La rana glotona

Tidalik, la rana glotona

Hace mucho tiempo, Australia era una isla llena de ríos, lagos y grandes bosques de eucaliptos. Allí vivía una rana gigante llamada Tidalik.

Un día se despertó con muchísima sed

Se puso a beber el agua del lago hasta que... ¡Lo dejó sin agua! Pero, cuanto más bebía, más sed tenía y más se enfadaba...

Fue bebiendo y bebiendo...

Primero los lagos,

Después los ríos...

Y finalmente el océano hasta que no quedó ni una gota de agua.

Cansada de tanto beber, se fue a dormir.

Las plantas desaparecieron y todo se convirtió en un desierto.

Un día se reunieron todos los animales para pensar alguna idea:

Cuando la encontraron se les ocurrió hacerla reír para que sacara todo el agua que tenía dentro de su barriga.

Los koalas contaron chistes,

Los canguros hicieron saltos muy divertidos...

y el emú puso caras muy graciosas.

Pero no lo consiguieron...

Entonces, la cacatúa se miró sus uñas y tuvo una idea...

¡¡Voy a hacer cosquillas a Tidalik con mis garras!!

Y... ¿sabéis qué pasó?

Pues que Tidalik empezó a reírse a carcajadas...

Cada vez más y más fuerte...

Hasta que...

Un gran chorro de agua comenzó a salir de su boca.

Ríos, lagos, mares y océanos se volvieron a llenar.

Tidalik se rió tanto que hasta se olvidó de su mal humor...

Por eso, cada vez que el agua de ríos y lagos crece mucho en Australia, la gente dice que es porque Tidalik se está riendo a carcajadas.

Y, Catacrig catacrog... Este cuento terminó.