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El diálogo como recurso narrativo
ingresoprepararte
Created on July 6, 2020
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Transcript
Los recursos narrativos
El diálogo
El diálogo
Junto con la descripción, el diálogo es otro de los recursos con los que cuenta el narrador para dar dinamismo a su historia. Como hemos visto anteriormente, el diálogo es una alternancia de voces entre dos o más personajes. Cada intervención va en un renglón diferente y comienza con una raya de diálogo. Veamos un ejemplo de diálogo…
—Aquí traigo aparatos para vender —dijo. —Enséñemelos —dijo papá. —Esta es la máquina de hacer los deberes. Apretando el botoncito rojo, se resuelven los problemas; el botoncito amarillo es para desarrollar los temas, y el botoncito verde sirve para aprender geografía. La máquina lo hace todo ella sola, en un minuto. —¡Cómpramela, papá! —dije yo. —Bueno. ¿Cuánto pide por ella? —No quiero dinero —dijo el hombrecillo. —¿Cómo? ¿Acaso usted me la dará gratuitamente, sin esperar nada a cambio? —No, pero no quiero dinero por la máquina. Quiero el cerebro de su hijo.
¿Qué características presenta el diálogo del ejemplo anterior?
- Cada vez que habla un personaje, se utiliza un renglón diferente.
- La voz de cada personaje aparece precedida por la raya de diálogo.
- La parte narrada queda claramente diferenciada del diálogo.
- Si habla un personaje y luego el narrador va a aclarar algo, la raya de diálogo vuelve a aparecer por segunda vez. La oración siempre termina con un punto:
¿Es obligatorio incluir un diálogo?
¿Es obligatorio usar diálogos en una narración? ¿Para qué sirve hacerlo? No, de ninguna manera es obligatorio su uso. Depende cada texto puede ayudar a que se entienda mejor, a que sea más fácil leerlo, a que conozcamos mejor a los personajes, etc. Es importante saber incluir un diálogo en el momento preciso y que el contenido del mismo sea necesario para el desarrollo de la historia.
Veamos otro ejemplo…
Marta caminaba lentamente alrededor del lago cuando se cruzó con un viejo amigo. -Hola- dijo Marta -Hola- respondió Luis -¿Cómo estás, Martita, tanto tiempo? - Muy bien, Luis. -¿Alguna novedad en tu vida? - No, ninguna. - Nos vemos- saludó Marta - Adiós- respondió Luis.
¿Les parece que ese diálogo es importante para la historia? ¿Aporta algo nuevo? ¿Nos brinda información sobre los personajes que no conocíamos?
Nada de eso… Sólo usá diálogos cuando creas que los personajes tienen algo que decir (y que además a vos se te hace más fácil de explicar si cada personaje lo dice directamente). El diálogo sirve para que “pase algo distinto en la historia”, para que avance. En el caso anterior, ese diálogo sólo le agrega renglones al texto pero no lo enriquece. Por lo tanto, es MEJOR no usar este recurso.
Algunos consejitos para cuando te parezca que tu texto necesita un diálogo:
Ante todo, hay que tener en mente evitar todo lo posible el “dijo María”, “afirmó Miguel” o “preguntó él”. Es mejor usarlos sólo cuando es MUY necesario.
¿Por qué? Bueno, imaginen un diálogo que sea así: —Pasame la sal —dijo el padre secamente. —Tomá —dijo la niña pasándole la sal. —¿Qué tal hoy en la escuela? —preguntó la madre mecánicamente. —Hoy vino un escritor a darnos una charla —respondió la niña con entusiasmo.
Como ven, el diálogo se hace mecánico y pesado. No tiene ritmo y el lector no podrá meterse bien en la historia.
Volvamos al diálogo anterior que, aunque no es muy largo, nos puede servir como ejemplo también en este caso: —Pasame la sal. —Tomá, papá.(Al usar la palabra “papá”, nos indica quién habla en cada caso) La madre miró a su hija, que disfrutaba de la comida sin darse cuenta de la mala onda que reinaba en la casa. —¿Qué tal hoy en la escuela? —¡Hoy vino un escritor a darnos una charla!
¡Ahora a ejercitar!
- Leé con mucha atención el siguiente texto y luego reescribilo en forma de diálogo o conversación. No olvides usar los signos de puntuación correspondientes.
Ahora vamos a incluir un diálogo en un texto narrativo:
2. Leé el siguiente fragmento e inventá un diálogo entre Alberto y su mamá. Cuando Alberto salió del baño, su mamá lo estaba esperando. Quería una explicación por aquel extraño comportamiento.