Patrones de conducta

Patrones de conducta

105 - La psicología en el campo de la salud

Autor: M. Arantxa Elizarrarás Rios

Los patrones de conducta se entienden como las "características psicológicas profundamente arraigadas, que son en su mayor parte inconscientes y díficiles de cambiar y que se expresan automáticamente en todas las áreas de funcionamiento del individuo" (Rodríguez y Cantú, 2015).

Es decir, son características significativas y constantes de la forma de comportarse, inherentes al individuo. Son parte de la personalidad. Existen al menos cuatro tipos de patrones de conducta que se han estudiado, algunos más que otros y los verás a continuación.

Patrón de conducta tipo A

Su investigación comenzó gracias a los estudios de los cadiólogos Rosenman y Friedman en hombres con una vida laboral intensa (Del Barrio, 1996). De acuerdo con Rodríguez y Cantú (2015), las personas en las que predomida este patrón de conducta se caracterizan por:

• Ser impacientes.
• Ser competitivas.
• Ser ambiciosas.
• Estar muy estresadas.
• Estar habitualmente ocupadas.
• Tener un sentido de urgencia.
• Tener afán de logro.
• Tener mal humor.
• Llegar a ser hostiles o agresivas.
• Tender al multitask

La consecuencia mayormente asociada a los individuos con este tipo de patrón son las enfermedades coronarias. Este es el patrón de conducta más estudiado, y cuenta con varios instrumentos de evaluación, sin embargo, se ha optado por darle mayor peso a la investigación en la que se correlacionan a las enfermedades coronarias con componentes como la ira, la agresión o la hostilidad (Del Barrio, 1996)

Patrón de conducta tipo B

Las personas con el patrón de conducta tipo B se caracterizan por (Rodríguez y Cantú, 2015; Belmonte et al., 2016):

Este patrón es considerado como el más saludable, pues no tiende al estrés, así que es considerada la antitesis del patrón de conducta tipo A .

• Ser pacientes.
• Ser relajadas.
• Ser de trato fácil.
• Ser apáticas.
• Ser calmadas.
• Tender a la procrastinación.

• No involucrarse en metas difíciles.
• Menor reactividad fisiológica.
• No demostrar hiperreactividad motora.

Patrón de conducta tipo C

De acuerdo con del Barrio (1996), este tipo de patrón asocia la interiorización de los sentimientos y la inhabilidad para su comunicación con el desarrollo del cáncer.

Durante los años 90, existió una gran cantidad de investigación sobre este patrón, sin embargo, en tiempos más recientes ha perdido solidez (c.f. Anarte et al., 2000), pues los resultados no son igual de concluyentes como los del patrón de comportamiento tipo A.

Los individuos con el patrón de conducta tipo C tienen las siguientes caracteristicas (Rodríguez y Cantú, 2015):

• Poco asertivas.
• Se someten a los deseos de los demás y dejan a un lado los propios.
• Ocultan sus emociones negativas, tienden a ignorarlas u oprimirlas.
• Aparentan calma aunque estén enojadas o tristes..

Patrón de conducta tipo D

De acuerdo con Rodríguez y Cantú (2015) las características de las personas en quienes predomina el patrón de conducta tipo C son las siguientes:

Este patrón de conducta se relaciona también con las enfermedades coronarias, sin embargo, no cuenta con la misma cantidad de investigación que los demás patrones.

• Experimentan emociones negativas gran parte del tiempo.
• Sensación de infelicidad.
• Preocupación excesiva.
• Pesimismo.
• Irritabilidad constante.
• Baja autoestima.
• Poca asertividad

En conclusión, se pueden considerar a los patrones de comportamiento como una aproximación a como es que la personalidad puede impactar a la salud. Sin embargo, es importante ser críticos con estas aproximaciones, dado que la investigación científica, que se esta actualizando día con día, ha optado por otros caminos, por ejemplo, investigar solo algunos componentes de un patrón, como en el caso del tipo A, que se está prestando mayor atención a la hostilidad; o bien, el patrón se encuentra en diferentes tipos de personas, como en el caso del tipo C que no sólo se ha asociado a personas con cáncer, sino también a enfermos de diabetes.

Referencias Anarte, M., López, E., Ramírez, C. y Esteve, R. (2000). Evaluación del patrón de conducta tipo c en

pacientes crónicos. Anales de Psicología, 16(2), 133-141.

Belmonte, G., Ruiz-Olivares, R. y Herruzo-Cabrera, J., (2016). Patrón de contucta tipoa A y B, y su

relación con las adicciones conductuales. Acción psicológica, 13(1), 119-128.

Del Barrio, V. (1996). Evaluación de características estilísticas de la personalidad. En R. Fernández-

Ballesteros (Comp.), Introducción a la evaluación psicológica, Vol. II. Salamanca:Ediciones Pirámide.

Rodríguez, P. y Cantú, R. (2015) Perfiles de personalidad en pacientes con hipertensión arterial.

Psicología y salud, 25(2), 181-189.