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Tono, Intensidad y Ritmo
Lissa Mora
Created on October 24, 2020
Tarea
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Transcript
Lectura en voz alta: tono, intensidad y ritmo.
A través de las características de la voz y los gestos corporales nuestro interlocutor expresa sus sentimientos.
Estrada Cruz Eduardo
La forma en que entendemos el significado de un mensaje está relacionado directamente con el tono de la voz, la intensidad, el ritmo… Una elevación del tono, una pausa o alargar una palabra al pronunciarla, son ejemplos de señales prosódicas, las cuales hacen reaccionar inmediatamente a las células del cerebro para descodificar un mensaje.
SECTION 01
El tono
- El tono es el timbre de la voz con el cual nacemos; puede ser formal o informal, alegre o serio, amistoso o protocolario.
- Un tono vacilante denota inseguridad. Una voz sin titubeos transmite seguridad, una voz monótona y lineal comunica aburrimiento. Los cambios de tono manifiestan duda, enfado o temor.
El ritmo de la voz es el número de palabras por emisión de voz. Un ritmo normal es de dos palabras por segundo. Algunos ritmos son rápidos y enérgicos. Otros deliberados y lentos. Todo el mundo tiene su ritmo para hablar y pensar. Algunos ritmos son rápidos y enérgicos. Otros deliberados y lentos.
SECTION 02
La intensidad
La intensidad de la voz es el volumen con el cual se emite el sonido. Puede expresar intimidad, suspense, sorpresa o impulso: un volumen alto, comunica la intención de dominio; un volumen bajo, demuestra timidez o inseguridad. Los cambios de intensidad se emplean para enfatizar los puntos clave del discurso.
SECTION 03
El ritmo
Consejos para situaciones reales en la práctica oral
"Hablar para convencer"
Javier Reyero
Se trata de un defecto muy extendido. Se pone muy poco cuidado en cuidar las formas. Le suele ocurrir a las personas tímidas, a aquéllos que se replantean al comienzo de cada frase qué están pronunciando ante esa gente que escruta su rostro y sus palabras. Solución: Reprímase al acabar cada frase. Muérdase la lengua si es necesario. Tiene que cambiar urgentemente ese bueno por una pausa voluntaria.
Abuso de la expresión «bueno» como arranque de todas las fases del discurso
Los cambios de volumen son un recurso poco utilizable durante una presentación, pero es imprescindible alcanzar un mínimo de decibelios que hagan del discurso algo accesible para la audiencia. Solución: Compruebe en los primeros instantes de la intervención si todos los implicados atienden a sus primeras palabras. Si aprecia gestos de esfuerzo o desconcierto, el volumen de su voz no estará siendo el adecuado. Eleve la voz de forma paulatina. Tenga cuidado para no pasar del defecto al exceso.
Volumen de la voz excesivamente bajo
Se mezclan aquí dos problemas: estado de nervios propio de una presentación en público y no saber muy bien qué hacer con las manos. Cualquier movimiento incontrolado de las manos, con un cable, la tendencia a tocarse la ropa o atusarse el pelo delatan al interviniente, desviandose del contenido. Solución: Trate de sustituir el pelo, la ropa o el cable del micrófono algún objeto que atenúc su nerviosismo. Un bolígrafo, un rotulador o un puntero.
Jugar con los faldones de la chaqueta y el cable det micrófono
Gracias por su atención