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LÓBULO PARIETAL

FLOR DE MARIA ALDANA HERNANDEZ

Created on May 3, 2023

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Transcript

Neurofisiología Licda. Evelin Rojas

lóbulo parietal

Grupo 3

Wilson Ronaldo Leonardo 3029-21-19393 Flor De María Aldana 3401-21-14640 Shirleey Mireya Adriano 3029-21-15316 Stefanny Sánchez Véliz 3029-21-1137 Byron Alejandro Estrada 3401-21-8633

Lóbulos cerebrales

El cerebro funciona como “uno”, es decir, todas sus estructuras están interconectadas y se relacionan entre ellas para permitir las habilidades mentales y la recepción de información.

Lóbulo Parietal

El lóbulo Parietal, está relacionado con la recepción sensitiva de dolor, tacto, temperatura, distancias, tamaños y formas.

Ubicación

  • El lóbulo parietal es una de estas regiones o “porciones” de la corteza cerebral, que es la parte más externa del cerebro. Este lóbulo está situado en la parte trasera superior del encéfalo, es decir, por encima del occipital y del temporal y por detrás del frontal. Pese a ser una división anatómica y funcional del cerebro, está estrechamente relacionado tanto con los otros lóbulos como estructuras más internas del encéfalo.

LAS 10 FUNCIONES DEL LÓBULO PARIETAL

Como venimos diciendo, el lóbulo parietal, gracias a las conexiones neuronales que tienen lugar en su interior, tiene un gran impacto en muchos procesos mentales, desde la percepción sensorial hasta el desarrollo de la personalidad. Es imposible mencionar todas aquellas acciones en las que está involucrado de forma más o menos directa, pero a continuación presentamos las principales.

1. Integrar la información

El término “integración” es muy importante a nivel mental y, a menudo, resulta infravalorado. Y es que de nada serviría captar independientemente estímulos visuales, auditivos, olfativos, táctiles (incluida la temperatura) y gustativos si estos no se unieran para dar lugar a una percepción sensorial plena. En este sentido, el lóbulo parietal, además de contribuir junto a otros lóbulos en el procesamiento de los estímulos sensoriales, tiene la imprescindible función de integrar toda esta información (de sentidos diferentes) en una sola, lo que nos permite gozar de una experiencia sensorial muy compleja en la que todos los sentidos se “mezclan”.

2. PROCESAMIENTO DEL DOLOR

El dolor nace en el cerebro. Y el lóbulo parietal es una de las regiones más involucradas en el procesamiento y la experimentación de este dolor. Al recibir unos estímulos concretos a través de los conocidos como nociceptores, unas neuronas especializadas en la transmisión de impulsos nerviosos vinculados al dolor, este (y otros) lóbulos se activan de tal manera que experimentamos el dolor en sí.

3. SITUARNOS EN EL ESPACIO

La capacidad para situarnos en el espacio, no desorientarnos, conocer las distintas direcciones espaciales y saber qué sitio ocupamos en un espacio concreto es, en parte, gracias al lóbulo parietal y es que al integrar la información sensorial en una, nos permite desarrollar lo que se conoce como capacidad visuoespacial. Esto explica que las lesiones en este lóbulo den lugar a dificultades para orientarse en el espacio.

Stef

4. Desarrollar el razonamiento matemático:

El lóbulo parietal es una de las regiones del cerebro más vinculadas a las habilidades matemáticas, gran parte de todo lo que tiene que ver con la lógica de las operaciones matemáticas nace de las conexiones neuronales de esta región del cerebro.

5. Permitir el lenguaje verbal:

Las habilidades lingüísticas no se localizan en un área cerebral concreta sino en muchas de ellas. Tradicionalmente se había atribuido al área de Broca (situada en el lóbulo frontal izquierdo) y al área de Wernicke (en el lóbulo parietal izquierdo) la producción y procesamiento del lenguaje, pero hoy los científicos saben que están involucradas muchas más regiones. Lo que sí sabemos es que este lobulo desempeña un papel importante en el lenguaje porque dispone de conexiones neuronales que hacen que contemos con un lenguaje verbal complejo.

Stef

6. Controlar esfínteres urinarios

El lóbulo parietal tiene una gran implicación en el control de los esfínteres urinarios (y los anales), estos son unos anillos musculares que, dependiendo de si están abiertos o no, permiten o impiden el paso de la orina desde la vejiga hasta la uretra para la micción. Cuando el lóbulo parietal está sano, podemos controlar conscientemente esto, pero en cuanto hay lesiones, hay problemas para controlar la micción, pues los esfínteres no están bien regulados.

7. Propiciar la memoria

El fenómeno de la memoria, es decir, el almacenamiento de recuerdos en nuestro “disco duro”, está entre los más complejos del cerebro. De hecho, seguimos sin entender con exactitud cómo funciona. Lo que sí sabemos es que, a pesar de que muchas regiones del cerebro estén implicadas, el lóbulo parietal es una de las estructuras con un papel más importante a la hora de almacenar recuerdos “dentro” de las conexiones neuronales. Esto explica que las lesiones en este lóbulo den lugar a problemas para memorizar y recordar números, palabras o nombres de personas.

No te desanimes y sigue hacia adelante

8. Permitir el concepto de “yo”

El lóbulo parietal, de acuerdo a las últimas investigaciones, es una de las regiones del cerebro más implicadas en el desarrollo de la conciencia, es decir, de nuestro “yo”. Esta estructura contribuye enormemente en todo lo que tiene que ver con la conciencia humana, desde el desarrollo de valores morales hasta la reflexión acerca de lo que sucede a nuestro alrededor o nuestra personalidad. En otras palabras, gran parte de lo que nos hace humanos nace en este lóbulo parietal.

9. Desarrollar habilidades manuales

  • El lóbulo parietal es una de las regiones del cerebro más importantes a la hora de determinar nuestra capacidad para escribir, dibujar, fabricar objetos, pintar… Y es que las conexiones neuronales que suceden en su interior están muy relacionadas con las habilidades manuales. Esto explica que las lesiones en esta zona provoquen no solo problemas para hacer estas tareas, sino incluso para acciones cotidianas como puede ser vestirse o lavarse.

10. Mantener un estado anímico saludable

El desarrollo (y fluctuación) de las emociones es uno de los fenómenos más complejos del cerebro, pues no solo están involucradas muchas regiones cerebrales, sino que entran en juego todo tipo de hormonas y neurotransmisores. Sea como sea, se ha observado que el lóbulo parietal tiene también una fuerte implicación en determinar nuestro estado anímico, pues dependiendo de las conexiones neuronales que tengan lugar en su interior, experimentaremos unas emociones u otras.

Los lóbulos parietales se encargan también de regular las sensaciones táctiles, las sensaciones térmicas (cuando sentimos calor o mucho frio), la presión sobre nuestro cuerpo, las sensaciones de dolor y la interpretación del sufrimiento, junto con la coordinación en la marcha y el balance de nuestro cuerpo en entornos y situaciones determinadas.finalmente, la neuropsicología clínica ha encontrado en diversos estudios evidencias numerosas de que los daños o lesiones sufridas por personas en la región supramarginal inferior de los lóbulos parietales genera afasia de conducción. Esto quiere decir que el individuo afectado presentara problemas graves para repetir frases de forma fluida, además de dificultad en repetir frases de forma fluida. Además de dificultad en conectar un fonema con otro. Esto acarrea dificultades en la escritura y la lectura, siendo muy notorias las fallas en la articulación de lenguaje espontaneo. Por esta razón se requiere la administración de protocolos neuropsicológicos completos para diagnosticar con precisión el daño funcional del paciente y posteriormente conseguir establecer cuales serán los programas de rehabilitación neuropsicológica adecuados para mejorar gradualmente las funciones afectadas.