Mis actos tienen consecuencias

Mis actos tienen consecuencias

La libertad es lo que te permite elegir

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Ser libre también implica enfrentarse a límites por la responsabilidad que debemos tener sobre nuestras acciones.

Hay situaciones que limitan nuestra libertad por razones naturales: Por ejemplo: no podemos volar o nadar en el fondo del mar. Otros límites son el resultado de nuestra circunstancia de vida.

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Existen otros tipos de límites que nos imponemos nosotros mismos para salvaguardar nuestra integridad, es decir, para protegernos o cuidarnos. Hay límites que son indispensables para convivir con los demás integrantes de la comunidad en la que vivimos.

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Tus actos pueden tener consecuencias positivas o negativas en la dignidad o los derechos de los otros, por eso, es necesario que ejerzas tu libertad de manera responsable, es decir, considerando a los demás.

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La expresión “tomar las riendas” significa poder decidir a dónde ir, elegir el camino, anticipar los riesgos y saber en qué momento detenerse, avanzar o ir más rápido.

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Cuando somos pequeños, los adultos tomas las decisiones por nosotros; pero a lo largo de la vida, aprendemos a tomar el control y regular nuestras acciones.

VS

Cuando te enfrentes a situaciones con posibles consecuencias negativas, antes de actuar ten en cuenta distintas opciones para autorregularte.

Ser responsable de mis actos es una forma de cuidar de mí y de los demás.