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La historia del tango
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Transcript
Tango
La Historia del
"patrimonio argentino"
ORIGEN
El tango, como género musical, nació a fines del siglo XIX en una Buenos Aires en pleno crecimiento, que recibía barcos llenos de inmigrantes europeos. En aquella época, se tocaba la habanera, de origen cubano que surgió a partir de la contradanza europea, también la guajira, tango flamenco, o el fandango.
El tango, como género musical, nació a fines del siglo XIX en una Buenos Aires en pleno crecimiento, que recibía barcos llenos de inmigrantes europeos
Los descendientes de esclavos africanos conservaron sus ritmos de tambor en el candombe. El arraigo a este nuevo país, Argentina, dio lugar a una fusión musical engendrando primeramente la milonga, de ritmo ágil, luego el tango.
Estos tambores, flautas y guitarras serían luego reemplazados por el piano, el violín y el bandoneón: los tres instrumentos básicos del tango. Su ritmo es conocido como el 2×4, aunque a veces sea tocado en 4×8.
El género se fue estructurando poco a poco y los músicos, aficionados. Era un arte urbano, popular, que se expresaba no sólo enBuenos Aires, sino también en Montevideo, Uruguay. El tango tenía su propio lenguaje: el lunfardo, jerga de los mafiosos que dejaría su impronta en el habla porteña.
El Lunfardo
La palabra lunfardo es de origen lombardo, idioma hablado principalmente en Lombardía (región ubicada en el norte de Italia). Surgió en Buenos Aires y sus alrededores durante la segunda mitad del siglo XIX con el gran aporte de las distintas inmigraciones, sobre todo la italiana; y con palabras de origen indígena, africano, y gauchesco, que ya había en la Argentina. El lunfardo más cerrado comenzó como lenguaje carcelario de los presos, para que los guardias no los entendieran, a fines del siglo XIX. Muchas de sus expresiones llegaron con los inmigrantes europeos; en tal caso, cuando ocurre una mezcla de lenguas españolas e italianas en el área rioplatense, se produce el cocoliche, del que derivan muchísimas palabras lunfardas. En sus orígenes, el lunfardo también tuvo aportes provenientes de Francia, especialmente del argot francés (por ejemplo, las palabras brema, franelear, griseta, macró) Por otro lado, tiene tres partes importantes: el sustantivo, el adjetivo y el verbo; pero carece de artículos, pronombres, preposiciones y conjunciones; como resultado, se pueden expresar frases en lunfardo puro pero no oraciones.
Éste, narraba desengaños amorosos y también las realidades sociales, a menudo grave o sarcástico, el tango era para el libretista Discépolo, “un pensamiento triste que se baila”. “El tango encarna la quintaesencia del argentino. Como ningún otro género, transmite el temperamento conformado de tristeza, rabia y gracia, no obstante, éstos se encuentran contenidos dolorosamente”, escribió Saúl Yurkievich en Los poetas del tango (Gallimard).
Desde el principio, la milonga y el tango encontraron su complemento natural en el baile de pareja, y curiosamente, al principio, entre hombres. Practicaban en la calle, en los conventillos – casas muy pobres donde vivían apiñados los inmigrantes -, inventaban la danza a medida que la música se iba creando. Luego iban a bailar a los prostíbulos, con las prostitutas también procedentes de Italia, España, Francia… Es por ello que en los comienzos, el tango tenía una muy mala reputación: era la música y el baile de los barrios bajos y de los truhanes.
Las primeras partituras llegaron a Europa, especialmente a Francia, a bordo de la fragata Sarmiento en los primeros años del siglo XX. Esto causó gran frenesí. París y la Belle Epoque, estaban exaltados por el tango, e incluso la burguesía, todos quedaron prendados de esta danza que se bailaba en los brazos del otro. Y como todo lo que sucedía en París, provocaba interés en Buenos Aires, el tango adquirió, en consecuencia, su título de nobleza también en Argentina, en donde hasta aquel entonces no se lo consideraba de buen gusto.
"La Guardia Vieja"
La edad de oro: las orquestas típicas que hacen bailar
Los primeros cantantes y músicos: la “vieja guardia”, compusieron hasta los años 1920 la base del tango: El Entrerriano, de Rosendo Mendizábal (1898), La Morocha de Enrique Saborido (1905), El Choclo de Ángel Villoldo (1903), uno de los más famosos con Francisco Canaro y Roberto Firpo, que fue quien compuso el tango entre todos los tangos: La Cumparsita (1916). Fueron ellos los que impusieron el bandoneón, que se transformó en instrumento representativo del tango. El cantante más famoso de todos los tiempos, Carlos Gardel, triunfó en los años 1920 y 1930, hasta su trágica desaparición causada por un accidente de avión en 1935.
Carlos Gardel
Los tríos y cuartetos le dejaron el lugar a las orquestas típicas, que incluían bandoneón, violín, contrabajo y piano, con frecuencia eran unos diez instrumentos que acompañaban a uno o dos cantantes, modelo que Julio de Caro comenzó a poner en práctica en los años 1920. Estas Orquestas típicas tocaban para que la gente baile, en los salones de baile, cabarés y academias que se multiplicaban en Buenos Aires y el mundo entero. Su edad de oro transcurrió en los años 1940. Fue la época de las orquestas de Osvaldo Pugliese, Aníbal Troilo, Carlos di Sarli, Horacio Salgán, Osvaldo Fresedo, Alfredo de Angelis, Juan d’Arienzo. Algunos fragmentos inolvidables llevaban la firma de grandes poetas tales como: Homero Manzi, Enrique Cadícamo, Enrique Santos Discépolo, Cátulo Castillo… cantados por Roberto Goyeneche, Ángel Vargas o Edmundo Rivero.
Instrumentos
Osvaldo Pugliese
En los años 1960 y 1970, los clubes y salones cerraron uno detrás de otro. El tango comenzó a aletargarse. Las grandes orquestas de quince músicos se redujeron a tres o cuatro. Los más conocidos continuaron tocando, intentando modificar el repertorio para adaptarlo a los nuevos gustos del público, pero ya no se bailó más el tango à Buenos Aires. De los vanguardistas, Astor Piazzolla es el que llegaría más lejos. Los arreglos de este gran bandoneonista, criticado profundamente por los “puristas”, le permitieron al tango, sin embargo, evolucionar, renovarse, sobrevivir y obtener un nuevo reconocimiento internacional del tango, como en su momento lo hizo Gardel con sus interpretaciones.
INTEGRANTES
Germán Lucci Solana Figueroa Martina Mandel Aylén Lagraña