LOS INCAS - V1

LOS INCAS

Iara Galarza

Sofía Gaydou

Lara Argüello

2°B

Ubicación Geográfica

Ubicación Geográfica

Este Imperio se desarrolló entre mediados del siglo XV y XVI en la región de los Andes Centrales. Los Incas o Quechuas se asentaron en el sur de lo que hoy es Perú, zona habitada por otros pueblos con los que establecieron relaciones de cooperación y, a otros, tuvieron que enfrentarlos y derrotarlos.

Según la tradición, el fundador de la dinastía gobernante fue Manco Cápac, quien inició la conquista de varios territorios y fundó la ciudad de Cuzco, convirtiéndose en la capital.

Pachacútec fue el gobernante que transformó el reino de Cuzco en el Imperio llamado Tawantinsuyu que llegó a comprender un enorme territorio que abarcaba los actuales países de Chile, Bolivia, Perú, Ecuador, el norte de Argentina y el sur de Colombia. Etimológicamente, Tawantinsuyu significa “la unión de las cuatro regiones”, y proviene de dos palabras quechuas: “tahua”, que significa cuatro, y ”suyo”, que quiere decir región. Esto se debe a que el territorio inca estaba dividido en cuatro grandes regiones: Collasuyu, Chinchaysuyu, Kuntisuyu y Antisuyu, alrededor de Cuzco.

Su sucesor Tupac Inca Yupanqui incorporó en la región llamada Collasuyu a las poblaciones del noroeste de la actual Argentina. Bajo el gobierno de Huayna Capac, el imperio alcanzo su máximo apogeo político, económico y cultural.

Actividades Económicas

Actividades Económicas

La agricultura fue la base de la economía. En las laderas de las montañas construyeron terrazas de cultivo que eran grandes escalones de tierra fértil sostenidos por paredes de piedra y canales de riego, para un mejor rendimiento del suelo.

Cerca del Lago Titicaca desarrollaron el sistema de camellones o waru waru; eran montículos de tierra donde se sembraba con zanjas laterales que servían de canales de riego y permitían aprovechar las crecidas del lago. También utilizaron las diferentes alturas y el clima para tener una cosecha diversificada. Los cultivos más importantes fueron: la papa, el maíz y la coca.

La ganadería de camélidos fue importante y la cría de llamas y alpacas proporcionaban cuero y lana para elaborar textiles y carne. La llama también era utilizada como animal de carga.

Religión

Religión

Según la visión incaica, el mundo era un lugar gobernado por un orden de origen divino al que se debía respetar. Todo aquello que era considerado sagrado era conocido con el nombre de “huaca”, esto incluía a los dioses, a algunas personas como el Inca, a templos, objetos y lugares de culto. A sus huacas, los incas le rendían veneración a través de ofrendas y rituales.

Las pacarinas eran lugares míticos como ríos, cerros nevados o el mar, de donde se creía que se había originado un ayllu.

Pachamama o Madre Tierra, que representaba a la tierra y a la producción de alimentos.

Introdujeron el culto solar y las divinidades incaicas más importantes fueron: Inti, el Sol que fertilizaba la tierra, y daba salud, vida y paz.

Viracocha, divinidad ordenadora del mundo que salió del Lago Titicaca y dispuso que el Sol y la Luna iluminaran de día y de noche.

Mama Quilla, representaba a la Luna y estaba asociada a los muertos y a la fertilidad.

Pachacámac, dios subterráneo capaz de producir terremotos.

Organización Social

Organización Social

Por debajo de él estaba la élite de Cuzco, formada por nobles algunos llamados “orejones” ya que se adornaban con grandes orejeras; eran los parientes del Inca y tenían un gran poder político; mientras que otros pocos, eran convertidos en nobles por el Inca como premio por alguna labor o misión desempeñada.

Los incas organizaron una sociedad muy jerarquizada. A la máxima autoridad del imperio se le llamaba “Sapa Inca” o “El Inca” y tenía múltiples responsabilidades como administrar los recursos del imperio y servir como mediador entre los dioses y las personas.

Los yanaconas, en cambio, eran los que habían sido desvinculados de sus comunidades, trabajaban directamente para el Inca y la nobleza; representaban el escalón más bajo de la sociedad incaica.

Los curacas eran las máximas autoridades locales y los jefes de las comunidades, llamadas ayllus. Se encargaban de repartir las tierras entre los miembros de la comunidad y de distribuir las tareas.

La mayor parte de la población del imperio estaba formada por campesinos y artesanos que formaban parte de una comunidad en particular.

La población andina se agrupaba en ayllus desde mucho antes de la llegada de los incas a Cuzco. El ayllu era una familia extensa que descendía de un mismo antepasado, provenía de un lugar de origen común y estaba administrada por un mismo curaca. En el caso de los campesinos, los miembros de un ayllu trabajaban una misma porción de tierra, a su vez estaban obligados a pagar tributos en trabajo o servicios al Estado. Por eso, los hombres, además de tener obligaciones militares, cultivaban los campos del Inca. Cada ayllu tenia la obligación de cumplir con la mita, un trabajo rotativo para el Inca, que consistía en la construcción de caminos, puentes y templos, o bien en tareas agrícolas y mineras. Las mujeres de los ayllus debían tejer prendas para el Inca y su familia.

La reciprocidad era la base de las relaciones sociales: los miembros de un ayllu tenían acceso a la tierra y, a su vez los cultivos obtenidos luego de trabajarla, se redistribuían en la misma comunidad, para ser utilizados tanto en caso de necesidad, como así también, para ayudar a huérfanos, viudas y personas con alguna discapacidad. A esta ayuda se la conocía como redistribución.

Cultura

Cultura

La tradición textil heredada de los pueblos pre-incaicos ejerció influencia en los tejedores incas. Los tejidos, que eran confeccionados a gran escala, no solo cumplían una función utilitaria, sino que también tenían un valor económico, social y religioso.

Cultura

Cultura

En cuanto a la metalurgia, en el Tawantinsuyu se difundió el uso del bronce que los artesanos empleaban en la elaboración de objetos utilitarios y militares. En cambio el oro y la plata estaban destinados a otros rituales.

La arquitectura Inca heredó la tecnología que emplearon en sus construcciones las culturas pre-incaicas, pero adquirió características propias como la monumentalidad y la repetición de formas típicas. Uno de los ejemplos mas importantes de la arquitectura inca es Machu Picchu, una serie de edificios en el valle de Urubamba, Perú, a casi 2.500 metros sobre el nivel del mar, posiblemente fue un lugar de residencia para la nobleza incaica, además de ser un centro comercial.

Organización Política

Organización Política

La civilización inca, desde el punto de vista político, tenía un gobierno teocrático, absoluto, autoritario, vitalicio y de correinado. Teocrático, ya que el poder estaba centralizado en el Inca a quien se lo consideraba de origen divino. Absoluto, porque la totalidad de los poderes recaía en el “Sapa Inca”. Autoritario, porque la palabra del Sapa inca era considerada “la ley”. Vitalicio, porque aún después de muerto, el "Sapa inca" mantenía sus privilegios. De correinado, porque gobernaba en paralelo con el “Auqui”.

La organización política del Tahuantinsuyo contaba con dos elementos importantes de unificación: El primero fue la lengua oficial, el quechua, también llamado “runa simi”.

El segundo elemento de unificación fue la religión que era obligatoria en todos los pueblos, con el culto al dios Sol.

Los hijos de los príncipes o caciques de los pueblos conquistados eran enviados a Cuzco, la capital del Tahuantinsuyo, donde, durante cuatro años se les enseñaba el idioma, la historia y la religión de los Incas. Esta práctica hacía que la cultura fuera aceptada rápidamente.

Cuando la enseñanza terminaba, ya podían pasar a formar parte del ejército o de la administración.

La autoridad política en el Tahuantinsuyo era ejercida en el siguiente orden: El “Inca o Sapa Inca” era la máxima autoridad, considerado un semidiós tenía el poder político y el religioso; sus órdenes se cumplían sin que nadie lo contradijera; controlaba a todos los funcionarios o jefes militares y dirigía la repartición de los bienes aplicando los principios de reciprocidad y de redistribución en beneficio a la sociedad.

Desde allí, gobernaba ayudado por funcionarios, nunca hijos, que recogían información de todo el imperio gracias al eficiente trabajo de los mensajeros andinos, llamados “Chasquis”, que eran entrenados desde niños para ser atletas del Tahuantinsuyo colaborando así a su correcta administración.

El Inca vivía en Cuzco, en un palacio, la “Residencia Real” o “Palacio del Inca”, que había sido construido especialmente para ser habitado.

El Auqui, el príncipe heredero al trono del Tahuantinsuyo, era elegido entre todos los hijos del Inca. No necesariamente era el hijo mayor sino el que tuviera más capacidad para poder gobernar. El principal requisito para llegar a ser nombrado, era su capacidad de liderazgo; y también, la valentía, el coraje y las aptitudes para la guerra. Desde su designación como príncipe heredero, se lo preparaba para gobernar junto a su padre. Y, era a partir de este momento, que el Inca ejercía el correinado. El Auqui usaba una mascaipacha de color amarillo mientras adquiría experiencia y se preparaba para ejercer las labores de gobierno más destacadas. Y, cuando el Inca fallecía, el Auqui podía ponerse la mascaipacha roja; ésta era la insignia de poder del Tahuantinsuyo.

El Consejo Imperial tenía como función asesorar al Inca. Lo integraban los cuatro jefes de cada Suyo, el sumo sacerdote y el general del ejército imperial. Los miembros del consejo imperial eran elegidos directamente por el Inca entre sus hermanos o parientes de más capacidad y confianza; se reunían bajo la dirección del Inca a quien daban cuenta de su labor desarrollada en sus respectivas regiones.

El Apunchic o Cápac Apo, era el gobernador de una provincia y representaba al Inca en los pueblos. Imponía el orden y el cumplimiento de las normas de conducta social. Era nombrado entre los guerreros más valientes ya que tenía atribuciones políticas, militares, económicas y administrativas.

El Tucuy Ricuy (el que todo lo ve) era un funcionario de entera confianza del Inca, nombrado directamente por éste. Viajaba de incógnito por las diferentes regiones del Tahuantinsuyo observando cómo se aplicaban las leyes y disposiciones del Inca. Su función consistía en visitar los distintos lugares, cobrar el tributo con la ayuda del Curaca y posteriormente, enviarlo a Cuzco. Podía casar parejas y también condenar a muerte a los culpables por algún crimen. El Tucuy Ricuy era una persona muy respetada puesto que representaba directamente al Inca; él era su única autoridad y sólo de él, recibía órdenes.

Los Curacas, eran jefes de tribus sometidas, a quienes se les conservaba su poder por haberse sometido al vasallaje y la sumisión al Inca. Desempeñaban la función de jefe de los ayllus; eran los encargados de recoger los tributos y entregárselos al Tucuy Ricuy para su traslado a Cuzco. Al estar en contacto directo con la comunidad era su obligación velar por el orden, el trabajo colectivo y la producción y la organización del trabajo comunal. Tenían también a su cargo, el reparto de lotes de tierras agrícolas.

El Púrej, era el encargado de una familia, el jefe de la familia; era un Hatunruna, casado. Era sobre todo, agricultor y ganadero. Era el único obligado a pagar tributos y a servir a la milicia. Constituía la principal fuerza productiva del Imperio y gracias a su aporte, los incas pudieron avanzar como sociedad.

Curiosidades del Imperio Inca

Curiosidades del Imperio Inca

Tiempos paralelos

Los Incas pensaban que el presente, el pasado y el futuro eran paralelos, es decir, existían al mismo tiempo. Creían que todos sus ancestros y sus descendientes vivían en tiempos paralelos, observando su comportamiento y, como eran parte de su entorno, influenciando en sus decisiones.

Momificación

Practicaban la momificación, como una forma de honrar a sus ancestros y preservar la conexión entre el presente y el pasado. Las momias incaicas eran tratadas como seres vivos. Eran envueltas en finas telas y joyas, y rodeadas por sus objetos personales. Eran servidas con comida y bebida y muy cuidadosamente atendidas por su descendientes vivos. Y eran llevadas en procesión en las grandes celebraciones.

Quipu

El Imperio Inca, a pesar de tener una cultura muy avanzada, carecía de un sistema de escritura. Ello no impidió que fueran muy rigurosos con sus datos. Periódicamente se hacía un relevamiento de las existencias de alimentos y se censaba a la población. A través de los “Quipus” se almacenaba esta información y se podía conocer con exactitud la cantidad de bienes y habitantes del Imperio. El Quipu era un sistema de escritura mediante nudos, agrupados en cuerdas de diversos colores; servía para registrar cantidades relativas e inventarios de cosas, nombres de personas, parentezcos y tributos.

El Quipu consta de una cuerda principal sin nudos, de la cual cuelgan otras, generalmente anudadas, de diversos colores, formas y tamaños, llamadas cuerdas colgantes. Se cree, que los colores, y quizás la forma del trenzado de las cuerdas, indicaban los objetos, mientras que los números harían referencia a las cantidades, incluyendo el número cero.

Leyes incaicas

En lo relativo al código moral y los valores de la sociedad, los Incas tuvieron un gobierno ejemplar. Tenían 3 leyes que regían de manera primordial la convivencia dentro del Imperio:

Ama suwa: No seas ladrón. Ama llulla: No seas mentiroso. Ama qilla: No seas ocioso.

Y creían que si se respetaba el código Inca, el momento de la muerte sería sólo el pasaje a una vida mejor. Gracias a este código de conducta, el inmenso Imperio de los incas mantuvo el orden social por muchísimos años.

Muchas Gracias!!!

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