De aseconia a compostela

De la Mansio a la ciudad de Asseconia a compostela

¿En qué momento llegó Santiago, y en qué momento se perdió su memoria?

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INDICE 03.Mi pregunta 04.Lugar habitado 05.Itinerario Antonino 07.Mansio Asseconia 09.Población local 15.Necrópolis 18.Iria 19.San Fiz de Solovio 21.Mi pregunta 23.Testimonios anteriores al s.IX 30.Y Teodomiro encontró 31.Sucesivas construcciones 33.Las murallas 36.Murallas de Cresconio 40.Objetivo de mi búsqueda

Compostela nace de la memoria de un apóstol y a él le debe su prosperidad, la riqueza de sus monumentos, patrimonio y cultura. ¿Pero de una memoria surgida 800 años más tarde?

Mi pregunta:

¿Cómo es posible que se pierda la memoria del enterramiento de tan importante apóstol en la iglesia local? ¿O quizás no se perdió nunca y fue simplemente que se dio a conocer y se puso en valor en ese momento? ¿Fue el obispo Teodomiro quien quiso comprobar la verdad de una tradición?

<Lauda del obispo Teodomiro

Las colinas y valles en los que hoy se asienta la ciudad ya estaban habitados. Topónimos como Porta da Mámoa, restos arqueológicos como petroglifos de Conxo o del Pedroso; castros como el llamado Castriño de Conxo,… evidencian que esta región está poblada desde tiempos muy antiguos.

Pocos son los elementos que nos ilustran la vida en los primeros tiempos de este asentamiento, salvo alguna pieza metalúrgica o de fábrica textil y la cerámica que refleja el movimiento e instalación en este enclave. Útiles que reflejan una convivencia de una población de origen romano o muy romanizada, y un substrato poblacional indígena. Población que pervive al menos hasta el siglo III.

Fusayola y pesa de un telar íbero-romano

Cerámica, como testigo de una presencia romana

1. Cerámica hecha a molde a partir de unas arcillas seleccionadas y depuradas a las que se recubre de un característico barniz rojo, o en colores afines-, platos, cuencos, fuentes, botellas-. Muestran que desde los primeros tiempos del poblado ya hay servicios de mesa estandarizados, caso de un tipo de copa y de plato que aparecen generalmente asociados en contextos similares.

2. Cerámicas pintadas hispanorromanas, de posible origen meseteno, 3. Cerámicas conocidas como de "paredes finas", que proceden en su mayoría de la producción realizada en lo que actualmente es el ayuntamiento zamorano de Melgar de Tera. 4. Cerámicas de uso común en el ámbito de una tradición romana, en relación a proximidad y ascendencia administrativa de Lucus Augusti: cuencos, jarras y otros. 5. Una carencia significativa es la cerámica de contención y transporte, las ánforas de las que tenemos a penas algún pequeño fragmento de dificil identificación. 6. Productos de alfarería local, con raíces están en el mundo castreño de la Edad del Hierro. en manifestaciones tardías -s.I a.C./ s. I d.C.

Los indicios arqueológicos apuntan a una pequeña población creada ex novo con construcciones de cierta entidad, por su fábrica y dimensiones, que se disponían de manera organizada, en una ladera por la que discurría una vía de comunicación, de importancia para esta área de la Gallaecia romana. No cabe duda de la plena romanidad de una parte importante de las gentes que construyen este nuevo enclave, tal como reflejan sus cerámicas y materiales constructivos. Los textos de los monumentos funerarios de este primer enclave son evidencias de tal romanidad. Nombres y parentescos como Atius, Flaccinius, Numerius, Aquilia. Culto rendido a dioses romanos. Enterramientos a la manera romana. El único indígena del que sabemos su nombre, Proculus Camalus, es de la tribu de los Grovios, procedente del área más romanizada de la Gallaecia: el sur de la actual provincia de Pontevedra.

La Iria romana estaba situada al suroeste del convento lucense, cuya capital administrativa era Lucus Augusti, no lejos de la frontera norte del convento bracarense cuya capital era Bracara Augusta. La división entre los dos conventos la marca el río Verdugo o la ría de Vigo. Esta situación procede de la nueva distribución realizada por el emperador Diocleciano (284-305), al segregar una nueva provincia, denominada Gallaecia, de la antigua Hispania Citerior. Gallaescia estaba formada por Lucus A. Bracara A. y, el llamado asturiaciense, con en Asturica Augusta.

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El contexto histórico de esta primera ocupación está en el rápido proceso de integración del occidente gallego en las estructuras del Imperio Romano a partir de inicios del siglo I d.C. Este proceso romanizador se manifiesta en la implantación de elementos de nuevo cuño en la interpretación del territorio: +una nueva red viaria que unirá a +pueblos recién fundados +reestructuración socioeconómica que afecta a toda la Gallaecia, con nuevas actividades económicas, implantación definitiva de una economía monetaria y en la normalización de las redes comerciales; La más aceptada identificacion de este poblado es la mansión viaria conocida como Asseconia perteneciente a la vía XIX que partiendo de Bracara se dirigía a Asturica, cruzando territorio gallego y que conocemos por las citas de las fuentes itinerarias antiguas, por los restos arqueológicos y la epigrafía.

Mansio Asseconia

• Esta Mansio figura en el Itinerario de Antonino como la séptima partiendo de Braga y que es citada en varias fuentes como Asseconia o Assegonia. Unicada a trece millas de Iria.
• Parece ser que otros importantes caminos confluían en este mismo lugar, siendo pues un cruce de caminos de la Galicia romana.
• Este asentamiento data de época altoimperial (siglos I-II d.C.) y se extiende por el espacio ocupado hoy por la catedral, claustro, plaza da Quintana y, tal vez, Acibechería e inicio de el Vilar y Nova. Quienes vivieron en ese enclave eran, en su mayor parte, ciudadanos romanos de pleno derecho, tal y como atestiguan los materiales cerámicos y constructivos y diversas estelas funerarias como el ara de San Paio.

Ad-sego- La muy fuerte

Esta condición de nudo queda demostrada por su supervivencia en los primeros tiempos de la Compostela altomedieval, como señaló F. López Alsina, con el encuentro de cinco vías distintas: 1.-Vía que unía Santiago con Iria y 2.- Santiago con O Pino, y que dada la frecuente superposición entre caminos medievales y caminos romanos podría corresponder a la mencionada vía XIX; 3.-la vía de Santiago a Sigüeiro, que podría corresponder a parte de una vía secundaria que uniese a Iria con Brigantium (Coruña); 4.- Vía de Santiago a Brandomil, que podría corres ponder a una vía secundaria que uniese la vía XIX y la vía XX (per loca maritima), a la que algunos autores hacen pasar por ese lugar, en el que han salido a la luz una serie de vestigios semejantes en caracterización y cronologia a Compostela. 5.-Vía desde Santiago a Ourense, para la que tenemos también evidencias de claros precedentes en época romana.

Nudo vertebrador

donde confluyen 5 vías

La Masio de Aseconia estaba situada entre otras dos importantes mansios: la de Iria Flavia y la de Castrofeito (O Pino), junto a la conocida por los romanos como Vía XIX, en mitad de un estratégico nudo de cinco Vías que la hacían zona de paso de todo aquel que transitara por el Occidente de la península. Aseconia no fue un asentamiento de población local conquistado por los invasores, sino un asentamiento romano desde su inicio. No hubo mestizaje de costumbres, religiones y culturas. Aseconia, bajo la actual Compostela, tenía la organización económica, política, administrativa, cultural y religiosa de una villa romana. La arqueología ha hallado joyas y cerámicas romanas y testimonios de su culto a los Dioses paganos. ¿Pasó, pues, Santiago por esta vía camino de Brácara y aquí encontró acogida?

¿Por qué surge aquí una Mansio?

Las gerenciaba un oficial romano llamado Mansionarius que estaba al mando de un pequeño destacamento de soldados.

En el área compostelana este camino discurriría, según los autores que aceptan su paso por aquí y utilizando el actual callejero urbano, por Conxo, Rapa da Folla, Porta Faxeira, Rua do Franco, para continuar una vez pasada la mansio por Azabachería, Cervantes, Casas Reais y rua de San Pedro, coincidiendo en este último tramo con el que será posteriormente camino “francés" de peregrinación a Compostela. Esta mansión aparece citada como Asseconia o Assegonia en las fuentes clásicas como 'Itinerario de Antonino'. Esta obra es la fuente más importante para el conocimiento de las vías romanas por recoger 372 vías terrestres, de las cuales 34 corresponden a Hispania, dándonos el nombre de las mansiones de cada vía y la distancia que hay entre ellas señaladas en millas o en algún caso en estadios. Su fecha de redacción es el s. III, con añadidos del s. IV. Según el Itinerario, Asseconia pertenece a la vía XIX y estaría situada a trece millas de la anterior mansión de Iria o Tria que estaría en la actual Iria Flavia o sus cercanías, lo que equivale a los veinte kilómetros que distan actualmente Iria y Compostela. La siguiente mansion en dirección a Lucus sería la de Brevis que, ubicada a 22 millas de Asseconia, se localiza en el lugar de Castrofeito, O Pino (A Coruña), en donde han aparecido restos arqueológicos semejantes a los de Aseconia.

¿Por qué surge aquí una Mansio?

Las gerenciaba un oficial romano llamado Mansionarius que estaba al mando de un pequeño destacamento de soldados.

SUÁREZ OTERO, J. E CAAMAÑO GESTO, M. (2003): Santiago antes de Santiago. Historia de la ciudad de Santiago de Compostela. Consorcio da cidade de Santiago de Compostela. 23-48.

¿Qué es una Mansio?

• La palabra latina mansus forma verbal derivada de manere, significa "lugar donde pasar la noche durante un viaje". Era una parada oficial en una calzada romana, mantenida por el gobierno central para el uso de oficiales y hombres de negocios a lo largo de sus viajes por el Imperio. A lo largo del tiempo fueron adaptadas para acomodar a viajeros de toda condición, incluso al emperador.
• En sus estructuras, por los muchos restos arqueológicos descubiertos, se aprecian por lo general estancias propias de las posadas: recepción, baños termales, habitaciones, comedor y la cocina con su horno, su fragua, granero y establos

Itinerario de Marco Aurelio Antonino, conocido como Caracalla, que gobernó Roma desde el 211 hasta el 217

• En su tiempo se comenzó a compilar este itinerario, que sufrió numerosas modificaciones a lo largo de los siglos III y IV, por lo que también es conocido como "Itinerarios Antoninos".
• En cada ruta se identificaban mansiones, correspondencias y millas. Este itinerario tenía la finalidad de facilitar la localización de los núcleos de población con fines recaudatorios, no tanto para ayuda de viajeros. Las indicaciones sobre distancias del citado itinerario han permitido localizar una gran multitud de emplazamientos desaparecidos por toda la antigua red de vías romanas, así como de algunas calzadas romanas no documentadas por otras fuentes.
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Época romana y altomedieval

• En esta colina de la vía XIX, que une Bracara Augusta con Asturica Augusta (Astorga), se asentó una mansio, -una parada y fonda para los viajeros que recorrían los caminos de la Gallaecia-.

Bracara Augusta (Braga), Ponte de Lima, Tude (Tuy), Turoqua (Pontevedra), Aquis Celenis (Caldas de Reyes), Iria, Martiae, Lucus Augusti (Lugo) y Asturica Augusta (Astorga). Fue inaugurada en el año 11 d.C. y era la más larga del noroeste peninsular, con unos de 500 kilómetros.

1º momento: época bajoimperial romana, Parte baja del edículo con mampostería de granito y esquisto, contiene los arranques de un gran arco de ladrillos cuadrangulares trabados con argamasa y perteneciente a una dependencia inferior abovedada; El suelo estaba pavimentado con ladrillos. A lo largo del subsuelo de la catedral es frecuente la aparición de restos constructivos realizados en cerámica, que por sus características técnicas son adscribibles en gran parte a un enclave romano que precedió a la actual Compostela y que hablan también de movimientos de culturas y tradiciones y de comercio entre ellas: tégulas. Imbrices, ladrillos, de forma en general prismática, losas pavimentales, recipientes cerámicos, quizás resto vajilla de lujo. Escasos fragmentos de producciones tardías de terra sigillata hispánica y algunas cerámicas pintadas, y alguna alfarería, como las llamadas grises paleo cristianas. 2.- Después de Roma La arquitectura del edículo es alterada con posterioridad, primero cegando el arco y posteriormente reforzando los muros y abriendo nuevos vanos. Cambia el tipo de construcción con respecto a la etapa precedente, que refleja importantes modificaciones en la organización del enclave. Este edificio que será abandonado y entre sus muros surgirá una necrópolis, La cerámica permite ver que después del mundo romano, hay una producción local de menor proyección geográfica y menor producción y circulación de los productos cerámicos. 3ª en -el siglo IX-es reaprovechado en la realización de nuevas arquitecturas, propias de otras circunstancias y otros tiempos.

TRES ÉPOCAS CONSTRUCTIVAS

Evidencia numismática:

Dos pequeños bronces hallados bajo la actual basílica; uno de ellos resulta inidentificable por su mal estado de conservación, mientras que el otro es una acuñación del emperador Constancio II (324-361). Una tercera pieza apareció en excavaciones efectuadas en la actual calle Azabachería, certificando la incidencia en esa área del yacimiento romano. Se trata de un bronce del emperador Magno Máximo acuñado en Arelatum (actual Arlés en Francia), con una cronologia más tardía que los anteriores (entre el 383-388), que nos acerca ya al siglo V.

España - Hispania Romana - Maiorina - Magno Maximo, emperador hispano. Ceca de Arles. REPARATIO-REIPVB. PCON. - Bronce>

Bajo la catedral compostelana y en su entorno inmediato se han encontrado restos que corresponderían a una pequeña población, En esta imagen se ve un pozo de algún antiguo asentamiento. Durante siglos, los habitantes del entorno emplearon este lugar de enterramiento hasta algún momento en el que fue definitivamente abandonado y olvidado. En el siglo VIII la colina donde se había levantado la mansio estaba cubierta por un espeso bosque que los lugareños llamaban Libredón.

Vestigios de un pozo de poblaciones anteriores bajo la Catedral

Población local en los primeros siglos

ARA ROMANA

Al construirse la primera iglesia sobre el mausoleo, se utilizó como altar una vieja ara funeraria de mármol de origen romano (s. I). Pudo encontrarse en el propio edículo funerario donde estaban los restos atribuidos a Santiago. El ara mide 68 x 89 cm, con un soporte plano del mismo material de 124 x 40 cm. Fue el primer altar dedicado al Apóstol. Estaba situado un nivel por encima del sepulcro del santo -la actual cripta-, si nos atenemos a algún documento de finales del siglo IX. Fue el único altar existente en las dos iglesias prerrománicas que se sucedieron hasta la construcción de la actual catedral.

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Presencia romana bajo la catedral.

Son cuatro las estructuras murarias que se asocian a esta primera ocupación romana y se emplazan en el brazo sur del crucero de la catedral románica y en la plaza da Quintana. Sus características constructivas, posición estratigráfica y la cultura material recuperada en las excavaciones son los argumentos que avalan su adscripción a esta fase inicial de la ocupación romana. La primera ocupación romana contó también con un cementerio, una necrópolis de incineración dispuesta en los alrededores de la vía que pasaba por las proximidades del asentamiento. Con este lugar de enterramiento estaría relacionado, precisamente, el gran mausoleo funerario atribuido al apóstol Santiago localizado por López Ferreiro en el siglo XIX.

El edificio del Edículo donde se encontraron y se guardan los restos del apóstol es el más poderoso testimonio de la existencia de una población romana en esta ubicación

Diversos relatos medievales como la carta del Papa León, la serie de traslaciones de los siglos X, XI y xII, el Libro V del Códice Calixtino y Ia HistoriaCornpostelana describen el sepulcro de Santiago en los siglos IX y X, ubicado dentro de una 'domuncula', en una'parva arcuata domus', y que, sobre esta casita abovedada, estaba una iglesia de sus mismas dimensiones, accesible al pueblo, en la que estaba el viejo altar. También describen que en el siglo xII, Gelmírez manda derrivar el 'habitaculum' que estaba en alto para dejar despejado el presbiterio. Manuel Precedo Lafuente que él está totalmente cierto de que el edículo sepulcral era el clásico mausoleo de tipo romano de dos cuerpos: una cripta sepulcral y una, cella memoriae donde se celebraba el aniversario, el culto familiar o el culto sepulcral, que tienen un origen semejante en sus formas primitivas. Apoyçandose en que este tipo de mausoleo es frecuentfsimo en Roma.

Tipología romana de edículo funerario

http://apuntes.santanderlasalle.es/arte/romanico/arquitectura/compostela_arca_marmarica.htm En esta web se presenta una evolución y explicación lógica de este edículo hasta llegar al s.IX. Me gustaría contrastar con el profesor su veracidad. Qué interés pudo haber en el s.II de cubrir el mausoleo con una estructura perimetral.

La transición al mundo medieval La necrópolis conocida como "germánica" continuó el uso funerario de este espacio; modificado en forma y, muy especialmente, en concepto. Al desaparecer el uso habitacional con el traslado de la población a otra parte, se destruye la convivencia entre el poblado y el cementerio, para ser sustituido por una única realidad de carácter exclusivamente funerario. Al desaparecer el imperio, desaparece el sentido de una mansio viaria, y los cambios en el poblamiento llevan a una ruralización y dispersión de la población. Resulta difícil saber si el cambio llevó a una dispersión de la población existente o simplemente a un traslado del espacio habitado, si se trata de una reorganización del hábitat o de un simple cambio de ubicación del poblado. De lo que no cabe duda es de la continuidad de un importante grupo humano establecido en las cercanías de lo que ahora será un gran cementerio.

Hay una necrópolis de época romana que siguió empleándose durante los primeros siglos de la Edad Media, que corresponden al período de la dominación sueva en el noroeste peninsular.

Reino suevo s.VI

En lo que respecta a las laudas con la representación de la estola, su distribución espacial está vinculada con las sedes episcopales. La estola posee una significación evidente como distintivo jerárquico entre los miembros de la estructura eclesiástica: obispos, presbíteros y diáconos.

< laudas de estola

Las laudas funerarias con la representación del orante y de la estola constituyen uno de los aspectos más singulares del mundo funerario de la Gallaecia tardo-antigua. Los hallazgos conocidos de este tipo de laudas se circunscriben, concretamente, a los actuales territorios de Galicia y norte de Portugal, estando ausentes en el resto de la Gallaecia y Península Ibérica. Este hecho, sin duda, ha condicionado que se haya relacionado dichas laudas funerarias, concretamente las de estola, con los Suevos, hablándose así de la «estola sueva» Se ha errado asociando todo hallazgo de los siglos V y VI en Galicia con los Suevos. En realidad, este tipo de laudas muy poco tienen que ver con los Suevos, a excepción de su coincidencia espacial y temporal, obedeciendo a otras causas directamente vinculadas con el contexto religioso de la Gallaecia tardo-antigua. (+info)

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Este es un tema en el que me gustaria ser asesorado, pues si se guardó memoria del apóstol y hay una comunidad monacal, situaría un poco la ubicación de los restos

El número de tumbas cubiertas con lápidas graníticas con el tema del orante indica que hacia el siglo VI habría un monasterio en este lugar. La abundancia de iglesias dedicadas a Santiago en Galicia, norte de Portugal, Bretaña francesa e Inglaterra en los siglos V y VI, postula la existencia de la memoria de este apóstol en este lugar. La entrada al sepulcro era accesible y posiblemente de aquí salieron las reliquias.

Por aquel entonces es posible que la escasa población del territorio que hoy ocupa la ciudad de Santiago estuviera asentada en las proximidades de la actual iglesia de San Fiz de Solovio, y sería aquí donde, a principios del siglo IX, viviría aquel ermitaño llamado Pelayo.

Ubicación del primer núcleo poblacional en Aseconia / Compostela Sub Lovium: debajo o al pie del bosque o de la enramada

San Fiz de Solovio

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Un documento fundamental en la historia de Compostela, la llamada “Concordia de Antealtares” de 1077, nos cuenta la leyenda fundacional de la ciudad: Pelayo observó unas luces que brillaban en plena noche en un bosque cercano y avisó al obispo de Iria Flavia, Teodomiro, para que viniera a comprobar el extraño fenómeno. El obispo penetró en el espeso bosque para acabar descubriendo un viejo cementerio que ocultaba algo aún más extraordinario, nada menos que un mausoleo que acogía el sepulcro con el cuerpo del apóstol Santiago y dos de sus discípulos. Teodomiro comunicó la noticia al rey Alfonso II el casto que, desde su lejano palacio de Oviedo, acudió hasta este remoto lugar del finis terra28 e para admirar con sus propios ojos el maravilloso hallazgo, convirtiéndose así en el primer peregrino de la historia.

San Fiz de Solovio

Es el templo compostelano de raíces más antiguas. De acuerdo con la tradición, allí moraba el ermitaño Paio, descubridor de las reliquias del Apóstol, a las que fue conducido por luces celestiales. La capilla altomedieval fue destruida por Almanzor y reconstruida por Diego Xelmírez en el siglo XII. De hecho, el Códice Calixtino la menciona ya entre las diez iglesias que tenía Compostela en esa época.

• En el siglo VIII ya no queda población sobre este enclave pero tampoco la necrópolis está en uso.

¿un ermitaño vio unas estrellas?

Este es un tema que me apasiona y que me gustaría saber¿cómo fue ese reencuentro con el lugar? ¿Había una memoria del enterramiento en la gente del lugar y en cierto momento el obispo Teodomiro quiso salir de dudas?

¿Por qué semejante edículo, y sólo uno, como enterramiento al lado de sencillas sepulturas?

De todo cuanto he leído no he leído sobre la posibilidad de que realmente se construyese para alguien como un apóstol. ¿Realmente un mandatario romano construiría algo así, al lado de sepulturas excavadas, y sólo uno?

CUERPO DE SANTIAGO en SANTIAGO

¿Y por qué aparecen, ocho siglos después de su muerte en Jerusalén, los restos de Jacobo, hijo del Zebedeo, y discípulo de Jesús, en un bosque perdido en el fin del mundo conocido?

Informaciones históricas de la Inventio: Un status quaestionis XOSÉ M. SÁNCHEZ SÁNCHEZ Annuarium Sancti Iacobi, 2012, nº 1, 361-370

813

824

820-834

Me interesa especialmente este tema, no tanto por la ubicación cronológica del hallazgo del sepulcro compostelano, sino por la situación anterior, para saber cómo es que se guardaba memoria de este enterramiento. La fecha exacta de la inventio o toma de conciencia de la iglesia local sobre este tesoro que conserva, sería un dato importante por lo que implicaría respecto a la historicidad de los hechos que narramos.

Tras 825

Continuidad en el culto

Obispado de Teodomiro

Obispo de la diócesis de Iria Flavia entre los años 819 y 847. A él debemos la identificación de este sepulcro -que estaría abandonado, pero del que se habría de guardar alguna memoria-. del apóstol Santiago el Mayor. Donde actualmente se sitúa la cripta de la catedral compostelana. Los textos literarios más antiguos que atribuyen el descubrimiento a Teodomiro están en la Concordia de Antealtares, de 1077, y en la Historia Compostelana, de principios del XII. Todos coinciden en lo esencial con el relato del eremita que ve unas luces sobre el lugar. Según la inscripción de la lauda, Teodomiro murió el 20 de octubre del año 847 Lo indudable es que la inventio o puesta en valor de esta memoria tuvo lugar entre los años 820 y 830,

1. Listas y Martirologios

Testimonios anteriores al siglo IX:

• Listas y tradiciones apostólicas hagiográficas apócrifas de la dispersión y la misión cristiana de las iglesias en el mundo romano y en los extremos, allí donde el evangelio llegó. Desde Irlanda a Persia o Egipto, pasando por CentroEuropa y también a Hispania.
• Una de esas tradiciones es el Pseudo Abdías. Siendo que el Libro de los hechos de los apóstoles tras contar la muerte de Santiago en Palestina, apenas da datos sobre lo que pasó después con su cuerpo y ante la inquietud temprana de situar ese enterramiento, surge textos como el llamado pseudo Abdías:
• Escritor apócrifo citado como primer obispo de Babilonia (s. I). Se le atribuye una historia sobre la predicación y muerte de los apóstoles después de Cristo que serviría de inspiración para textos posteriores. La obra se traduciría del hebreo al griego y de este idioma al latín, con una versión de Clemente de Alejandría.
• Cuenta que Josías, un escriba de la secta de los fariseos, fue testigo del único milagro atribuido al Apóstol en vida, cuando estando ya condenado por Herodes Agripa a morir decapitado en Jerusalén, devuelve el movimiento a un hombre paralítico. Santiago solicita como última gracia un recipiente con agua con la que lo bautiza. El escriba es condenado también a muerte y los dos son degollados. Esta historia pasa incluso al Codex Calixtinus.
• En el relato de Abdías estaría la primera referencia literaria detallada del martirio de Santiago el Mayor, en Jerusalén, tras oponerse al judaísmo, recogida posteriormente como Passio Iacobi -La pasión de Santiago-. Se considera una falsa atribución por lo que se le conoce como Pseudo-Abdías.

2.- Breviario de los apóstoles

Testimonios anteriores al siglo IX:

• Es el texto considerado tradicionalmente como más antiguo. Se trata de un apéndice a los misales galicanos latinos más antiguos. Es un calendario o martirologio de los apóstoles datable en torno al año 590 en el sur de Francia o norte de Italia. Texto latino que contiene una colección de pequeñas biografías y datos sobre los apóstoles de Jesús, entre ellos sus lugares de predicación.
• La primera referencia del apóstol como evangelizador de la Península Ibérica se dio hacia el siglo VII en un manuscrito de autoría desconocida; el Breviarum Apostolorum, cuya rápida difusión se pone de manifiesto en De ortu et orbitu Patrum de Isidoro de Híspalis (556-636). Las primeras noticias sobre el Achaia Marmaricase se dieron también en el breviario, aunque no se habla de un emplazamiento preciso.
• No se conoce ningún texto anterior que aluda a la evangelización peninsular de Santiago ni tampoco ningún otro que lo cite con esta precisión desde el Nuevo Testamento. El conocimiento de esta noticia animó a otras iglesias occidentales, como Venecia y Córcega, a considerarse herederas de la evangelización del Apóstol, que pasaría por estos territorios camino de Hispania.
• El Breviarium aporta también por primera vez el trascendental pero impreciso dato sobre el sitio de enterramiento de Santiago el Mayor. Dice que tuvo lugar un 25 de julio en un lugar llamado Achaia Marmarica o Aca Marmarica. Se trata de un enigmático topónimo o espacio, referido a la forma del recinto sepulcral -arcis marmoricis-.

3.De ortu et obitu patrum

Testimonios anteriores al siglo IX:

• Tratado atribuido, aunque con muchas reservas para algunos autores, a San Isidoro de Sevilla (560-636), Del siglo VII data el ‘De ortu et obitu prophetarum’.
• Aquí se da la primera referencia a Santiago desde el interior del territorio hispano. Es un listado de los santos padres, incluidos los apóstoles: de dónde salieron y dónde acabaron y se vuelve a situar otra vez a Santiago en la predicación en Hispania.
• Se considera la primera fuente documental que alude, desde la Península Ibérica, a la predicación del apóstol Santiago el Mayor en Hispania y otras regiones de Occidente. Distintos autores consideran que la alusión a Santiago que “de los lugares occidentales, en Hispania predicó el evangelio” fue interpolada en el De ortu et obitu patrum [Del nacimiento y muerte de los padres] a mediados del siglo VII, poco después de ser elaborado el texto original por un conocedor del Breviarium Apostolorum, la primera obra que hace referencia a la predicación jacobea peninsular, elaborada en Francia o Italia a finales del siglo VI.
• La autoridad de San Isidoro va a respaldar estas palabras, incrementando y prestigiando su proceso de difusión.

4. Aldhelmo de Malmesbury

Testimonios anteriores al siglo IX:

• También citado como Aldelmo. Monje y santo inglés, considerado el primer erudito anglosajón (639 o 640-709). Fue abad de Malmesbury y -desde el año 705- obispo de Sherbourne, en ambos casos en Inglaterra. En el Poema de Aris, compuesto a principios del siglo VIII, cita la predicación de Santiago el Mayor en la Península Ibérica. El texto, escrito con motivo de la consagración de la iglesia local de Bugge, que incluía un espacio dedicado a los apóstoles, señala que lo primero que hizo Santiago el Mayor fue “convertir con su enseñanza a las gentes hispanas”.
• Los defensores de la predicación peninsular de Santiago sostienen que utilizaría fuentes que circulaban en ese tiempo por Occidente. Aldhelmo podría estar influido por algún texto antiguo desconocido de origen bizantino, por el Breviarium Apostolorum o por la obra de San Isidoro de Sevilla. Los dos últimos sitúan por primera vez a Santiago como evangelizador de Hispania. Lo hacen en las décadas iniciales del siglo VII.
• Adelmo falleció en el 709 por tanto estamos hablando de una referencia del siglo séptimo igual que Isidoro de Sevilla pero ya a finales del siglo séptimo por lo tanto tenemos como en ese siglo ya la noticia circula en el sur de la Galia, y en la Hispania visigótica y en las islas.

Testimonios anteriores al siglo IX:

5. San Beda el Venerable

Beda disponía en su monasterio de una biblioteca única para la época, y pudo consultar distintas fuentes en que basó su afirmación sobre Santiago, entre ellas el Breviarium Apostolorum (s. VI-VII), texto latino que sitúa a Santiago predicando en las tierras occidentales hispanas.Estudiando el Breviarium y otros catálogos coetáneos, revisando las contradicciones entre ellos y consultando otras fuentes anteriores, afirma la evangelización de Hispania por Santiago el Mayor en sus textos. En su Homilía XCII sobre San Juan Evangelista señala: “Este [San Juan Evangelista] es el hermano del bienaventurado Santiago, cuyo cuerpo descansa en Hispania”. Pero lo más valioso de este autor es que es el primero en escribir, un siglo antes del hallazgo del sepulcro, que el enterramiento es en Hispania, con claras referencias de situarlo en Galicia. Su Martirologio dice: “Los sagrados restos mortales de este bienaventurado fueron trasladados a Hispania y escondidos en sus últimos límites frente al mar Británico”, donde el término británico no se refiera a las islas Británicas ni a la Bretaña Francesa, sino a Britonia, la diócesis bretona del noroeste hispano cuya sede era Santa María de Bretoña, hoy San Martín de Mondoñedo (Lugo).

5. San Beda el Venerable

Testimonios anteriores al siglo IX:

• En los siglos VII-VIII, San Beda el Venerable (monje benedictino inglés- 672-735, Doctor de la Iglesia y gran historiador) describe con meticulosa precisión la localización exacta del cuerpo del Apóstol en Galicia. Se refiere al apóstol a través de las dos obras: Homilía XCII y el Martirologio. En la primera, el autor afirma la predicación de Santiago en Hispania.
• Recoge San Beda el Venerable las distintas fechas que se celebran del apóstol:
• el 25 de marzo, coincidiendo con la Anunciación, se celebra el martirio del apóstol Santiago.
• El 25 de julio, según el calendario litúrgico romano, se celebra la llegada de los restos del apóstol al lugar actual de enterramiento.
• Y el 30 de diciembre, según el calendario litúrgico hispano o mozárabe, se celebra la sepultura del apóstol.
• Estas serán las tres fechas importantes de la memoria del apóstol Santiago, aunque la más importante en la historia de la Iglesia será la del 25 de julio, fecha según el calendario romano.

Beato de Liébana

Testimonios anteriores al siglo IX:

• (?-798). En el S. VIII el célebre Beato de Liébana (Cantabria) escribe entre otras muchas obras el himno “O Dei Verbum”, formado por frases y conceptos tomados de su Comentario al Apocalipsis para ensalzar y promocionar el patronazgo de Santiago sobre la Hispania cristiana, necesitada de la ayuda divina.
• En Comentarios al Apocalipsis de San Juan, del 776, establece la predicación ibérica de Santiago, siendo el segundo texto hispano que lo afirma, tras una primera atribución a San Isidoro (s. VII).
• En el himno O Dei verbum, ubicado entre los años 784 y 785. , que algunos autores no acaban de considerar suya, lo cita por primera vez como patrón hispano. Los dos textos son anteriores en unos cuarenta años al descubrimiento del sepulcro de Santiago (ca. 820-830).
• Sitúa al apóstol Santiago el Mayor como el responsable de la predicación peninsular, inspirándose quizá en la primera fuente al respecto, el Breviario de los Apóstoles (s. VI-VII).
• ¡Oh Apóstol, dignísimo y santísimo, cabeza refulgente y dorada de España, defensor poderoso y Patrono nuestro!

¿Qué movió a Teodomiro a buscar e idnetificar ese sepulcro?

Teodomiro no sólo certificó con su autoridad el hallazgo, sino que informó de él al soberano, Alfonso II, y consiguió que este viajase al lugar del sepulcro y mandara levantar sobre él una basílica modesta, dados los escasos recursos de los que disponía el Reino, así como un pequeño monasterio dedicado esencialmente a su custodia. Entre los edificios adscritos al servicio del complejo se encontraría probablemente una vivienda destinada a residencia episcopal, que respondería al deseo del prelado de establecerse en ese enclave, abandonando su palacio de Iria Flavia. Diversos documentos atestiguan que su ejemplo fue seguido por sus sucesores, aunque oficialmente la sede se mantuvo en Iria hasta 1095, cuando se fijó de forma exclusiva en Compostela.

IGLESIA DE ALFONSO II

Alfonso II ya conocia las tierras de Galicia, había otorgado privilegios al monasterio de Samos, y no había tenido noticias de Santiago, y es más que probable que valorara el hallazgo con cautela. Por eso las crónicas oficiales asturianas fueron discretas. Finalmente el monarca organizó un viaje oficial con la corte a la tumba compostelana, y mandó construir en el 834 una iglesia que acogiese el mausoleo. Teodomiro presentó argumentos que acreditaron al monarca su certeza en el hallazgo, y éste termina por reconocerlo y avalarlo. Pero construyendo una muy modesta iglesia, lejos del prerrománico asturiano. Esta iglesia es la primera construcción del Locus Sanctus Iacobi y la futura Compostela. El modesto e insuficiente templo de Alfonso II durará apenas 40 años, ya que en el 872 fue sustituido por la basílica promovida por Alfonso III el Magno, levantado con más nobles materiales,

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Templo de pequeñas dimensiones y construcción sencilla, en el que destaca el dintel esculpido de su fachada principal. (B) Planta rectangular simple. Baptisterio exento al norte de la iglesia. La arqueología poner al descubierto el umbral de la que sería la entrada principal a este templo. Se trata de la solería y arranques de los muros, todo en una fábrica sencilla. En su cabecera alberga la tumba del apóstol (A). Salva el acusado desnivel del terreno mediante el aterrazamiento de lo que era una ladera de pendiente importante, lo que permitió la definición de un espacio en torno a la iglesia del que, posiblemente, quedan restos del muro de cierre.

IGLESIA DE ALFONSO II

IGLESIA DE ALFONSO II

Iglesia de Alfonso III

En el año 899 la humilde capilla de Santiago, construida por Alfonso II, es sustituida por un templo mucho mayor que ordena construir el rey asturiano Alfonso III. De planta basilical de tres naves separadas por pilares de base cuadrada, con cubierta completamente abovedada, una cabecera rectangular que acogía en su interior el mausoleo apostólico y un baptisterio adosado a su muro norte, cuya pila bautismal se conserva en la actual catedral. Pórtico de entrada. El pilar cuadrado es característico de la arquitectura prerrománica asturiana. La tribuna abovedada, la decoración pictórica de sus muros, que recuerda a San Julián de los Prados, o la cabecera de testero plano y el presbiterio elevado, con una solución similar a la que encontramos en Santa Cristina de Lena, son también característicos del Prerrománico asturiano.

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El obispo Sisnando I levanta un hospital y las primeras torres defensivas de la población.

Sisnando II convierte, después de obtener permiso para ello del rey Sancho I, en un recinto amurallado completo formado por murallas, torres y un foso. Este primer sistema defensivo contaba con muros de 1,80 metros de grosor, torres rectangulares de 6,20 x 4,90 metros y un foso de 8 metros de anchura que rodeaba la zona que en nuestros días ocupa la catedral, la plaza de la Quintana, el convento de San Paio y algunas calles próximas. 30

La Basílica y ciudad de Alfonso III

En su día la mayor iglesia del reino. Necesaria para acoger una peregrinación y un obispado Traslado de la curia de Iria a Compostela, bajo la inspiración del obispo Sisnando I, y las primeras preocupaciones defensivas en un enclave que adquiere una mayor importancia y complejidad, todo ello bajo el episcopado de Sisnando de Liébana. <<< Planta y alzado de los restos de una torre que flanqueaba la entrada occidental de la primitiva cerca del "Locus Sanctus lacobi" (Seg. F. Pons Sorolla).

Las excavaciones de D. Manuel Chamoso Lamas nos ofrecen información veraz (CHAMOSO LAMAS, M., 1956 y 1957)Se concluyó en el 899. Edificio de planta basilical. Fábrica de mampostería sobre piedra de la zona, una variedad de esquisto, con esquinas y vanos de sillería de granito, a veces aprovechadas. Planta de tres naves. Cabecera con ábside cuadrangular que contiene el mausoleo apostólico. Nártex o atrio porticado que acoge la facha da principal del templo. Del mismo ancho que la nave mayor de la iglesia y configurado por una doble arcada lateral y un único arco mayor que los anteriores en el frente. L Baptisterio en el lado norte con el altar dedicado a S. Juan Bautista. Cubierta a dos aguas sobre entramado de madera. No hay arranques de arcos que pudieran ser indivcio de algúna bóveda. Suelo de hormigón de cal, arena y cuarzo. De la decora ción: se reaprovecha el dintel esculpido de la iglesia de Alfonso II, y se usaron columnas marmoreas de origen tardoantiguo que Alfonso III trajo de al-Andalus

• Fuente: APUNTES ARQUEOLÓGICOS SOBRE LA FORMACIÓN DEL "LOCUS SANCTUS IACOBI” Y LOS ORÍGENES DEL URBANISMO MEDIEVAL COMPOSTELANO. José Suárez Otero Museo de la Catedral de Santiago

Cementerio

Las excavaciones han mostrado un área cementerial en un espacio, el atrium, que se construye junto con la basílica. Según la costumbre cristiana de enterrar ad loco santo y de la prohibición de hacerlo en el interior de la iglesia. El cementerio se disponía en una amplia área del frente occidental de la iglesia, proyectándose en una franja estrecha e inmediata a los muros de la propia basílica. Las tumbas, que acogen siempre inhumaciones individuales de cuerpo extendido y sin acompañamiento alguno de ofrendas funerarias, presentan diversas fórmulas en función de la evolución del rito a lo largo de tres siglos y de la condición social de quien se inhuma en cada una de ellas. Así encontramos que...

Antes de la inventio

: Todo parece indicar que los sarcófagos con lauda decorada pertenecen a una necrópolis preexistente al descubrimiento del sepulcro y al subsiguiente desarrollo de Compostela como lugar de culto y burgo altomedieval. Los datos de las fuentes con respecto al abandono del lugar en el siglo VIII (LOPEZ FERREIRO, A., 1899; GUERRA CAMPOS, J., 1982; LÓPEZ ALSINA, F., 1988) y el carácter cristiano de esta necrópolis, nos conducen a proponer una cronología para la misma de ca. s. V VII, con cierta imprecisión en cuanto a sus inicios. Formarían parte de una extensa necrópolis ubicada en un área de ladera orientada al SO y a la que no era ajeno, al menos posicionalmente, el edículo apostólico, quizás como prueba de un origen antiguo de la misma o de la existencia de otra realidad cementerial anterior.

Antes de la inventio

: A necrópolis cristiana de los siglos V-VII, que parece disponerse de manera extensa en la ladera donde se hallaba el mausoleo apostólico, corresponden las tumbas no antropomorfas excavadas en la roca -trapezoidales de esquinas redondeadas, con el lugar de la cabeza indicado sólo en el interior-, los sarcófagos pétreos, aunque ahora se hallen desplazados, y algunas tumbas de ladrillos o tégulas. La carencia de ajuar y la orientación revela el carácter cristiano de este cementerio, mientras que la existencia en él de casos de destrucción de tumbas reaprovechadas en total o en parte de sus materiales prueba su larga perduración.

Después de la inventio

El desarrollo de la ciudad en el siglo XI (LOPEZ ALSINA, F. 1988) conlleva la destrucción de la necrópolis preexistente, con la reutilización de algunos de sus elementos, que permite así constatar la existencia de esa necrópolis. En ese reaprovechamiento de elementos preexistentes se sitúa una parte de los sarcofagos pétreos, bien in situ, o bien desplazados, pero siempre alejados de ubicaciones de privilegio que debieron tener originalmente. La pervivencia en el uso de este tipo de sarcófagos incidirá en la morfología de algunas tumbas de la necrópolis altomedieval: v.gr. sarcofago de la tumba de Aroaldo o restos de la estola en la tampa epigráfica de la tumba de Martinus.

1. La fórmula más extendida es la tumba sencilla conformada por un murete de piedras y cubierta de lajas, que ocupaba especialmente toda la última etapa de uso del cementerio. Este tipo parece acoger a gente común entre la que destaca la presencia de algún peregrino. 2. De parecidas características, aunque con algunos cambios según la condición social del enterrado, son las tumbas en forma de arco de paréntesis y otras rectangulares con una construcción más cuidada, con materiales de cierta calidad, como ladrillos, aunque en condición de reaprovechamiento de estructuras anteriores. 3.Otro grupo más específico es el que engloba a las tumbas excavadas en la roca natural que aparece debajo de la capa de tierra en la que se asientan todas las estructuras de la Compostela altomedieval, así como la propia necrópolis. A este grupo corresponden las tumbas más antiguas de la necrópolis, pero también aquellas que mediante una cubierta en forma de laja monolítica con inscripción, nos permite saber que pertenecían a personas de especial relevancia en el contexto de la basílica compostelana, fundamentalmente en el ámbito religioso. La máxima expresión de esa relevancia a través de la tumba está en la aparición de recintos funerarios, mausoleos, construidos adyacentes a las paredes de la basílica...

YA ES UNA CIUDAD en el siglo X Todas estas transformaciones hacen que, apenas un siglo después de su fundación, podamos hablar de una ciudad, la Civitas Iacobi, bien delimitada por unas defensas que encierran un territorio de hombres libres, un recinto en el que nos encontramos con circulación de moneda. De esta Compostela prerrománica, cabeza espiritual del reino astur-leonés, nos quedan algunas ruinas y escasos pero muy valiosos recuerdos.

Compostela surge en el siglo IX como resurrección de viejas estructuras y ¿olvidadas? tradiciones memoria de un apóstol. Parte de restos de ese mundo, sobre cánones que intentan recuperarlo. Pero en esencia supondrá la muerte definitiva del mismo, que habría subsistido en una identidad específica, muy humilde, de lo galaicorromano, que se consolidó en la etapa llamada "germánica” y resistió el embate musulmán. Compostela supondrá en el siglo IX la vanguardia de una nueva época, ya plenamente medieval, que en lo político y cultural acabará imponiéndose a lo largo de los dos siglos siguientes a todo el Noroeste. E incluso será centro de peregrinación para toda Europa.

La primera de estas dependencias funerarias contenía la lauda de la tumba de Teodomiro, cuya aparición es prueba de la existencia de este hombre y su vinculación al descubrimiento de la tumba, tal y como las fuentes documentales ya señalaban, al tiempo que nos ofrece la lauda epigráfica más elaborada y un posible referente formal de las que le sucederán. Se trata de una pieza rectangular con un rebaje perimetral que encierra un campo epigráfico, en donde se recoge la fecha de la muerte de este prelado (843), y otro decorativo, que aparece presidiendo la inscripción y recoge una cruz de tipo asturiano con apéndice para sujeción a una peana o a un astil. Esta pieza aparece en un habitáculo cuadrangular adosado al muro sur de la iglesia de Alfonso III, con la que carece de comunicación directa. Es de mampostería de esquisto trabada con cemento e incluyendo sillares graníticos reaprovechados de construcciones anteriores., fábrica que, al interior, aparece enlucida por un estuco de cal. Adosado a este mausoleo aparece otro habitáculo de características semejantes aunque de peor fábrica, que parece corresponder al enterramiento de un presbítero llamado Anastasio, ya del s. XI; correspondencia aún más controvertida que la anterior dado que la lauda aparece simplemente formando parte de los escombros que colmataban este espacio, sin ninguna indicación de relación con tumba alguna.

Murallas

La construcción de las murallas va de la mano de la toma de conciencia de ser un nuevo núcleo urbano. Y en este caso con un tesoro que guardar.

Surge como una creación ex novo, para unas necesidades y objetivos también nuevos. Sobre los restos antiguos se sobreimpone una realidad nueva, implícita en tres aspectos fundamentalmente: +la propia revalorización de la tumba del Apóstol, +el traslado de la sede de Iria a Compostela y +la intervención de la monarquía. Cambios en la esfera ideológica: +la construcción del santuario +y su significación en el proceso de reconquista cristiana, +y en la organización del territorio: Compostela como articuladora del espacio interior agrícola, frente a Iria como canalizadora hacia un espacio exterior comercial +y en la esfera política: el nuevo marco asturleonés frente a al-Andalus.

El trazado de la muralla discurría por el límite del antiguo locus, es decir, por las calles Acibechería, Preguntoiro, Xelmírez y cerraría aproximadamente por el lateral oeste de la Catedral. El segundo estaba compuesto por foso y empalizada, a modo de segundo anillo de protección, y su trazado discurría por las rúas de Rodas, Hospitaliño, Costa Vella, Costa de San Francisco, Carretas, Trinidad, Rajoy, Rodrigo de Padrón, avenida de Figueroa, Senra, Fonte de Santo Antonio, Ensinanza, Virxe da Cerca y Aller Ulloa.

De la muralla de Sisnando II quedan vestigios hallados en la zona de la Azabachería, y en 2009, en las obras de remodelación del antiguo Banco de España para habilitarlo como nueva sede del Museo de las Peregrinaciones, se encontró una sección en bastante buen estado, con estructuras de los fosos y empalizada

El trazado de la muralla discurría por el límite del antiguo locus, es decir, por las calles Acibechería, Preguntoiro, Xelmírez y cerraría aproximadamente por el lateral oeste de la Catedral. El segundo estaba compuesto por foso y empalizada, a modo de segundo anillo de protección, y su trazado discurría por las rúas de Rodas, Hospitaliño, Costa Vella, Costa de San Francisco, Carretas, Trinidad, Rajoy, Rodrigo de Padrón, avenida de Figueroa, Senra, Fonte de Santo Antonio, Ensinanza, Virxe da Cerca y Aller Ulloa.

De la muralla de Sisnando II quedan vestigios hallados en la zona de la Azabachería, y en 2009, en las obras de remodelación del antiguo Banco de España para habilitarlo como nueva sede del Museo de las Peregrinaciones, se encontró una sección en bastante buen estado, con estructuras de los fosos y empalizada

En la segunda mitad del siglo X existía un circuito amurallado con torres en torno a lo que fue el Locus Sanctus lacobi, cuyos antecedentes cabe rastrear ya a fines del siglo IX, sin que en la actualidad se puedan deslindar con total seguridad lo ejecutado en un siglo u otro. De este primitivo sistema defensivo, anterior al que circunvalará el burgo medieval, tenemos restos tanto en el subsuelo de la basílica como en el de sus inmediaciones: +el basamento de una gran torre y fragmentos del lienzo de muralla, que aparecen a los pies del actual templo románico (Lám. VI), y el basamento de otra torre y el lienzo anexo, así como la presencia de un foso, recientemente descubiertos en un solar de la calle Azabachería (REY, E. y RODRÍGUEZ, E., 1987).

Los restos descubiertos nos dibujan un sistema defensivo con muros de ca. 1,80 m. de grosor en el que se intercalan torres de configuración rectangular y unas dimensiones de ca. 6,20 x 4,90 m. y todo ello circunvalado por un foso cuyas dimensiones están aún por determinar

Muralla de Cresconio

Este obispo edifica en el s.XI la segunda muralla de la ciudad, más amplia, que llegará hasta el siglo XIX. Hoy solo queda de este recinto una de sus puertas y algunas torres y pequeños lienzos incorporados a otras edificaciones. Tenía 7 puertas: 4.Porta do Camiño, de los peregrinos francos; 3.la de Mazarelos, por donde entran los carros que abastecen la urbe del vino del Ulla o del Ribeiro; 2.P. da Mámoa, 1.Porta Faxeira o de los peregrinos lusitanos; 7.P.da Trinidade o del Santo Peregrino, por la que se salía al cementerio 6..Subfratribus, o de San Francisco. 5. Porta da Pena.

Además de su función defensiva, la muralla ofrecía el control fiscal de personas y mercancías al ser paso obligado por sus puertas. Su estado de conservación de la muralla era responsabilidad municipal, que destinaba a su conservación una parte de los impuestos.

De la estructura defensiva de Cresconio, se ha identificado la estructura completa de la muralla es en el subsuelo de la avenida de Rajoy, (>) donde los restos una vez excavados y registrados, fueron protegidos y tapados de nuevo para su conservación. Además están los torreones de la fuente de San (<) Antonio, el de la plaza da Oliveira y el de puerta de Mazarelos. (>)

Escribe un título genial aquí

+ info sobre ls murallas

Dibujos de la web de Alberto Solana de cada una de las puertas en su estado original

La ciudad sigue creciendo a partir de la nueva catedral. Pero el objeto de mi trabajo llega hasta este punto. Busco toda la información posible sobre los primeros 1000 años del Locus Iacobi, que ayuden a razonar la veracidad de lo que contamos.. Si tienes cualquier información te agradezco me ayudes haciéndomela llegar a: nsaludes@gmail.com

¡GRACIAS!

Bibliografía consultada

• SÁNCHEZ SÁNCHEZ, XOSÉ M. Informaciones históricas de la Inventio: Un status quaestionis
• FERNÁNDEZ RODRÍGUEZ, M. (2006): La localización de Asseconia. Compostellana Sacra I: Estudios Xacobeos. Instituto Teológico Compostelano. 515-516.
• FRANCO TABOADA, A. (1987): Los orígenes de Compostela: una historia dibujada. Diputación Provincial de La Coruña.
• LÓPEZ ALSINA, F. (1986): De Asseconia a Compostela. Pervivencia de estructuras viarias en la Alta Edad Media. Compostellanum, vol. 31, n. 3-4. 307-314.
• LÓPEZ FERREIRO, A. (1898): Historia de la Santa A. M. Iglesia de Santiago de Compostela, vol. I. Imp. y Enc. del Seminario Conciliar Central

• SÁEZ TABOADA, B. (2002): Aportaciones al trazado de la vía 19 del itinerario de Antonino a su paso por Galicia. SPAL: Revista de prehistoria y arqueología de la Universidad de Sevilla, n. 11. 389-408.
• SÁNCHEZ MONTAÑA, C. (2016): Asseconia, la génesis urbana de Compostela: estudio arqueogeográfico. Fol de Veleno: Anuario de Antropoloxía e Historia de Galiza, n.6. 261-295.
• SUÁREZ OTERO, J. E CAAMAÑO GESTO, M. (2003): Santiago antes de Santiago. Historia de la ciudad de Santiago de Compostela. Consorcio da cidade de Santiago de Compostela. 23-48.
• SUAREZ OTERO, J. (2014): Locus Iacobi. Orígenes de un santuario de peregrinación. Universidade de Santiago de Compostela.
• VILLANUEVA GONZÁLEZ, R. (2006): Las vías romanas 19 y 20 del itinerario de Antonio. El Nuevo Miliario: boletín sobre vías romanas, historia de los caminos y otros temas de geografía histórica, n. 3. 25-36