Diana de Versalles

Diana de Versalles

Marta Déniz Pérez

Índice

3. Autor de la escultura

1. Descripción de la escultura

2. Mito de Artemisa

4. Localización actual

Descripción de la escultura

La estatua de Versalles está realizada en mármol y tiene un tamaño mayor que el natural, puesto que mide dos metros. Se trata de una escultura que representa la figura de una mujer joven, en concreto se trata de la representación de la diosa Diana/Artemisa. Respecto a la vestimenta, se encuentra ataviada con un quitón corto dórico, un peplo de tipo "epiblema"(túnica llevada sobre el quitón) ceñido a la cintura por un cinturón y unas sandalias.

Mito de Artemisa/Diana

Era hija de Zeus y Leto. Hera, la esposa de Zeus, descubrió el romance entre su marido y Leto. También supo que ella estaba embarazada. Por eso decidió perseguirla sin tregua, de este modo logró que llegara a una isla desierta para dar a luz. Además, prohibió a su hija Ilitía, diosa de los partos, que asistiera a Leto en este momento. Por lo tanto, Leto sufrió grandes dolores y el parto se retrasó nueve días. Al cabo de estos, los dioses se conmovieron de su sufrimiento y permitieron que naciera Artemisa y que ella misma, recién nacida, asistiera a su madre en el alumbramiento de su hermano mellizo, Apolo.

Mito de Artemisa

Dice el mito de Artemisa que cuando la diosa tenía apenas 3 años, le pidió a su padre, Zeus, que le concediera nueve deseos. Estos eran: permanecer siempre virgen; tener muchos nombres; ser la “Dadora de Luz”; tener un arco y flechas, y una túnica hasta las rodillas; contar con sesenta hijas de Océano, todas de 9 años, para que fueran su coro; y 20 ninfas como doncellas para cuidar de ella; gobernar sobre las montañas, y ayudar a las mujeres en los dolores del parto. Zeus le concedió todos sus deseos y ésta pasó su niñez aprendiendo el arte dela cacería y preparandose para vivir en los bosques.

Una de las historias más conocidas es la de Acteón. Este era un tebano que, sin proponérselo, vio desnuda a la diosa en un río, mientras él iba de caza. Aunque las ninfas se apresuraron a cubrirla, no lo lograron a tiempo. Artemisa, muy enojada por esa intromisión en su pudor, convirtió a Acteón en ciervo y azuzó a sus propios perros para que lo devoraran.

Autor de la escultura

El original se atribuyó durante mucho tiempo a Leocares basándose en una comparación con el Apolo de Belvedere, con el cual comparte su representación en movimiento. Los estilos son igualmente análogos. La aproximación, hecha en el siglo XVII, sugirió que las dos estatuas formaban una pareja y que podrían representar la masacre de los

Nióbidas

Se ha propuesto más recientemente la atribución de la obra a Praxíteles, basándose en el quitón corto que viste la diosa, ya que no se trata de una vestimenta apropiada para la caza. Se trataría más bien un krokôtós (κροκωτός), es decir, el vestido color azafrán que llevaban las osas o jóvenes que prestaban servicio al culto de Artemisa en Braurón.

Localización actual

Esta escultura es una copia romana realizada a partir de una escultura original griega hecha de bronce y fue hallada en la región de Nemi, en la provincia de Roma (Italia). En el año 1556 fue donada por el Papa Pablo IV al rey Enrique II de Francia. Fue instalada en el Jardín de la Reina pero en el año 1605 por orden de Enrique IV de Francia fue trasladada al Palacio del Louvre (en la actualidad el Museo del Louvre).

Nióbidas

Los Nióbidas eran, en la mitología griega, los hijos que Níobe tuvo con Anfión. El mito narra que Níobe se había burlado de Leto porque esta había tenido poca descendencia (dos hijos: Artemisa y Apolo), mientras que ella tuvo mucha (un número entre doce o veinte, según distintas fuentes). Para castigarla, Apolo y Artemisa mataron a casi todos los nióbidas, dejando vivos solo a dos de ellos. Apolo mató a los hijos varones mientras practicaban atletismo, dejando vivo a Amiclas. Por su parte, Artemisa a las hijas, dejando viva solo a Melibea (también llamada Cloris).