las Termópilas y Artemisio, y conquistado Tesalia, Beocia y el Ática. Sin embargo, en la posterior batalla de Salamina, la armada aliada griega obtuvo una inesperada victoria e impidió la conquista del Peloponeso. Jerjes se tuvo que retirar con gran parte de su ejército y dejó a su general Mardonio para que acabara con los griegos al año siguiente. En el verano del 479 a. C. los helenos reunieron un gran ejército y salieron del Peloponeso mientras que los persas se retiraron a Beocia y construyeron un campamento fortificado cerca de Platea. Sin embargo, los helenos rehusaron combatir en los siguientes once días en el terreno favorable para la caballería que rodeaba el asentamiento persa e iniciaron una retirada parcial obligados por la interrupción de sus líneas de suministro, lo que fragmentó su línea de batalla. Los medos interpretaron esto como una retirada total y Mardonio ordenó a sus fuerzas perseguirlos, pero los helenos se detuvieron, plantaron batalla, mataron a Mardonio y derrotaron a la infantería persa. Una gran parte del ejército aqueménida fue atrapado en su campamento y masacrado. La destrucción de este ejército y la derrota en la batalla de Mícala, que presumiblemente se libró el mismo día, terminó definitivamente con la invasión persa de Grecia. Después de Platea y Mícala los aliados griegos pudieron tomar la iniciativa contra los medos y dar inicio a una nueva fase de las guerras médicas. Aunque Platea fue en todos los sentidos una victoria decisiva para los griegos, no parece que se le haya dado el mismo reconocimiento, incluso en su tiempo, que a la victoria ateniense en Maratón, o incluso la derrota aliada en las Termópilas.
La batalla de Salamina (Ναυμαχία τῆς Σαλαμῖνος) fue un combate naval que enfrentó a una alianza de ciudades-estado griegas con la flota del Imperio persa en el 480 a. C. en el golfo Sarónico, donde la isla de Salamina deja dos estrechos canales que dan acceso a la bahía de Eleusis, cerca de Atenas. Este enfrentamiento fue el punto álgido de la segunda guerra médica, el segundo intento persa por invadir Grecia que había comenzado en el 480 a. C. Para frenar el avance persa, los griegos bloquearon el paso de las Termópilas con una pequeña fuerza mientras una armada aliada, formada esencialmente por atenienses, se enfrentaba a la flota persa en los cercanos estrechos de Artemisio. En la batalla de las Termópilas fue aniquilada la retaguardia de la fuerza griega, mientras que en la batalla de Artemisio los helenos sufrieron grandes pérdidas y se retiraron al tener noticia de la derrota en las Termópilas, lo que permitió a los persas conquistar Beocia y el Ática. Los aliados prepararon la defensa del istmo de Corinto al tiempo que su flota se replegaba hasta la cercana isla de Salamina. Aunque muy inferiores en número, el ateniense Temístocles convenció a los aliados griegos para combatir de nuevo a la flota persa con la esperanza de que una victoria decisiva impidiera las operaciones navales de los medos contra el Peloponeso. El rey persa Jerjes I deseaba un combate definitivo, por lo que su fuerza naval se internó en los estrechos de Salamina y trató de bloquear ambos, pero la estrechez de los mismos resultó un obstáculo, pues dificultó sus maniobras y los desorganizó. Aprovechando esta oportunidad, la flota helena se formó en línea, atacó y logró una victoria decisiva gracias al hundimiento o captura de al menos 200 navíos persas.