Prácticas antiéticas

Práctica de valores antiéticos

Sobornos

Pagar para conseguir un voto o ofrecer trabajo a cambio de un boto.

Corrupción

En algunas ocaciones se ha podido evidenciar y se ha escuchado que el que tiene más dinero paga para acusar al inocente, y este puede pasar años en prisión por el hecho de no tener dinero para sobornar.

Robos y abuso de poder

Estos actos se dan dentro de las instituciones con el finf¿de beneficiarse a sí mismos o a sus familiares. Realizan mal uso de una forma intencional de los recursos.

Práctica de valores

Plagio

Copiar obras o ideas de otras personas para bebeficio propio

Desonestidad académica

Comportamiento que se lo realiza intencionalmente con el fin de obtener un beneficio, ya sea económico, laboral o académico.

Corrupción

Actos delectivos que son cometidos por autoridades y estos abusan de su poder.

Prácticas antiéticas

Enriquecimiento ílicito

Un servidor público incrementa su patrimonio de una manera excedida

Peculado

Apropiación indebida del dinero perteneciente al Estado por parte de las personas que se encargan de su control y custodia.

Fraude

Engaño económico con la intención de conseguir un beneficio, y con el cual alguien queda perjudicado.

Análisis crítico

De acuerdo a la realidad de Ecuador, alrededor de todos los tiempos y últimamente se han venido evidenciando muchas acciones y prácticas antiéticas, como robos, corrupción, etc. Las personas que están al frente o son autoridad en ningún caso deberían aprovechar oportunidades de negocio que sobrevengan como consecuencia de los casos o causas en que hayan intervenido como representantes o apoderados. Las prácticas antiéticas no son consideradas ilegales, pero dan cuenta de que quien las ejecuta no es de confianza y seguramente la ciudadanía no volverá a confiar en ellos. Cada profesional o autoridad debería asumir la responsabilidad por autuar mostrando interés por la sociedad en general, mostrando los valores que le han sido inculcados a lo largo de su vida. Tanto los profesionales y autoridades que están al frente de una institución no deberían buscar solamente su beneficio, sino el beneficio colectivo, es decir, ayudar a las demás personas sin aprovecharse de su vulnerabilidad.